El Madrid hace caja con la cantera: muchas cesiones y venta de la mitad de los jóvenes

En tiempos de pandemia el fútbol necesita reinventarse y el mercado busca soluciones creativas que no afecten a las arcas de los clubes, heridas por la falta de liquidez que provocan los estadios vacíos. Los directores deportivos apuestan por reforzar sus plantillas a coste cero, ya sea con jugadores que llegan cedidos o futbolistas que quedan libres y que hasta no hace mucho exigían una prima de fichaje por ello. Ahora la inestabilidad del mercado ha hecho desaparecer esas primas de fichaje y se negocian contratos de media duración (dos o tres temporadas) para asegurarse los ingresos.

Con en este panorama emerge la particular situación del Real Madrid, que cuenta con una plantilla de más de 35 jugadores con contrato, muchos de los cuales se ven a obligados a emigrar para buscarse sitio y disponer de minutos de juego. Oportunidades que les permiten seguir entrando en los planes de sus seleccionadores de cara a citas como la Eurocopa del próximo verano. Solución, la de irse fuera, que aligera una pesada carga al club, que tiene que afronta el pago de una masa salarial imponente.

Los despachos de Valdebebas, con el Santiago Bernabéu en plena remodelación, viven días de mucho ajetreo en este atípico final de temporada antes del arranque de la resolución de la Champions. El Real Madrid cuenta con una nómina de futbolistas muy apreciados en el mercado que tienen contrato con los blancos: Odegaard, Ceballos, Kubo, Reguilón, Odriozola, Reinier, Óscar Rodríguez, Lunin, Mayoral, Luca Zidane...

Óscar Rodríguez, en el escaparate

Los jóvenes talentos blancos son cada vez más requeridos porque su talento resuelve la papeleta a muchos directores deportivos. Sin embargo, el Real Madrid ha comenzado a rentabilizar también estas operaciones exigiendo dinero por cerrar las cesiones, además de liberarse del pago de la ficha de los futbolistas, del que se hace cargo el equipo al que llega a préstamo. Hay casos como el de Reguilón, el mejor lateral nacional de la Liga, que no tiene hueco en el Real Madrid, donde Marcelo y Mendy le cierran la puerta. El Sevilla ha sabido darle sitio con Lopetegui y ahora los hispalenses tratarán de que esa cesión cristalice en una relación más estable con el zurdo de la cantera blanca en forma de compra.

Otro jugador en el que se ha fijado Monchi, y también el Betis de Pellegrini, es el japonés Takefusa Kubo. Después de demostrar su desparpajo y calidad en un Mallorca que se ha ido a Segunda, el nipón es pretendido por varios equipos, entre ellos los dos sevillanos, el Milán o el Villarreal. El Sevilla anda construyendo una plantilla para el reto de la Champions del año que viene, mientras el Betis, con problemas de liquidez, ve en Kubo al refuerzo estrella para el proyecto de Pellegrini. Pero en esta operación el conjunto blanco incluye el cobro de una cantidad que ronda los 3-4 millones para cerrar la cesión del jugador. La prioridad madridista es cederlo a equipos que jueguen Champions o Europa League para aumentar la visibilidad del jugador y que se revalorice. Lo que da clara ventaja al Sevilla en el caso de Kubo.

Otro jugador que gusta en la orilla verdiblanca es el centrocampista Óscar Rodríguez, que regresará a Valdebebas tras jugar en el Leganés, aunque todo apunta a que será de forma circunstancial. Real Sociedad y Valencia se han interesado también por su futuro.

Dani Ceballos deshoja la margarita. Se plantea regresar de Inglaterra para enrolarse en algún equipo de la Liga o quedarse allí junto a un Mikel Arteta que le ha dado el protagonismo que no encontraba en el Bernabéu. El sevillano tiene la Eurocopa entre ceja y ceja y para ello necesita minutos en un equipo que le permita brillar. Zidane tiene gente en su puesto y ya ha dejado claro que no es un jugador de su gusto. Pero podría terminar saliendo traspasado a los 'gunners' por una cifra que rondaría los 30 millones en los que lo tasan los blancos.

Odegaard seguirá deslumbrando un año más en la Real Sociedad, donde se ha revalorizado mostrando todo su potencial. Probablemente el mismo camino que pueda seguir Borja Mayoral, que tras su última cesión al Levante parece que se quedará definitivamente traspasado en el club granota. Uno que probablemente siga el camino contrario y se quede en el Bernabéu es el portero ucraniano Andriy Lunin, que ocuparía el puesto de Areola a la sombra de Courtois. De Lunin hablan maravillas en el club y se le tiene por una apuesta de futuro para la portería blanca.

Achraf, primer negocio

Traspasado Achraf al Inter, operación que deja 40 millones en las arcas blancas, otro jugador que ha levantado expectación en el mercado es el brasileño Reinier. El delantero del Castilla jugará lejos de Valdebebas la próxima temporada porque ya hay interés del Valladolid de Ronaldo, un destino amable para los canteranos blancos, y del Bayer Leverkusen. Gana enteros su posible marcha a la Bundesliga, como ocurrió con Achraf y con el central Jesús Vallejo, por el que el Real Madrid quiere ingresar 7 millones de euros vendiendo al Granada el 50% de su propiedad. Esa fórmula ya la ha utilizado exitosamente con Javi Sánchez, por el que el Valladolid ha pagado 3 millones por la mitad de sus derechos. Y lo mismo ocurrirá con Luca Zidane, al que se da por hecho que no seguirá en el Bernabéu, o jugadores como Alberto Soro, cedido en el Zaragoza, o Jorge de Frutos, en el Rayo Vallecano.

El overbooking de futbolistas en la plantilla del Real Madrid ha pasado de ser un problema para Zidane a convertirse en una oportunidad de ingreso para el club. Algo que no ocurría en temporadas anteriores. Los ejecutivos blancos están rentabilizando el talento de sus futbolistas, muy demandados en estos tiempos revueltos de fútbol del post-confinamiento.