Alonso y la necesidad de convertir su problema de la clasificación en una ventaja

Se le veía muy molesto a Fernando Alonso al bajarse del coche, porque era consciente de que había coche para lograr un buen puesto en parrilla. Sin mencionar a Carlos Sainz, el asturiano se lamentó de que su compatriota le hubiera estorbado en los momentos finales de su vuelta rápida. En las cámaras de a bordo se observó que, efectivamente, la molestia era clara. El hecho de que por apenas 32 milésimas se quedara fuera de la Q3 indica que había potencial claro para estar en la parte alta de la clasificación.

"Es una pena", explicó el piloto de Alpine. "En ese último intento no pudimos hacer la vuelta. Un Ferrari estuvo en el medio todo el segundo sector, así que perdimos cuatro décimas. Veníamos mejorando seis décimas en cuanto a mi tiempo anterior, y salí de la curva 16 una décima más rápido, así que perdí cuatro décimas o medio segundo con el tráfico, es casi inaceptable". Probablemente, Fernando, no haya querido culpar explícitamente a Sainz, porque, siendo justos, el madrileño no tenía tampoco mucho espacio para quitarse de en medio. No obstante, el mal ya estaba hecho y había que replantear toda la carrera.

A la espera de un 'safety-car'

Para Fernando, era muy importante salir a carrera junto a los coches de cabeza, para valorar comparativamente los problemas que arrastran de excesiva degradación de los neumáticos en su Alpine. El monoplaza francés siguió demostrando en Miami que, a una vuelta, es un coche rápido. De haber salido entre los mejores, hubiera sido una excelente ocasión para medir los progresos en durabilidad de las ruedas. Pero, una vez que partes 11º, ya es prácticamente imposible hacerlo. Arrancar en mitad del pelotón obliga, por tanto, a replantearlo todo.

"Este fin de semana trabajamos mucho más pensando en el ritmo de carrera que en el de la clasificación", aseguró Fernando. "Toda la elección de neumáticos durante los entrenamientos libres estuvo enfocada más hacia el domingo que hacia el sábado. Cambiamos un par de cosas a ver si dan rédito para la carrera". Junto a esos cambios que anticipaba, quizá también haya un completo replanteamiento estratégico. Visto lo visto, con los numerosos choques en los entrenamientos, la temprana aparición de un 'safety-car' es algo que parece bastante probable.

Varias opciones estratégicas

Desde Pirelli, el proveedor de neumáticos, ya avisaron de que con los compuestos que han traído para esta carrera ven prácticamente imposible hacer estrategias de carrera a una sola parada. Por tanto, lo más posible es que casi todos los pilotos vayan a dos paradas. Esto abre la posibilidad de que se utilicen todos los neumáticos de la gama. Alonso podría empezar la carrera con neumáticos blandos, a la espera de ese temprano 'safety-car'. Para hacer un tramo de la carrera con los compuestos medios y dejar los duros para la parte final, con el coche ya más descargado de gasolina.

Podrían también incluso arriesgar Fernando y hacer una estrategia a tres paradas. Aunque a priori resulte excesivo, a tenor del alto índice de degradación que ofrece esta pista, tampoco sería descabellado. Todo dependerá del 'timing' de la aparición del coche de seguridad en caso de accidente en pista, pero partir 11º y con buen potencial de velocidad en el coche invita, cuanto menos, a pensarlo.

Parece claro que en el circuito de Miami no tiene pinta de que los adelantamientos sean fáciles. Por tanto, habrá una estrategia similar a la de los coches que rodean a Fernando, difícilmente de réditos tanto en lo que respecta a resultados como a enseñanzas.

Desde Pirelli avisaron de que con los compuestos que han traído ven prácticamente imposible hacer estrategias de carrera a una sola parada

"Salimos 11º por la parte limpia y a ver qué se puede hacer desde ahí. A ver mañana si se puede rodar rueda a rueda, porque solo hay una trazada limpia en la pista", alertó el asturiano. Muchas incógnitas, pero también una oportunidad de convertir un problema, del que no tiene culpa, en una ventaja para obtener ese gran resultado que tarde o temprano llegará.