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El River Plate-Boca Juniors se aplaza, pero aún no tiene fecha
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ya fue aplazado el sábado por incidentes violentos

El River Plate-Boca Juniors se aplaza, pero aún no tiene fecha

Tras la petición de Boca Juniors de suspender el partido y sancionar a River Plate, la Conmebol reaccionó anunciando el aplazamiento del encuentro. Aún no hay fecha prevista

Foto: Parte del dispositivo de seguridad en Buenos Aires para el River Plate-Boca Juniors. (EFE)
Parte del dispositivo de seguridad en Buenos Aires para el River Plate-Boca Juniors. (EFE)

El River Plate-Boca Juniors va camino de convertise en una final interminable. La ida se aplazó un día por la lluvia y la vuelta ha sido postergada sin fecha. Tras los incidentes occurridos este sábado, cuando el autobús de Boca fue atacado en su llegada al estadio Monumental y varios jugadores fueron heridos, el encuentro se trasladó a este domingo. Pero la negativa de Boca a jugar por no existir condiciones de igualdad forzó a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) a aplazar el partido, de momento sin fecha definida.

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"No están dadas las condiciones. Queremos que el partido se juegue sin desigualdades. Vamos a posponer el partido", declaró Alejandro Domínguez, presidente de Conmebol. "Esto no es una suspensión, es una postergación. En conjunto, con los dos presidentes, vamos a reprogramar el partido", añadió. La nueva fecha será decidida el martes en Asunción (Paraguay), donde tiene la sede el organismo.

No podrá ser, como pronto, hasta el próximo domingo, pues Argentina acoge el 30 de noviembre y el 1 de diciembre la Cumbre del G-20 y el Gobierno argentino no permitirá que el partido coincida con la visita a Buenos Aires de algunos de los líderes políticos más importantes del mundo. Pero no hay mucho margen, pues la Copa del Mundo de Clubes empieza el 12 de diciembre en Emiratos Árabes Unidos. El ganador del River-Boca jugará la primera semifinal el 18 de diciembre.

Boca pide una sanción a River

La solución adoptada por Conmebol no es lo solicitada por Boca Juniors, que pidió la suspensión definitiva y una sanción a su rival. Esto es lo que dice el comunicado publicado por Boca este domingo por la tarde (hora española):

"En la tarde de ayer Boca Juniors solicitó postergar el partido por los incidentes y se estableció como prioridad que el mismo pueda ser disputado en igualdad de condiciones. Luego de los hechos de violencia sufridos en las inmediaciones del estadio, de haber constatado la magnitud y gravedad de los mismos y las consecuencias que han generado en el plantel, Boca considera que esas condiciones no están dadas y solicita la suspensión del partido, así como la aplicación de las sanciones correspondientes previstas en el Artículo 18, para que la Conmebol actúe en consecuencia".

El artículo 18 del reglamento disciplinario de la Conmebol detalla las sanciones que la confederación sudamericana puede imponer a las asociaciones y clubes bajo su jurisdicción. Esas sanciones van desde una advertencia a la retirada de la licencia, pasando por el cierre del estadio, la obligación de jugar a puerta cerrada o en un tercer país, la descalificación y la retirada de un título.

El precedente de 2015

Boca no especifica que pida una sanción determinada, pero no es aventurado interpretar que pide la descalificación de River. En 2015, ambos equipos se enfrentaron en octavos de la Libertadores. En la vuelta, jugada en al Bombonera, varios jugadores 'millonarios' fueron atacados con gas pimienta. La Conmebol acabó descalificando a Boca por ese incidente.

Este domingo, Alejandro Domínguez había asegurado que el partido se jugará este domingo a la hora prevista, las 17:00 (21:00 en España). "No puedo hablar sobre suposiciones, no voy a hacer ninguna referencia a suposiciones o rumores. Tenemos un acuerdo de que el partido hoy se juega a las 17 horas porque no hay nada a este momento que modifique la decisión", dijo antes de que se conociera el comunicado de Boca. Mientras, River ya había abierto las puertas de su estadio. Como el sábado, los aficionados que entraron se han ido sin ver el partido.

El sábado, fueron los dos clubes los que consiguieron que el partido no se jugara. River apoyó a Boca, que no estaba dispuesto a jugar por el estado de sus jugadores, varios con problemas oculares y otros intoxicados por el gas lanzado a su llegada al estadio. Los médicos de la Conmebol no creyeron que esas lesiones fueran suficientes para suspender el partido y así se lo hicieron saber a Domínguez.

placeholder Carlos Tévez, jugador de Boca, el sábado por la noche en el Monumental. (EFE)
Carlos Tévez, jugador de Boca, el sábado por la noche en el Monumental. (EFE)

La Conmebol presionó para que se disputara el partido y aplazó el partido varias veces antes de aceptar su suspensión. Mientras, el Monumental estaba lleno de aficionados de River que llevaban horas esperando el comienzo del partido. Fuera se sucedían los enfrentamientos entre hinchas y policía, que lanzaba gases y bolas de goma. Hubo decenas de detenidos. Varios grupos de aficionados superaron el cordón policial y accedieron al estadio sin entrada. Eso provocó que la Agencia Gubernamental de Control (AGC) de Buenos Aires clausurara el recinto por un exceso de capacidad. Pero la sanción fue levantada este domingo tras el pago de una multa por parte de River.

El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, declaró que el partido se debería jugar a puerta cerrada. "Yo si fuera en provincia lo jugaría sin público", dijo al canal TyC Sports. Ritondo no tiene poder de decisión en el asunto porque el partido se juega en la ciudad de Buenos Aires, que constituye una entidad administrativa separada de la provincia. Ritondo, del mismo color político que las autoridades de la ciudad y del Gobierno central que preside Mauricio Macri, calificó de "aberración" las imágenes del último trayecto que realizó el autobús del Boca Juniors, que fue apedreado."Ahí hablan las claras de que es irracional jugar al fútbol así", expresó.

El River Plate-Boca Juniors va camino de convertise en una final interminable. La ida se aplazó un día por la lluvia y la vuelta ha sido postergada sin fecha. Tras los incidentes occurridos este sábado, cuando el autobús de Boca fue atacado en su llegada al estadio Monumental y varios jugadores fueron heridos, el encuentro se trasladó a este domingo. Pero la negativa de Boca a jugar por no existir condiciones de igualdad forzó a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) a aplazar el partido, de momento sin fecha definida.

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