¿Cuándo empieza la primavera? En 2019 entra con buen tiempo y sin recuerdo del frío

La primavera es una de las estaciones preferidas de mucha gente: no solo porque empieza a salir el sol y los días son más largos, también porque cada vez se ve más cerca el ansiado verano y sus consiguientes vacaciones. Si bien para los alérgicos acaba convirtiéndose en un engorro, las jornadas con más luz hacen que la gente salga más a la calle y sea capaz de sintetizar vitamina D que, entre otros aspecdtos, mejora la calidad y cantidad del sueño nocturno. Después de dos equinoccios seguidos con temperaturas bajas —en 2018 la primavera entró con complicaciones por el frío y cotas de nieve muy bajas—, el de este año no será igual. La primavera entra, de manera oficial, a las 22:58 del 20 de marzo, según los cálculos del Observatorio Astronómico Nacional (IGN, del Ministerio de Fomento) y tendrá una duración total de 92 días y 18 horas, dando paso al verano el 21 de junio.

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El cambio de estación viene marcado por los instantes en los que la Tierra se encuentra en una determinada posición en su órbita alrededor del sol. En el caso de la primavera, esta posición se da cuando el centro del Sol (visto desde la tierra) cruza el ecuador celeste en su movimiento aparente hacia el norte. El día en que esto sucede, cuando entra la primavera —y por ello conocido también como equinoccio de primavera—, la duración del día y la noche prácticamente coinciden. Y cuando en el hemisferio norte entramos en primavera, en el sur dejan atrás el verano para dar paso al otoño.

Durante esta estación, además, la luz solar se irá ampliando casi tres minutos al día, y es en la que se producirá el cambio de hora, recuperando el horario de verano: durante la madrugada del sábado 30 de marzo al domingo 31 de marzo, a las 2:00 el reloj se adelantará una hora, pasando a ser las 3:00 (en la península, en Canarias a la 1:00 serán las 2:00). Aunque Bruselas pretendía que éste fuera el último cambio de hora, no es así.

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La primavera no entra siempre el mismo día, ni a la misma hora: el inicio de esta estación es el momento en el que la longitud del día se alarga de manera más rápida. A las latitudes de la península, el sol sale por las mañanas más de un minuto antes que el día anterior, y por la tarde se pone más de un minuto después. No obstante, este punto se alcanza en puntos distintos cada año. A lo largo del siglo XXI el inicio de la primavera podrá darse en tres fechas (19, 20 ó 21 de marzo): el más tempranero será en 2096, y el más tardío ya ha pasado, en 2003. Estas variaciones de un año para otro se deben al modo en que encaja la secuencia de años según el calendario —unos bisiestos, otros no— con la duración de cada órbita de la tierra alrededor del sol.

Luna llena, cuatro planetas y ningún eclipse

La primera luna llena de la primavera llegará pronto, ya que un día después del cambio de estación hará su primera aparición: le seguirán otras tres —el 19 de abril, el 18 de mayo y el 17 de junio—, mientras que la luna nueva será visible los días 5 de abril, el 5 de mayo y el 3 de junio. Respecto a los planetas, al amanecer primaveral destacarán Venus, Saturno y Júpiter (este último también será visible las noches de junio) y al anochecer, Marte.

Sin embargo, la primavera transcurrirá sin ningún eclipse, ni de sol ni de luna. Lo que sí se podrá observar serán las dos lluvias de meteoros más importantes de la estación: la de las líridas, que tendrá lugar su punto máximo el 22 de abril, y las eta acuáridas, cuyo máximo sucederá en torno al 6 de mayo.