Por qué Florentino Pérez descartó un Real Madrid femenino

En estos días vuelve a hablarse de la posibilidad de que el Real Madrid tenga una sección de fútbol femenino, algo que de momento no está en los planes de Florentino Pérez, aunque el presidente sí quiere presentar una iniciativa a este respecto en la próxima asamblea de socios.

Sin embargo, Pérez se llegó a plantear seriamente la apuesta por el equipo femenino blanco durante la pasada temporada. La visibilidad y la buena acogida que ha tenido el desembarco de equipos como Barcelona o Atlético de Madrid en féminas y, sobre todo, la presión mediática y de una parte de la masa social madridista hizo que el dirigente valorase la posibilidad de realizar esa inversión.

Florentino, como no podía ser de otra forma, valoró la iniciativa de hacer un equipo femenino, pero con el requisito innegociable de que fuese capaz de competir por la Liga con rojiblancas y azulgranas y especialmente de ofrecer una buena imagen en la Champions ante equipos como el PSG y el Olympique de Lyon. No quería gastarse el dinero en algo que además le pudiera generar dolores de cabeza en forma de derrotas abultadas ante colchoneras y culés o en fiascos en Europa. Como repite insistentemente a sus empleados, "las cosas si se hacen, se hace bien".

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Cifras rebajadas para no ahuyentarle

Para ello decidió consultar a una agencia y a intermediarios que se mueven habitualmente en el mundo del fútbol femenino. Las personas consultadas, entre las que se encontraban agentes con los que habitualmente trabaja el Real Madrid masculino, trataron de no ahuyentar a las primeras de cambio al presidente blanco, y maquillaron la cifra que solicitaba Pérez.

A Florentino le dieron una cifra que no llegaba a los tres millones de euros, algo que le sorprendió porque esperaba que el coste no bajase de cinco millones ante el desembarco de grandes equipos europeos. Extrañado por la cifra a la baja que recibió, decidió realizar una consulta de forma paralela, al no quedar muy convencido de lo que le habían informado la agencia y los intermediarios consultados.

Desde el club se consultó a una persona de gran prestigio en el fútbol femenino como Markel Zubizarreta, hijo del exportero internacional de la selección y general manager de las azulgranas, quien había declarado en repetidas ocasiones: "Que el Real Madrid entre en el fútbol femenino sería muy bueno”. La respuesta de Zubizarreta se ajustaba más a la cifra que barajaba Florentino, que entendió como una deslealtad interesada la información sesgada que recibió en su primera consulta de la agencia y los intermediarios. Evidentemente, esas personas han perdido todo el predicamento que tenían en la zona noble del Bernabéu y la jugada les ha salido rana.

El Barcelona ha llegado a invertir algo más de tres millones en su equipo femenino de fútbol con fichajes sonados como los de Martens, Bussaglia, Andonova, Duggan o Simoes. Por detrás aparecen en Europa el Arsenal Ladies (2,5), y un poco más alejadas las alemanas del Wolfsburgo y las suecas del Tyresö, cuyos presupuestos rondan los dos millones. Mientras que en España el presupuesto del Atlético acariciaría el millón de euros y el del Español andaría cerca de la mitad de esa cifra, como datos más relevantes.

A Florentino le pareció inviable realizar una inversión de cinco millones de euros en una sección femenina que no le garantiza dominar el fútbol de chicas ante los todopoderosos Lyon (8 millones de presupuesto) o el PSG (7). El presidente, con su pragmática visión empresarial, entiende que es "una inversión que no ofrece ningún tipo de retorno", más allá de mejorar la imagen del club en el particular de los temas de género. Pérez nunca ha sido muy amigo de diversificar el club en secciones y solo mantiene la de baloncesto "por la historia" de la sección y los éxitos que han cosechado en los últimos años con Pablo Laso en el banquillo. Pero los de la canasta siguen sin contar con el entusiasmo militante del presidente. El fútbol sala o el rugby también han sido descartados en los despachos del Bernabéu.

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Otra de las opciones que se llegó a barajar en las oficinas del club fue la de alcanzar un acuerdo con el Club Deportivo Tacón, que preside Ana Rosell, para establecer una suerte de acuerdo en el caso de que hubiera logrado el ascenso. Sin embargo, el club madrileño no logró la plaza para la División de Honor femenina y esa posibilidad, además, fue descartada por el propio Florentino.

La intención del presidente, que no es ajeno al auge del fútbol femenino, es proponer a los socios la creación de una Academia de fútbol femenino en Valdebebas, donde ir formando a un grupo de jugadoras que engrosarían su equipo. Plantilla que se reforzaría convenientemente con fichajes de renombre del mercado nacional para afianzarlo en División de Honor con un coste asumible y mucho trabajo de cantera. Los traspasos más altos del fútbol femenino nacional no exceden de los 50.000 euros, por lo que el presidente podría replicar la política de la primera plantilla masculina: un equipo repleto de jóvenes jugadoras españolas de talento con mucho futuro. Esa es la idea que llevará a la asamblea para resolver un asunto recurrente en el que alguno ha quedado marcado por tratar de jugársela a Florentino.