Purgar los radiadores: cómo hacerlo para mejorar su rendimiento y ahorrar energía

La llegada del frío polar a la península ha hecho que las temperaturas bajen considerablemente en los últimos días y, aunque ha llegado con bastante retraso, la gente ha empezado a encender por primera vez la calefacción para dar un calentón a sus casas. De ese modo, se elimina la gélida y desagradable sensación de frío que se mete por todo el cuerpo.

El sistema más extendido en los hogares españoles para calentar las distintas habitaciones suelen ser los radiadores. Y, para que funcionen a pleno rendimiento, necesitan un pequeño mantenimiento que se realiza de manera muy sencilla purgando estos dispositivos. De este modo, se mejora su funcionamiento, se reduce el consumo de energía y se ahorra en la factura eléctrica. Y, además, evitarías que estos aparatos calienten más unas zonas que otras o que se produzcan esos molestos ruidos de gotas cayendo de forma incesante.

TE PUEDE INTERESAR

Los mejores radiadores eléctricos para casa: cuál comprar, tipos y comparativa

ACyV

A la hora de purgar los radiadores, hay que tener en cuenta que se debe realizar con la calefacción apagada y fría. Por lo tanto, habrá que cerrar la llave de paso de agua al radiador. Hecho esto, hay que coger una llave inglesa o un destornillador para girar la válvula de la parte superior del aparato. Esta debe quedar abierta para que el agua salga de forma constante y sin gorgoteos. Este proceso habrá que repetirlo en cada uno de los radiadores de la casa.

Presión entre 1 y 1'5 bares

Cuando se finaliza el purgado se tiene que hacer una comprobación de la presión del agua, que debe estar entre 1 y 1'5 bares. El manómetro suele estar en la parte inferior de la caldera. En el caso de que los radiadores no calienten o lo hagan de forma irregular puede que el sistema no esté equilibrado.

En la parte inferior existe otra llave, el detentor. Para identificarlo hay que fijarse en la tapa de metal o plástico que esconde un tornillo Allen, el cual abre el paso del agua. Su función es compensar el caudal de agua entre los radiadores del sistema.

El purgado de los radiadores se tiene que realizar con la calefacción apagada y fría

Cuando la caldera esté en funcionamiento y las llaves de entrada y detenedores estén abiertos del todo, se podrá comprobar cuáles calientan antes y a mayor temperatura. En aquellas zonas que se necesite se puede cerrar un poco más el detentor para desviar el caudal del sistema a los radiadores que necesiten más temperatura.