Una ‘milagrosa’ placenta de yegua que no existió y el eterno martirio de Diego Costa

Se tocó la zona afectada el pasado sábado, levantó la mano y enfiló el camino del vestuario.Enésima recaída y la pesadilla que no acaba para un Diego Costa que ha visto cómo en el último año, las lesiones musculares le están martirizando sin piedad. En la misma zona deambas piernas. Un tormento que comenzó en el partido de ida de los cuartos de final de la Champions League que el Atlético disputó en el Camp Nou. Abril acababa de comenzar y las alarmas empezaban a dispararse. Y hoy en día la luz roja sigue encendida. Constantes recaídas y la solución que no llega. Como sucedió con el famoso episodio de la placenta de yegua…

En aquel primer momento, el parte médico del club hablaba de una ‘lesión muscular grado I del músculo semitendinoso de la cara posterior del muslo derecho (no rotura)y queda pendiente evolución’. El Atlético de Madrid insistió en todo momento que no había rotura, algo incierto como se deslizaba desde el interior del vestuario. Los siguientes capítulos de esta historia así lo confirmaron. Llegó el primer partido cumbre de la temporada y Diego sólo aguantó en el campo 13 minutos. Era el último partido de Liga con el título en juego; el jugador le insistió a Simeone que se encontraba en condiciones de jugar. No fue así y la decisión pudo ser fatal, pero finalmente el equipo rojiblanco se llevó la gloria proclamándose campeón. Era el 17 de mayo y apenas quedaba una semana para la final de la Champions League…

Costa fue un jugador fundamental para el Atlético de Madrid y el club optó contrarreloj por apostar por una sorprendente decisión. “Fue una pérdida de tiempo”, comentaron veladamente y con posterioridad desde el interior del club. En un viaje relámpago que quedó al descubierto en el primer momento, el futbolista se trasladó a Belgrado para ponerse en manos de la polémica doctora MarijanaKovacevic, una farmacóloga serbia, famosa por emplear placenta de yegua para tratar algunas dolencias musculares en deportistas. La búsqueda de una solución ‘milagrosa’ resultó estéril, como bien quedó demostrado días después.

Una errada decisión

Tres días antes de disputarse la gran final de la Champions League, el delantero hipano-brasileño viajó a Serbia para ser tratado por la doctora. La placenta de yegua -o caballo- no fue empleada para tratar a Diego Costa, según desvelaron en privado personas informadas del asunto, aunque los medios de comunicación hablaron masivamente del tratamiento equino. El futbolista fue tratado por la doctora, que le aplicó uno de sus ‘milagrosos’ métodos, pero el fracaso fue absoluto. MarijanaKovacevic ha sido protagonista de comentarios y artículos de todo tipo, sobre todo por parte de la comunidad médica, que subraya que sus métodos no tienen base científica acreditada.

Tres días después, en Lisboa, Diego Costa pedía el cambio en el minuto 8, debiendo abandonar el terreno de juego de inmediato. Un episodio que en opinión de muchos -sobre todo internamente si hablamos del Atleti- fue fundamental para que el Real Madrid ganara la Champions League.En un partido tan intenso, el Atlético regaló un cambio a las primeras de cambio. Simeone se empecinó en alinear al hispano-brasileño y erró el tiro. Desde entonces, nada ha sido igual en la vida del jugador, castigado de manera permanente por unas dolencias musculares que le están amargando la existencia.

Se presentó en el Mundial con la etiqueta de titular por el personal empeño de Del Bosque. El resultado final es de sobra conocido. Diego Costa fue una sombra en Brasil, fundamentalmente porque no estaba en perfectas condiciones físicas para afrontar una cita de tanta exigencia. Tras el descanso veraniego, se presentó como nuevo jugador del Chelsea como un cohete, marcando goles sin parar en las primeras jornadas de la Premier League. Pero volvieron a surgir los problemas. A principios de septiembre, tras un amistoso Francia-España, sufría una lesión miofascial en el músculo bíceps femoral de su muslo izquierdo. Abandonaba la concentración y su lugar para afrontar el España-Macedonia lo ocupaba Munir.

Toca esquivar el quirófano

En los últimos meses, la fragilidad física de Diego Costa se ha manifestado en diferentes momentos. Convocado para los dos últimos partidos que ha disputado la Selección española, tras ser examinado por los doctores de la RFEF, se emitió un parte médico que hablaba de ‘una rotura fibrilar, grado 1, del bíceps femoral del muslo izquierdo’. La semana pasada, Mourinho anunciaba que el jugador ya estaba curado, pero el pasado sábado sólo duró unos once minutos sobre el terreno de juego. Le esperan por delante unos cuantos días de rehabilitación y de descanso, mientras en el Chelsea la palabra ‘quirófano’ ya ha empezado a sonar.

Lo cierto es que en el último año, la misma zona -de ambas piernas- es territorio de extrema fragilidad si del cuerpo de Diego Costa hablamos. En el fútbol británico, los clubes son partidarios de tirar de bisturí en cuanto surgen dudas sobre una lesión. En este caso, la opinión de un español se impondrá y es la de Paco Biosca, Director Médico del Chelsea. Éste, como Mourinho, descartan por el momento la opción de que el atacante pase por el quirófano, pero el debate queda abierto. Lo que parece descartadaes la placenta de yegua...