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El hacha o la tarjeta amarilla: ¿han salvado Sainz y Leclerc el cuello de Mattia Binotto?
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FERRARI LOGRO SUS OBJETIVOS

El hacha o la tarjeta amarilla: ¿han salvado Sainz y Leclerc el cuello de Mattia Binotto?

El madrileño finalizó cuarto, tras un adelantamiento en el último momento a Lewis Hamilton. Con su posición y la de Charles, los italianos consiguieron el subcampeonato de equipos

Foto: Sainz terminó la temporada esperanzado para sentar las bases de 2023. (Scuderia Ferrari)
Sainz terminó la temporada esperanzado para sentar las bases de 2023. (Scuderia Ferrari)
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Carlos Sainz suele distinguirse por su articulada capacidad de síntesis, y al acabar el Gran Premio de 2022 tampoco era la excepción. "Esta última carrera demuestra exactamente dónde estamos: un paso por detrás de Red Bull y muy cerca de Mercedes. Luego, dependiendo de la pista, podemos ser más rápidos que ellos y viceversa. El año que viene tenemos que intentar ser mejores en carrera y en desarrollo. Si mejoramos estos dos aspectos, podremos luchar por el Mundial". Quién sabe si Mattia Binotto ha salvado su posición con la última carrera de la temporada, o la decisión ya está tomada. Quizá no haber sido superados in extremis por Mercedes le permita seguir al frente del equipo italiano si John Elkann tiene todavía el pulgar pendiente de decisión.

Leclerc definió el contexto con el que los pilotos de Ferrari afrontaban la cita final, con el segundo puesto de pilotos y equipo en peligro, cuando Ferrari lucía como aspirante al título en el primer tercio del campeonato. "Fue una gran carrera. Ejecutamos todo a la perfección, que es en lo que nos estábamos enfocando, bajo mucha presión. Presión con los rumores, y también para lograr el segundo puesto en el campeonato". Se trataba de un gran premio en clave, también, política.

Pero Ferrari ejecutó una carrera impecable en todos los órdenes, sorprendiendo incluso a Red Bull, como reconoció al final el propio Helmut Marko, cuando comprobaron cómo le robaban la cartera a su piloto, Checo Pérez. El equipo italiano no terminó tan entonado como parecía este 2022. Ni tan mal como oscurecía a medida que avanzó el campeonato. ¿Con este balance recibirá Mattía Binotto el pulgar hacia abajo del gladiador vencido?

"¡No debería haber discusión, joder!"

La pasada semana se desataron los rumores sobre el posible cese de Mattia Binotto, con información sin duda filtrada desde altas instancias. Un momento estratégico: el Gran Premio de Abu Dabi podría ser utilizado como hacha pendiente para justificar un posible cese. En caso de salvar la cara, una tarjeta amarilla para Binotto de no haberse decidido su suerte. Con un monoplaza dos o tres décimas más lento en Yas Marina, Ferrari ofreció su mejor versión del momento, como apuntó Carlos Sainz.

El español tuvo clara su misión: lograr el mejor botín de puntos y estar alerta como escudero de Charles Leclerc. La maniobra de Hamilton en la primera vuelta le descolgó de su compañero, cuando el británico volvió a la pista acortando por fuera e interceptándole. "¡No debería haber discusión, joder!", gritó Sainz a dirección de carrera para que el británico devolviera la posición. "La carrera ha sido bastante dura, sobre todo al principio con los Mercedes, porque he perdido bastante tiempo. Primero, con Hamilton haciendo con el truco del año pasado, saltándose la chicane cuando le había pasado, devolviéndome la posición, cogiendo el DRS, volviéndome a pasar... Ahí perdí cinco o seis segundo de carrera que me han costado bastante".

placeholder Sainz terminó cuarto, siempre pendiente de Leclerc. (Scuderia Ferrari)
Sainz terminó cuarto, siempre pendiente de Leclerc. (Scuderia Ferrari)

