Conoce los 4 métodos de Harvard para ser más efectivo en el trabajo

Existen infinidad de técnicas para organizar nuestras tareas del día y ser más productivos, ya sea en el trabajo o estudiando. Una de las más famosas es la técnica pomodoro, que consiste en trabajar 25 minutos y descansar 5. Incluso hay gente que se encarga de emitir en directo, en YouTube o Twitch, su rutina de estudio para que otras personas puedan estudiar o trabajar a la vez, juntos en la distancia.

Pero, en muchas ocasiones, aunque sigamos una técnica que promete ser efectiva, no nos funciona o no encaja con las tareas que tenemos que desempeñar. La cuestión es ir probando hasta encontrar el método de productividad que mejor te va, da igual que sea una técnica milenaria o tu forma personal de hacer las cosas.

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A. López

La Universidad de Harvard, en su revista Harvard Business Review, da consejos sobre qué métodos han demostrado ser útiles para aprovechar mejor las jornadas laborales o los momentos de estudio. A continuación, desgranamos cuatro de los mejores métodos que te pueden ayudar a aprovechar mejor tu día.

Hay cuatro métodos que puedes probar

Las listas de “una cosa a la vez” son perfectas para las personas que se distraen fácilmente o que acaban ahogadas en mil tareas diferentes. El método es sencillo, escribe una lista con las cosas que tienes que hacer en tu día, una por línea y, si quieres, en orden de prioridad. Luego, escribe cada línea de la lista en un post-it diferente. Cuando tengas esto apuntado, ponte a hacer la primera tarea de la lista. No la dejes hasta haberla terminado y no pienses en el resto de deberes pendientes. Al finalizar cada tarea, táchala de la lista y, lo más importante, rompe el post-it. No imaginas lo bien que sienta.

Los gestores digitales de tareas son el no va más de la productividad. Es como tener un diario, una agenda, un calendario y un planificador, todo a la vez en una aplicación. Estos programas, como por ejemplo Airtable o Trello, están disponibles tanto para un smartphone como para el escritorio y permiten el seguimiento de tareas, la clasificación por colores y categorías, la colaboración con otros miembros del equipo, y mucho más.

Los clásicos calendarios no pueden faltar en esta lista. Con un calendario semanal o mensual, podrás ver de un vistazo todo lo que tienes que hacer e ir clasificando tareas según la prioridad o la dificultad. La dificultad de este método es que puede resultar algo abrumador ver todo un mes planeado, con tantas cosas por hacer y tan poco tiempo. Es un método ideal para aquellas personas que disfruten de una planificación férrea y les guste controlar su tiempo.

Lo importante es clasificar las tareas y marcar bien los objetivos

Por último, vamos a mencionar el método de las tres listas. Se trata, como su nombre indica, de hacer tres listas: una con las cosas urgentes para ese día, otra con las cosas importantes, pero que pueden acabarse en otro momento si no da tiempo, y otra con las tareas que pueden tener una fecha futura en concreto o que “ya harás”. Este es un método que te permite clasificar las cosas pendientes por prioridad, dándote más libertad a la hora de organizarte y más control sobre los eventos.