Otra más de Pepe: roja por agresión en el duelo por el liderato en Portugal

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A poco más de dos meses de cumplir los 41 años y sigue al pie del cañón. Pepe continúa en la élite, liderando la zaga del Oporto y estando aún en algunas de las convocatorias de la selección portuguesa. Un caso único de un jugador que se ha resignado a colgar las botas a base de trabajo físico, pero también de intensidad. Algo que le ha acompañado en toda su carrera, muchas veces de forma excesiva.

Hablar de Pepe es hacerlo de uno de los centrales más duros que ha habido en las últimas décadas. Muy seguro por alto, veloz al corte y fuerte al choque, muchas veces demasiado, se hizo un nombre en Europa tras llegar al Real Madrid en 2007 a cambio de 30 millones de euros, siendo un fijo en la defensa madridista durante diez años. Y dejando en esa década una buena colección de acciones al borde del reglamento, o directamente violentas.

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EP

Tras dejar el Real Madrid, Pepe jugó un año y medio en el Besiktas antes de que en enero de 2019 regresara a casa, a las filas de un Oporto que lo fichó procedente del Marítimo allá por 2004. Lejos de pasar a ser un jugador residual, el zaguero, nacido en brasil pero nacionalizado portugués, se ha vuelto a hacer el jefe de la defensa hasta el punto de batir récords como el del jugador más longevo en jugar un partido en la historia de la Champions League, superando a Costacurta, y también el más mayor en marcar gol en la máxima competición continental.

Otra más de Pepe: roja por agresión

Este pasado lunes, Pepe volvió a ser Pepe. El defensa fue protagonista de una acción que el árbitro no dudó en sancionar: agresión y a la calle. El central dejó con diez a su equipo en el importante duelo que Sporting y Oporto disputaban en Lisboa, en el que el ganador se pondría al frente de la liga portuguesa.

En una acción en el minuto 50, ya con los locales ganando 1-0 con gol de Gyokeres, Pepe braceó en exceso antes de sacar una falta, impactando con su mano en la cara del defensor, Matheus Reis, lo que le costó la roja directa. El encuentro finalizó con 2-0 tras el tanto de Pedro Gonçalves pocos minutos más tarde, y el Sporting de Portugal se puso líder de la tabla, por delante del Benfica y del propio Oporto.