Cómo ayudar a los estudiantes de secundaria a estar menos estresados
La ansiedad surge como respuesta a una situación que se avecina y que parece peligrosa, pero por suerte hay trucos para librarse de ella
La primavera tiene muchas cosas buenas, más aún si pensamos que el año pasado por culpa de la pandemia no pudimos disfrutarla como es debido. Sin embargo, para los estudiantes es una época complicada, pues la sangre se altera y llegan los exámenes, en los que muchos se juegan a una carta el paso al siguiente curso o incluso la entrada en la universidad (y la elección de una carrera). Es normal, por tanto, que sea un momento particularmente estresante.
¿Cómo puedes ayudar a tu hijo adolescente a tranquilizarse? La psicóloga Susan Heitler explica en 'Psychology Today' que la ansiedad surge como respuesta a una situación que se avecina y que parece peligrosa. Cuando alguien se queda atascado en el pensamiento de "qué pasaría si", en el peor de los casos, sin seguir cada preocupación con un plan de acción sobre cómo abordarlo, la ansiedad permanece. En general, la ansiedad adolescente gira o se desencadena en torno a tres áreas: problemas familiares, relaciones con los compañeros y tareas escolares. ¿Cómo remediarlo?
Metas claras y realistas
¿Tiene un torbellino de preocupaciones? Lo ideal es que eso cambie por un plan de acción concreto, dirigido a objetivos muy específicos. Esto puede tener un poderoso impacto a la hora de aliviar la ansiedad. Cuantos más detalles haya en el plan, mejor.
Desarrollar la autoestima
Una opción que puede llevar a cabo es hacer una lista de pensamientos positivos sobre sí mismo, otra es leer citas edificantes diarias.
Llevar un diario
Anotar los sentimientos siempre es sanador, ya sea en un diario o las notas del móvil. Está demostrado que escribir las preocupaciones las saca del torbellino mental. Cada preocupación, si se escribe, puede llevar a una resolución de problemas. También puede hacer un plan de cómo resolverá cada problema específico que le esté provocando un sentimiento negativo.
Incluir diversión en el horario
Es importante asegurarse de incluir en la rutina tiempo con amigos, familiares y/o para realizar actividades que realmente disfrute. El estrés es un problema menor cuando se alterna con la relajación, la conexión social y la diversión.
Abordar los problemas
A veces, y especialmente con su hijo mayor, los padres se aferran demasiado a la manera de educar que parecía funcionar cuando los adolescentes eran más pequeños. Demasiada "ayuda" diciéndoles qué hacer, en lugar de realizar preguntas que los guíen a través de su propia resolución de problemas, socava la capacidad de los adolescentes para pensar por sí mismos. Castigarlos cuando hacen algo que los padres no aprueban también puede ser contraproducente. Necesitan que sus padres les den, en su mayor parte, la libertad de cometer errores, pues estos son aprendizaje.
Además de estos puntos, la meditación también puede ayudar. Cuando la ansiedad está relacionada con una preocupación específica, la creación de un plan de acción para abordar el problema puede ayudar a reducir o incluso eliminarla, pero la respiración profunda, la meditación y cosas por el estilo pueden ayudar a que pase la temida ola.
La primavera tiene muchas cosas buenas, más aún si pensamos que el año pasado por culpa de la pandemia no pudimos disfrutarla como es debido. Sin embargo, para los estudiantes es una época complicada, pues la sangre se altera y llegan los exámenes, en los que muchos se juegan a una carta el paso al siguiente curso o incluso la entrada en la universidad (y la elección de una carrera). Es normal, por tanto, que sea un momento particularmente estresante.