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La madre que corría empujando el carrito de sus hijos para adelgazar y mantener su racha
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Lleva 600 días consecutivos

La madre que corría empujando el carrito de sus hijos para adelgazar y mantener su racha

Un ajuste en su dieta para evitar picar entre horas inconscientemente han contribuido a una pérdida de 15 kilos

Foto: Krista Jett se prometió que iba a hacer un cambio en su vida "por mí misma" (Unsplash)
Krista Jett se prometió que iba a hacer un cambio en su vida "por mí misma" (Unsplash)

"Como mujer bajita, siempre he luchado para mantener mi peso de forma constante. Engordar un par de kilos provoca que mi ropa no me quede bien y me sienta incómoda en mi propia piel", ha contado a Runner's World Krista Jett. Después del nacimiento de su hija, la mujer ganó 15 kilos y vio cómo las prendas que llevaba antes de la gestación no le servían. Recuerda que "tenía que seguir usando mi ropa de premamá y me dolían la espalda y casi todas las articulaciones".

El 30 de diciembre de 2019, Jett se prometió que en 2020 iba a hacer un cambio en su vida no por sus hijos, ni su matrimonio, sino "por mí misma". Seguir una dieta basada en una alimentación sana y hacer deporte para perder peso no es tarea fácil, pero la mujer sentía que, en sus años de embarazo y lactancia, "había perdido el contacto conmigo misma y mis necesidades". Su propósito le motivó tanto que empezó antes del nuevo año: el 31 de diciembre de 2019 dio comienzo su nueva etapa de corredora.

Foto: Fuente: iStock

Aunque es interesante acudir a un médico o experto en nutrición que nos ayude a adelgazar (lo mismo pasa a la hora de hacer ejercicio), Krista ya había corrido en sus años universitarios, y tenía claro que este deporte le iba a venir bien. Recuerda que esta disciplina le ha permitido siempre "conectar con la naturaleza" y le ha proporcionado "energía".

Su próximo reto

Para poder cumplir su meta y correr todos los días, llevaba a sus dos hijos en el cochecito. Krista Jett no ha dejado de ejercitarse desde hace 600 días y, según ella, "la racha en sí misma es una motivación. Saber que he llegado tan lejos me motiva a seguir adelante y no perder el ritmo".

placeholder Después de cada carrera se toma un café o un té en su establecimiento favorito (Unsplash)
Después de cada carrera se toma un café o un té en su establecimiento favorito (Unsplash)

Aunque le parezca un poco duro a más de uno, esta mujer se levanta los días que trabaja a las cinco de la mañana para poder correr antes de ir a la oficina. Por el contrario, "cuando mi hijos van a la escuela, corro mientras están en el colegio y aprovecho ese tiempo para mi". Después de alcanzar un récord de 600 días consecutivos, espera llegar a los 1.000.

"Saber que he llegado tan lejos me motiva a seguir adelante y no perder el ritmo"

Este esfuerzo y un ajuste en su dieta para evitar picar entre horas inconscientemente han contribuido a una pérdida de 15 kilos. Además, Krista Jett ha logrado mantener ese peso durante dos años. Al cambio de su apariencia física se suma uno en el aspecto mental: "Siempre he luchado con una autoestima frágil y una falta de confianza en mí misma y en mis capacidades".

El orgullo del esfuerzo realizado

Sin embargo, "mantener la racha de carreras y perder peso me ha demostrado que soy capaz de hacer cosas difíciles". Como son muchas las personas que tienen problemas para adelgazar y perder peso, Krista Jett anima a todos los que puedan a enfundarse las zapatillas y salir a la calle, ya que "la cantidad de orgullo que sentirás por haber completado un mes corriendo es increíble".

Foto: El running ha salvado la vida de Helen... además de adelgazar 20 kilos (Facebook/The Running Mum)

Por último, suele recompensarse por su trabajo duro. Después de cada carrera se toma un café o un té en su establecimiento favorito o publica en Instagram que acaba de terminar su 550ª carrera consecutiva. Es tan importante ejercitarse como reposar el cuerpo al acabar, y qué mejor forma que hacerlo premiándose a uno mismo por el esfuerzo realizado.

"Como mujer bajita, siempre he luchado para mantener mi peso de forma constante. Engordar un par de kilos provoca que mi ropa no me quede bien y me sienta incómoda en mi propia piel", ha contado a Runner's World Krista Jett. Después del nacimiento de su hija, la mujer ganó 15 kilos y vio cómo las prendas que llevaba antes de la gestación no le servían. Recuerda que "tenía que seguir usando mi ropa de premamá y me dolían la espalda y casi todas las articulaciones".

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