El extraño caso de los dos últimos fichajes de Movistar: Sebastián Mora y Albert Torres

"¿No te das cuenta que Telefónica no puede permitir que España se quede sin selección nacional de ciclismo?". Fueron las palabras que, en 2010, César Alierta, en aquel entonces presidente del gigante de las telecomunicaciones, le expresó a uno de sus directivos de máxima confianza, Luis Abril, según se detalla en el documental sobre los 40 años del proyecto comandado por la empresa Abarca Sports y Eusebio Unzué. A finales de aquella temporada, Movistar rescataría de una muerte prácticamente segura al único equipo de la máxima división del ciclismo (junto a Euskaltel) que quedaba en el país tras la desaparición de otros pesos pesados como en su día fueron Kelme y la ONCE.

Ahora, nueve años después de aquella importante decisión para este deporte en la carretera, Movistar da un paso más en su cometido al fichar a Sebastián Mora y Albert Torres, nuestra dupla más afamada en la pista, para el curso 2020. La noticia, que es histórica, llega tarde, pero llega. Por primera vez, los dos corredores disfrutarán, a siete meses de los Juegos Olímpicos de Tokio, de un equipo profesional, con un calendario inigualable y un material de primer orden para preparar su asalto a las medallas este próximo verano. Mora y Torres no forman una pareja cualquiera, son campeones de Europa en Madison (2015 y 2016) y una de las mejores bazas con las que cuenta la delegación española para Japón. Además, y por separado, ambos también son campeones del Mundo: Torres en la propia Madison (2014) y Mora en Scratch (2016), especialidad de la que también es medalla de oro continental por partida doble (2015 y 2019). Torres también tiene otros dos primeros puestos en Europeos en la disciplina del Ómnium (2016 y 2017). Así las cosas, y de largo, son dos de los mejores ciclistas que ha tenido este país en velódromo.

Su exposición mediática no ha llegado a la altura de las de Alberto Contador, Joaquim Rodríguez o Alejandro Valverde -otro arcoíris con el que ahora compartirán equipo- en los últimos años porque simplemente no han gozado de las mismas oportunidades. Como contó El Confidencial este pasado octubre, la realidad de los 'pistards españoles es muy difícil. Los corredores que apuestan por esta disciplina son, hablando claro, unos pocos valientes que no tienen garantizado su futuro (viven de las becas del COE, las federativas y de sponsors privados). Unos románticos (y solitarios) que entrenan a destajo como el resto de compañeros a cambio de casi nada. En nuestro país no existen equipos de pista profesionales, por lo que se ven obligados a buscar acomodo dentro de conjuntos de ruta. Sin embargo, esto no es tarea fácil. A menudo, son rechazados porque sus objetivos no casan con la línea impuesta por patrocinadores y directores de equipos de carretera.

"Quizá hemos tardado demasiado"

Al contrario que en otros países como Bélgica (Víctor Campenaerts), Alemania (Roger Kluge) o Inglaterra (Bradley Wiggins), en nuestro país es extraño que un corredor compatibilice pista y carretera. Esto afecta directamente sobre la calidad en el entrenamiento del deportista en cuestión, que no solo se basa en la preparación personal, sino también en competir contra los grandes profesionales de ruta. A más calendario, más oportunidades de llegar con el pico de forma óptimo a la cita marcada. Sebastián Mora compitió este curso con los colores del Caja Rural, de categoría Continetal Pro, sumó kilómetros importantes de cara a los Europeos de Alperdoorn, donde obtuvo dos preciados metales. A pesar de todo, el conjunto navarro decidió no renovarle, un duro varapalo con los Juegos a la vuelta de la esquina que, por suerte, ahora ha solventado Movistar, una estructura World Tour. Los telefónicos se hacen también con los servicios de Torres, que nunca a lo largo de su carrera (tiene 29 años) había formado parte de una escuadra de este nivel profesional en la carretera. El Inteja (Continental), un conjunto humilde, fue su última experiencia. "Es increíble que el ciclista de pista siga siendo un bicho raro aquí. Tenemos dos cracks mundiales sin equipo, es inconcebible", alertaba hace unos meses Óscar Pelegrí, compañero en la Selección, en este medio. Las protestan tuvieron eco.

"El próximo año es importantísimo para nosotros. Los Juegos es nuestro gran objetivo y tener la garantía de estar apoyados por el mejor equipo del mundo es una suerte", comentó el propio Albert, ilusionadísimo ante su nueva aventura. "Queremos devolver la confianza con grandes resultados durante toda la temporada", señaló Mora, que espera asentarse. Como explicaba anteriormente, Movistar ha tardado, pero al fin ha decidido apostar por ellos y por sus metas en la pista. Cabe destacar que la empresa de telecomunicaciones es, a la vez de patrocinadora de Abarca, mecenas de la Federación, por lo que entraba en su particular debe. "Quizá hemos tardado demasiado en ficharles [...] Son una suerte para nosotros. Primero por merecimientos propios. Su clase está fuera de toda duda. En el pasado ya habíamos hablado sobre la posibilidad de que vinieran, pero no cristalizó. La idea es que la pista sea un complemento de la carretera", anunció Unzué, manager de la formación, en la presentación que este jueves tuvo lugar en el CSD, junto a María José Rienda, secretaria de Estado para el Deporte y López Cerrón, presidente federativo, que también tomó la palabra: "Esto va a ser un revulsivo. El esfuerzo ya lo hemos hecho, ahora queda en sus piernas el éxito".

Y es que la insistencia de Cerrón y también del ex seleccionador de pista, Juan Martínez Oliver, han sido claves para que la idea fructificara. Movistar se hará cargo de las fichas de los corredores y les dotará de todo lo imprescindible. El calendario de ambos aún no está claro, pero no competirán en las grandes vueltas. Se respetarán sus principales objetivos bajo techo. La Challenge de Mallorca o la Vuelta a la Comunidad Valenciana podríán ser sus primeras carreras con los azulones. La pista siempre ha dado alegrías al deporte olímpico (aún se recuerdan los oros de José Manuel Moreno y Joan Llaneras) y se espera que, con la buena nueva, Mora y Torres den un salto de gigante en sus aspiraciones. De Movistar depende en parte que, una vez acabado el ciclo olímpico, esto no quede en anécdota y la pista siga como apuesta firme (incluida la vertiente femenina). Juan Peralta, Pepe Moreno y Alejandro Martínez, otros 'pistards', también se merecen una oportunidad de nivel.