Sainz tuvo lestrategia a dos paradas, pero mostró su actitud cuando Charles Leclerc volvió a la pista tras la suya. "Si es posible, que no haya lucha", le pedía el monegasco al equipo, con un Sainz que pudo superarle en aquellos instantes. "Confirmado, sin lucha", le contestó su ingeniero. A partir de ese instante, la misión era sencilla para el español: "lograr el cuarto puesto, que era el objetivo inicial". Leclerc, por su parte, tenía otra misión delicada. Ferrari apostó por la estrategia opuesta a la de Pérez: una sola parada en boxes. Para ello, debía hilar extremadamente fino con sus neumáticos, mientras que el mexicano llegaba de atrás en remontada de séptimo de caballería desde su segunda parada, esperando en Red Bull otra idéntica de Leclerc, como hicieron con Sainz como señuelo. No fue suficiente su cabalgada, ni logró su objetivo.

El debe y el haber

"Este fin de semana nos hemos centrado principalmente en el ritmo de carrera. El equilibrio (del monoplaza) fue clave, pero sobre todo por la conducción del piloto. Ser demasiado agresivo en las primeras vueltas deparaba un desgaste excesivo de los neumáticos, y vimos esto con Hamilton en la primera parte", explicó Mattia Binotto para describir la clave estratética de Ferrari. "Charles era consciente de esto, pero supo desenvolverse pilotando bien y con tranquilidad y se merecía este segundo puesto". No iba a ser Sainz quien le pusiera problemas.

Ferrari terminó con la cabeza alta la temporada. Como quien sabe etiquetar las sensaciones de la cúpula de Ferrari, puso sus cartas sobre la mesa, tanto si la suerte estaba echada, como si no. "El equipo ha crecido mucho en las últimas temporadas, 2020 y 2021 fueron los años más duros y oscuros. Nadie hubiera apostado que saldríamos tan fuertes esta temporada con una nueva era". Binotto exhibía el haber. "Lo habíamos anticipado, dijimos que queríamos ser competitivos, pero nunca prometimos ganar el campeonato".

Luego, el debe: "Este año hemos demostrado que aún no estamos maduros y listos para la victoria. Cometimos algunos errores en algunos fines de semana, pero seguiremos mejorando. Ser competitivo y ganar son dos cosas diferentes y hay un paso más que dar". "¿Se puede justificar mi cese?", parecía dejar flotando en el aire, poniendo el lazo en cada paquete, el del haber con más peso que el del debe.

Por su parte, Carlos Sainz también resumió con lucidez y sinceridad su temporada más dura en la Fórmula 1. "Tengo ganas de que llegue el año que viene, porque esta segunda parte he ido más cómodo, mucho más rápido. Ahora se puede trabajar sobre esta base, empezar el año que viene fuerte. Será un coche diferente e intentaremos ponerlo bien a mi gusto desde el principio, y empezar bien la temporada". Y por supuesto, que siga Mattia Binotto, su gran valedor, el único jefe de equipo de Ferrari en muchos años capaz de no jerarquizar a sus pilotos cuando las circunstancias y el entorno le presionaban a lo contrario. Quién sabe si tal decisión también ha servido para que alguien le quiera mover la silla.

Carlos Sainz suele distinguirse por su articulada capacidad de síntesis, y al acabar el Gran Premio de 2022 tampoco era la excepción. "Esta última carrera demuestra exactamente dónde estamos: un paso por detrás de Red Bull y muy cerca de Mercedes. Luego, dependiendo de la pista, podemos ser más rápidos que ellos y viceversa. El año que viene tenemos que intentar ser mejores en carrera y en desarrollo. Si mejoramos estos dos aspectos, podremos luchar por el Mundial". Quién sabe si Mattia Binotto ha salvado su posición con la última carrera de la temporada, o la decisión ya está tomada. Quizá no haber sido superados in extremis por Mercedes le permita seguir al frente del equipo italiano si John Elkann tiene todavía el pulgar pendiente de decisión.

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