¿Es posible contraer una gripe y un constipado a la vez? Responden los médicos

Como todo el mundo en esta vida, alguna vez te habrás sentido aquejado por un resfriado, y en otras ocasiones habrás pescado una gripe. Al principio quizá te cueste distinguirlos, pero aunque los síntomas comunes son la congestión nasal, la mucosidad, la tos, el dolor de garganta y cabeza o la pérdida de apetito, el resfriado apenas provoca fiebre, y en la gripe las molestias musculares y los escalofríos también juegan la partida.

Lo que probablemente no te haya sucedido mucho es contraer un resfriado cuando ya tienes una gripe, pues suena como una pesadilla. Afortunadamente no sucede demasiado a menudo, según un nuevo estudio; de hecho, los investigadores descubrieron que tener gripe reduce las posibilidades de desarrollar una infección con el virus del resfriado común, informa 'Live Science'. "Lo que descubrimos es que durante ciertas temporadas en las que hay altos niveles de influenza es menos probable que contraigas un resfriado causado por un rinovirus", contó el profesor Pablo Murcia, autor principal del estudio que se ha llevado a cabo en la Universidad de Glasgow.

Virus que no quieren vivir juntos

Los investigadores generalmente estudian ambos virus (resfriado y gripe) por separado, "pero hemos demostrado que debemos estudiarlos juntos como si fueran un ecosistema", añadió Murcia. "Si entendemos cómo interactúan los virus y cómo ciertas infecciones de carácter vírico pueden favorecerse o, por el contrario, inhibirse las unas a la otras, quizá podamos desarrollar mejores formas de atacar a los virus", indicó. El estudio se publicó en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences'.

Los investigadores por ahora tienen una teoría: estos virus pueden competir entre sí para causarte miseria

En el nuevo estudio los investigadores analizaron información de más de 36.000 personas en Escocia que proporcionaron más de 44.000 muestras de garganta y nariz para analizar enfermedades respiratorias durante un periodo de nueve años. En la población, el 35% dio positivo por al menos un virus, y el 8% lo dio por coinfección con al menos dos. Curiosamente, un análisis informático de los datos mostró que cuando la actividad de la gripe aumentaba en invierno las infecciones con rinovirus disminuían.

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"Un patrón realmente sorprendente en nuestros datos es la disminución de los casos de rinovirus del virus respiratorio... que ocurren durante el invierno, alrededor del tiempo en que aumenta la actividad de la gripe", dijo otra de las autoras del estudio, Sema Nickbakhsh, investigadora asociada del Centro de Investigación de Virus. Además, cuando los investigadores observaron a pacientes individuales, descubrieron que las personas infectadas con influenza A tenían un 70% menos de probabilidades de estar infectadas con rinovirus, en comparación con los pacientes infectados con otros tipos de virus.

Además, las personas se quedan en casa cuando están enfermas, lo que reduce las posibilidades de contraer otro virus

Parece una suerte, pues sufrir ambas podría ser una tortura. Aún queda, no obstante, determinar la razón del efecto inhibitorio entre ambos virus. Los investigadores por ahora tienen una teoría: estos virus pueden competir entre sí en su búsqueda para causarte miseria. "Creemos que los virus respiratorios compiten por recursos" explicó Nickbakhsh, "puede que lo hagan por células específicas a las que infectar, o que la respuesta inmune de una persona a un virus dificulte que otro cause infección".

Y podrían existir otros factores, como que las personas se quedan en casa cuando están enfermas, lo que reduce las posibilidades de contraer otro virus. Mientras avancen las investigaciones, por lo menos, nos alegraremos de que ambos virus no quieran coexistir en nuestro organismo, para no agotar las existencias mundiales de pañuelos y sopas calientes.