El secreto asiático para el antienvejecimiento: un diamante rojo

Asia ha suscitado desde hace siglos el interés de Occidente. Quizá sea la fórmula de su longevidad, sus costumbres y comidas que se nos antojan exóticas, o incluso modas más recientes como el kpop o el anime, pero hay algo que llama fuertemente la atención. Japón, China o Tailandia, por ejemplo, suelen ocupar los ránkings anuales de países más visitados por los viajeros.

Y no solo el secreto de la longevidad oriental es motivo de asombro y envidia (Japón es el país con mayor esperanza de vida del mundo), también la capacidad que tienen para lucir una piel joven durante mucho tiempo. La cosmética coreana, por ejemplo, se ha puesto de moda en los últimos años, al igual que los diez pasos que siguen las coreanas para mantener siempre un rostro perfecto.

Un secreto milenario

Aunque a día de hoy no existe una fuente de la eterna juventud en la que sumergirnos, como Obélix en su marmita, con el fin de mantenernos siempre lozanos, es cierto que los orientales parecen tener la suerte de lucir más tiempo un aspecto infantil. Muchos apuntan diversos factores, como la obsesión por el sol (de ahí que no se bronceen y se esfuercen para no exponerse para proteger su piel, porque estéticamente quieren mantenerse pálidos), la alimentación o incluso una cuestión meramente genética, porque supuestamente tienen más colágeno, pero el hecho es innegable.

Según la leyenda hace 2.000 años un médico visitó una aldea donde todos eran centenarios: bebían de un pozo rodeado de bayas de goji

Si nos centramos en la alimentación, quizá sea bueno hablar de un alimento concreto: la baya de goji, que se cultiva en toda China. Tiene el estatus de 'superalimento' e incluso los asiáticos la conocen como 'diamante rojo', pues desde el siglo III se utiliza de manera medicinal. Los agricultores de la región de Nigxia la cultivan desde hace siglos, y sus supuestos poderes medicinales han sido reconocidos por los practicantes de Medicina Tradicional China. Además de eso, consideran que frena el envejecimiento, pues contiene vitamina C, antioxidantes, aminoácidos y oligoelementos, y además se receta para mejorar la función hepática y renal.

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Ya sea sobre pollo, dátiles, jengibre o incluso té, los chinos suelen espolvorear la baya sobre multitud de alimentos. "Si tienes dolor de garganta o fiebre también te recomendamos tomarla"; cuenta la doctora Zhang Ruifen en 'BBC'. Según la leyenda, hace más de 2.000 años un médico visitó una aldea en China donde todos tenían más de 100 años, y descubrió que bebían agua de un pozo rodeado de bayas de goji.

los productos exóticos parecen poblar cada vez más las estanterías. En Estados Unidos una bolsa de bayas puede venderse por 10 dólares

Lo interesante es que en la actualidad la baya se está exportando al resto del mundo y los más jóvenes también están comenzando a consumirla. Los jóvenes asiáticos de la generación Z la adquieren continuamente, y en Estados Unidos algunas personas incluso llegan a pagar 10 dólares (el triple de precio que en Asia) por un paquete. Incluso algunos chefs han comenzado a usarla para dar sabor a sus platos.

No es el único superalimento que parece haber despuntado en la actualidad. Quinoa, semillas de chía, espelta, aceite de coco... los productos exóticos parecen poblar cada vez más las estanterías de los herbolarios y supermercados. En muchas ocasiones se les atribuyen centenares de beneficios saludables y propiedades, lo que, unido a su carácter exótico, es sin duda un incentivo para que muchas personas decidan comprarlo. Una muestra más de la globalización, en un mundo hiperconectado donde absolutamente todo es potencialmente digno de ser consumible, hasta la juventud eterna.