Bilbao pone fecha a su zona de bajas emisiones: restricciones y coches afectados

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El Ayuntamiento de Bilbao ha anunciado la entrada en vigor de su zona de bajas emisiones para el próximo 15 de junio, en consonancia con la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que insta a los municipios con más de 50.000 habitantes a establecerlas. Esta medida, destinada a combatir la contaminación atmosférica y promover una movilidad más sostenible, impondrá restricciones significativas a los vehículos más contaminantes que circulen por el centro de la ciudad.

La nueva ordenanza afectará inicialmente a los vehículos sin etiqueta ambiental o aquellos clasificados como tipo A, prohibiéndoles el acceso, la circulación y el estacionamiento en la zona designada durante los días laborables de 7:00 a 20:00 horas. Las restricciones para los vehículos clasificados como tipo B entrarán en vigor un año después, en un esfuerzo por implementar la medida de manera gradual. La zona de bajas emisiones comprenderá principalmente el distrito de Abando, delimitado por la ría y las calles Sabino Arana, Avenida del Ferrocarril, Autonomía y Bailén.

Moratoria para vehículos clasificados como tipo B

Se otorgará un año de moratoria para los coches con etiqueta B, permitiéndoles acceder al centro de la ciudad y estacionar en la zona de bajas emisiones hasta junio de 2025. Sin embargo, esta moratoria tiene un límite temporal, ya que a partir de ese momento, estos vehículos también estarán sujetos a las restricciones de acceso y circulación en la zona de bajas emisiones, excepto que acudan a un parking hasta diciembre de 2029.

Mirando hacia el futuro, para el año 2030, el objetivo es aún más ambicioso: únicamente se permitirá el acceso a los coches con etiqueta 0, ECO o C en la zona de bajas emisiones de Bilbao. Esto implica una prohibición efectiva para los vehículos de gasolina anteriores al año 2006 y los diésel previos al año 2015.

La elaboración de la ordenanza ha sido inclusiva, con la recepción de 186 alegaciones durante el periodo de consulta pública. Como resultado, se han incorporado diversas modificaciones, incluyendo un aumento en el número de invitaciones para residentes y comerciantes, así como la introducción de nuevas exenciones para determinados casos, como vehículos históricos y personas con movilidad reducida.

El control y cumplimiento de la normativa se realizará mediante cámaras de vigilancia y software especializado para monitorear el acceso de los vehículos al centro de la ciudad. Aquellos que no cumplan con las directrices establecidas podrán enfrentar multas de hasta 200 euros. Con esta medida, Bilbao se suma a la creciente lista de ciudades comprometidas con la mejora de la calidad del aire y la reducción de emisiones contaminantes.