Alfonso Reyes: "La huelga es irrevocable, a no ser que la ACB dé su brazo a torcer"

Alfonso Reyes, presidente de la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP), repite una y otra vez al otro lado del teléfono que los jugadores están unidos, como si incluso a él le costara creerse que la huelga convocada este jueves va en serio y que la Copa del Rey de la próxima semana no va a celebrarse. Esa es la única parte de su discurso que provoca dudas en quien le escucha. El resto, se esté o no de acuerdo con sus demandas, es bastante duro y directo. Reyes acusa a la ACB de falta de honestidad, de mentir, de emplear malas artes durante la negociación y de intentar confundir a los jugadores.

Este viernes, la liga emitió un comunicado en el que contestaba oficialmente a la convocatoria de huelga por parte de la ABP recibida un día antes. "La Copa del Rey se va a jugar", dijo Esther Queraltó, secretaria general de la ACB. A la liga todo este lío le ha pillado descabezada: tras la salida de Francisco Roca de la presidencia, los clubes aún no han decidido quién ni cómo estará al frente de la asociación. La respuesta de Reyes a esas palabras de Queraltó y a otras similares, como las del presidente del Montakit Fuenlabrada, José Quintana, o las del Valencia Basket, que aseguró que disputará el torneo, es la siguiente: "Que digan lo que quieran, a los mejor tienen que ir con el equipo juvenil". "La huelga es irrevocable, a no ser que la ACB dé su brazo a torcer", añade.

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"A lo mejor tienen que jugar con los juveniles"

Ahora mismo un acuerdo parece difícil. Un ejemplo de lo alejadas que están las posturas: en su comunicado de este viernes, ACB aseguró que la ABP pidió un aumento del 68% en el Fondo Social, desde los 315.000 euros actuales hasta los 530.000 en el último año del próximo convenio. Reyes asegura, en cambio, que en la reunión celebrada el jueves en el Consejo Superior de Deportes ofrecieron una reducción del 8% que no fue aceptada por la liga. Ahora esa oferta ya no existe.

José Quintana también afirmó que en la firma del convenio vigente desde 2013 se pactó que sería la último con la configuración actual del Fondo Social, algo que Reyes niega. "Vuelven a mentir. Rafa Jofresa, que estuvo, me lo ha corroborado. Y vuelven a confundir. Hay clubes que lo hacen especialmente. La mentira se ha utilizado mucho por ACB. Y estamos cansados. Una de las razones por las que estamos en esta situación es porque no ha habido honestidad y se ha faltado a la verdad. Y en ese clima no se puede negociar nada".

"El Fondo Social cubre nuestros sueldos"

Reyes recoge el guante de quienes le acusan a él y al esto de dirigentes de la ABP de quedarse con esos 315.000 euros que recibe de ACB. "Efectivamente, cubre nuestros sueldos, pero también todos los viajes, las demandas que ponemos, no solo a ACB, sino para la defensa de los jugadores; las consultas fiscales, las consultas legales, las visitas a los equipos, los viajes... Muchas cosas. Pero que no haya duda: también mi sueldo", dice.

"La cúpula de la ACB, ¿quién la paga? Los jugadores con su trabajo. En el deporte, y concretamente en el baloncesto, solo hay mano de obra. No hay maquinaria. Todo es generado por la mano de obra, en su mayor parte los jugadores, pero también una pequeña parte los entrenadores, otra los árbitros. Y evidentemente el club, que aglutina. Pero sin jugadores no hay trabajo. Todos los beneficios provienen de la mano de obra. Vamos a ser claros. De los 30 millones que genera la ACB, se reparten entre los equipos solo 11; 19 se dedican a la estructura. No queremos meternos en la gestión de la ACB, por supuesto, pero que dejen ya el mantra del Fondo Social", comenta Reyes, que recuerda apunta a la subvención del Estado que reciben los sindicatos para demostrar que la relación entre ACB y ABP no es tan extraña.

La huelga de la Copa puede dañar la imagen de los jugadores, sobre todo entre quienes tienen previsto viajar a Gran Canaria. De los 9.200 abonos del torneo, más de 6.000 están en manos de aficionados de fuera de Gran Canaria. "Nos preocupa el daño que se le pueda a hacer los aficionados. nos duele, pero nos duele mucho más lo que se está haciendo con los jugadores y con su asociación. Queremos llegar a un acuerdo, pero nos han obligado a tomar esta decisión. "Pedimos comprensión y que entiendan que son momentos en los que nos jugamos mucho", comenta el exjugador.

La huelga es solo durante la Copa

A quienes ven a los jugadores como privilegiados, Reyes responde que "la vida del deportista profesional es muy dura". "Se concentra el poquísimos años. Y no tiene ningún tipo de beneficio fuera de esos años. Están sometidos a una carga fiscal como debe de ser, pero lo normal es que el capital que genera sufriera esa carga fiscal en toda su vida, porque cuando salen del baloncesto el abismo es brutal. Creo que hay privilegiados, pero porque hacen lo que les gusta y lo que les motiva. La ACB nunca se ha preocupado de los jugadores después de su vida laboral. Es como si fueran caballos de carreras que cuando acaban hay que sacrificarlos, porque no sirven para otra cosa", denuncia.

La huelga comenzará el 14 de febrero (miércoles), un día antes del primer día de la Copa, y es indefinida, aunque Reyes explica que la intención es desconvocarla tras el torneo. "La intención es que solo afecte a la Copa. Luego ya veríamos que otras medidas posteriores tomamos", dice. El presidente de los jugadores también aclara que aunque solo hay ocho equipos clasificados, la huelga la harán los 18. Lo que no confirma es si ha habido votaciones en todos los equipos o si la ABP tiene un recuento del apoyo. "Hemos hablado con todos, les hemos visto a todos y seguimos en contacto con ellos y están a tope". ¿Se puede llegar a un acuerdo antes de la Copa? "Lo mejor para todos sería eso, pero depende de la ACB".