Se queda encerrado en el baño y vive un momento de lo más "surrealista"

Los hay del trabajo, del grupo de amigos, de la familia, del colegio de los niños y hasta de la comunidad de vecinos. Los grupos de WhatsApp son una herramienta que todos usamos a diario y que facilita la comunicación instantánea con la gente de nuestro entorno, aunque también pueden llegar a ser una auténtica tortura.

En cualquier caso, su uso siempre nos deja anécdotas divertidas como la de un joven catalán (@Paugui__) que, tras quedarse encerrado en el baño de la casa familiar, publicó en Twitter una captura de pantalla con los siete mensajes ne los que pedía ayuda a su familia a través de la aplicación de mensajería instantánea.

El chico señaló en su cuenta de la citada red social que se encontraba de "vacaciones en familia" y definió lo que le ocurrió como "surrealista". "Me he quedado encerrado en el lavabo. Cuando os despertéis ya me abriréis. Creo que solo se puede desde fuera", señaló en un primer momento, en el grupo familiar.

"No podéis dejar a un hijo morir de hambre"

Pasados 41 minutos desde que mandó los primeros mensajes y, al ver que sus familiares no respondían, volvió a escribir al grupo de WhatsApp. "No tengo ninguna prisa, eh. Nada más llevo 45 minutos aquí. Pasad unas galletas por debajo de la puerta, aunque sea", escribió en tono irónico el protagonista.

“Acaban de publicar las notas de las prácticas externas y he sacado un 9,5. No podéis dejar a un hijo morir de hambre ahora que ya tiene edad para ser vuestro sustituto como fuerza de trabajo ¿Quién le mantendrá cuando ya no trabajéis?”, espetó antes de que algún familiar finalmente le abriera la puerta del baño y pudiera salir de su encierro accidental.

Tras más de 45 minutos de encierro accidental, el joven pudo salir del baño finalmente

El mensaje, publicado el pasado sábado, se hizo viral rápidamente en redes sociales y acumula más de 7.600 ‘me gusta’ en Twitter. Además, generó multitud de reacciones. Un tuitero aseguro que "ese nivel de drama podría ser mío perfectamente", mientras que otro le preguntaba: "¿En serio?”, a lo que el joven contestó: “Sí, ha sido bastante lamentable... Además, la taza del inodoro no es especialmente cómoda cuando llevas tanto rato", concluyó.