Un coche aparcado 47 años en el mismo sitio: nuevo símbolo de Italia

Conegliano, una pequeña población italiana en la región del Véneto, ha acaparado la atención de los medios de comunicación tras convertir en monumento de la ciudad a un Lancia Fulvia del año 1962. Toda una institución en dicha localidad italiana.

Todo se debe a la curiosa historia de este coche, que ha permanecido aparcado durante 47 largos años en el mismo sitio: el número 7 de la Vía Ferdinando Zamboni. El coche de color gris es propiedad de Angelo Fregolent, un anciano de 94 años, y de su esposa Bertilla Modolo, de 84, según informa el diario ‘Il Gazzettino’.

Dueños de un quiosco de prensa, Angelo y Bettina compraron el vehículo en los años setenta y cuando decidieron no usarlo más para conducir, quedó estacionado debajo de su casa, frente al quiosco desde 1974. De este modo se convirtió en almacén de periódicos hasta que se jubilaron. Desde entonces lo han visto cada mañana desde su ventana.

Donación al municipio

Tras el revuelo mediático, muchos paisanos y turistas se acercaron al lugar para hacerse una foto con el Fulvia. Incluso, el presidente de la región del Véneto, Luca Zaia, ex ministro de Agricultura en la era Berlusconi, al enterarse de que el Lancia seguía allí declaró que lo había visto cada día mientras estudiaba en la Escuela Enológica, ubicada frente a la residencia del matrimonio. Más de un curioso se puso en contacto con Angelo para proponerle que le vendiera el coche. Sin embargo, Fregolent expresó su voluntad de donar el auto a la Municipalidad y dio carta blanca a la policía local para administrarlo.

De aquí surgió el contacto con Paolo Picco, presidente del Club Serenissima Storico que le propuso exhibir el Lancia Fulvia en el Salón del Automóvil de Padua el pasado mes de octubre. Tras su exhibición, una empresa especializada en Vicenza se ofreció a restaurarlo de forma gratuita, ya que el coche, en estado de abandono, necesita un mantenimiento importante y, en algunos lugares, el óxido incluso ha perforado la carrocería.

El coche ha permanecido aparcado desde 1974 en el número 7 de la Vía Ferdinando Zamboni

Una vez restaurado, el Fulvia, que se ha convertido en todo un símbolo de la ciudad italiana, será colocado en un rincón del jardín del instituto Cerletti de la Escuelo Enológica de Conegliano, en sustitución de un chopo centenario que tuvo que ser talado por estar enfermo. De este modo se respetará el único deseo de Angelo y Bettina: poder seguir viendo su coche desde la ventana de su casa.