Carlos Sainz o la dificultad en Austin de resistir cuando lo que toca es esprintar

• ​F1, carrera del GP Estados Unidos | Fórmula 1, hoy en directo: última hora de Sainz y Alonso desde Austin

"Llevo defendiendo todo el año, así que tengo algo de práctica. Porque en carrera no hago otra cosa que defender con este coche, así que al final vas perfeccionando tu técnica", explicaba Sainz al término de la carrera al esprint. "En verdad, fui a por todas media vuelta. Después, el resto fue defendiendo y mirando por los retrovisores", confesaba. No fue fácil para Carlos enfocar una carrera en modo resistencia cuando se supone que se debe ir al ataque en todo momento. Pero la equivocada elección del neumático blando condicionó todo desde el principio en el GP de EEUU.

El sexto puesto final, en realidad, puede calificarse de hasta positivo, porque el resultado pudo haber sido mucho peor. "Hubo unos momentos donde creía que iría más para atrás, pero después he podido aguantar la posición con George Russell", afirmó aliviado Sainz. La caída en rendimiento del McLaren de Oscar Piastri y una buena conducción defensiva hizo que el madrileño se quedara con la misma posición con la que partía en la parrilla de salida. ¿Qué sentido tenía, pues, ser el único de todos en salir a la carrera con neumáticos blandos, en lugar de medios como hizo el resto?

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Javier Rubio

Como a menudo sucede en este mundo donde cada declaración de equipo y piloto está filtrada por la absoluta prudencia, hay que leer entre líneas para intentar comprender el porqué de una decisión que parece demasiado amateur para un equipo tan profesional como es Ferrari. Por un lado, Carlos ya venía reconociendo que no se siente a gusto con la configuración del SF23 para la pista texana y, por otro, Ferrari necesitaba información sobre el desgaste del neumático blando ante la posibilidad de que fuera usado en carrera. Ante la dificultad que suponen los fines de semana con carreras al esprint, al no contar con entrenamientos libres, es probable que la Scuderia utilizara al madrileño como conejillo de indias de preparación para el Gran Premio.

Sainz tampoco tenía demasiado que perder. A nivel de puntos, partir sexto en la carrera al esprint no ofrece expectativas de lograr un botín importante. Por otra parte, si se hubiera dado el caso de la aparición de un coche de seguridad, una entrada a boxes para cambiar ruedas habría podido dar un golpe de efecto importante. El problema es que el neumático blando dejó de ser una ventaja desde casi la misma primera vuelta. Es posible que los ingenieros y estrategas de Ferrari pensaran que si la ventaja competitiva del blando se alargaba tres o cuatro vueltas, hubiera valido la pena el riesgo, pero quedó claro que no.

Búsqueda de información

"Esas 19 vueltas fueron duras. Elegir el blando fue un riesgo que optamos por tomar, a pesar de que sabíamos que tendríamos problemas con el ritmo y la degradación al final. Empecé bien y algunos buenos adelantamientos nos llevaron a la cuarta posición en las primeras vueltas, pero a partir de ahí vino la parte difícil, todo sobre la gestión de los neumáticos y la defensa. Mantener a Lando (Norris) y Sergio (Pérez) atrás fue muy duro y la batalla con George (Russell) no fue nada fácil, pero logramos llevarlo a casa y sumar algunos puntos. Ahora nos centramos en este domingo, tenemos mucha más información que analizar e intentaremos aprovechar al máximo nuestra carrera", explicaba el piloto español de Ferrari.

La información a la que probablemente se refiera Sainz es sobre la durabilidad de ese neumático blando que tanto condicionó su rendimiento durante la carrera al esprint. Es cierto que casi desde la primera vuelta dejó de ser una ventaja, pero también que después de 20 vueltas de uso, acabó razonablemente entero. Descargado de combustible en las vueltas finales, Carlos tuvo suficiente neumático para contener los ataques de George Russell e incluso algunas de sus mejores vueltas se dieron justo al final. Es sin duda un dato interesante para planear la estrategia de la carrera de este domingo, que a fin de cuentas es la verdaderamente importante. Si se planifica una carrera a dos paradas, un tramo final con el compuesto blando no sería algo descabellado.

"Tenemos que centrarnos en qué podemos hacer el domingo con la estrategia y las ruedas que tenemos disponibles. Tenemos muchas gomas nuevas, que es algo positivo", comentó Sainz. No haber gastado un juego de medios como si lo han hecho sus rivales quizá dé sus frutos durante la carrera, pero el fondo de la cuestión es que el piloto español no encuentra el ritmo con el coche este fin de semana. Eso obliga a piloto y equipo a algo de inventing, buscando encontrar la competitividad perdida este fin de semana.

Falto de confianza

A Carlos le gusta mucho el trazado del Circuito de las Américas y el año pasado logró aquí la pole position, por lo que está claro que hay algo en la configuración del coche que le está incomodando. Frente a Charles Leclerc, no ha tenido opción en todo el fin de semana y en la clasificación para el Gran Premio o en la de la carrera al esprint, el monegasco regularmente era entre dos y cuatro décimas más rápido siempre. El coche viene muy descargado aerodinámicamente de la parte trasera, con el objetivo de priorizar la velocidad punta en las rectas y es posible que esa situación la maneje mejor Leclerc que Sainz en las zonas reviradas, especialmente el de las curvas rápidas enlazadas del primer sector.

"Claramente, tenemos que trabajar en nuestro ritmo porque no estamos en la posición en la que nos gustaría estar", admitía Sainz. Los baches del circuito texano tampoco ayudan porque, como reconoce el propio Carlos, el coche rebota mucho y contribuye al sobrecalentamiento de los neumáticos. Fue la propia Ferrari en su comunicado oficial quien se atribuyó la errónea decisión de poner neumáticos blandos al coche número 55, con el objetivo de obtener la mejor información posible. Señal inequívoca de que equipo y piloto estaban faltos de respuestas a muchos de los interrogantes que a ambos les han surgido desde la primera sesión de entrenamientos libres en la pista texana.

"Con las reglas de la carrera esprint y el parque cerrado, no podemos cambiar mucho. Esta es la situación, pero creo que las cosas pueden mejorar en la carrera y podríamos ser más rápidos. Creo que estamos en una buena posición de salida para intentar recuperar terreno en la carrera". El circuito de Austin es uno de esos trazados que exige plena confianza para extraer hasta la última gota de competitividad del coche. No parece que el podio sea una opción sencilla, pero quizá el sufrimiento del viernes y el sábado encuentre recompensa para Carlos Sainz este domingo.