Te equivocas con el deporte: errores que cometes con el ejercicio y te perjudican

Que el ejercicio regular es fundamental para la salud lo sabemos todos. Por ello mismo, aunque llueva y lo único que nos apetece realmente es quedarnos entre las sábanas, o haga mucho calor, o nos duela la uña del pie, nos calzamos las zapatillas deportivas y lo damos todo. Nos ponemos los auriculares, resuena en nuestros oídos 'Eye of the tiger' y salimos a la carga, dispuestos a sobrepasar nuestro límite.

Sin embargo hay un pero. Los expertos siempre tienen algunas dudas, por ejemplo ¿qué deporte de impacto es el menos perjudicial para nuestras articulaciones? Ahora, además de esa, surge otra duda... ¿muchos de los mitos que consideramos reales tienen una base científica? Pues, quizá, te sorprenda...

¿Cuánto ejercicio hay que hacer?

La leyenda dice que para mantenerte en forma con hacer ejercicio dos veces a la semana es suficiente. Error. Mec. En realidad, para notar verdadera mejoría en tu salud y tu físico, lo ideal es que hagas de tres a cinco sesiones semanales, ¿sacas tiempo?

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A. López

Un nuevo estudio publicado en enero en la revista Circulation de la American Heart Association descubrió que en un grupo de participantes se daban los mejores resultados para la salud del corazón cuando trabajaban de cuatro a cinco veces a la semana.

La mañana... ¿el mejor momento?

Las malas (y buenas) lenguas aseguran que el mejor momento para ejercitarte es la mañana, sobre todo si no has desayunado nada antes. En realidad, el mejor momento para el entrenamiento es aquel que te permita ejercitarte de manera constante, sea cuando sea. Si al final te decides por la mañana, bienvenido sea, puesto que las investigaciones avalan esa pérdida de peso. Si eliges la noche y sacas varios días a la semana, estupendo también. Probablemente te sirva para liberar energía tras un duro día de trabajo.

"Levantar pesas convierte la grasa en músculo"

Lamentamos decirte que no es así. Fisiológicamente hablando, eso es imposible. El entrenamiento con pesas ayuda a desarrollar el tejido muscular dentro y alrededor de cualquier tejido adiposo, y si quieres perder peso, lo mejor es combinar ejercicios de cardio con una alimentación adecuada.

¿Cuántos días a la semana? ¿Cuándo es el mejor momento? Hay muchas dudas sin resolver en lo referente al ejercicio

La dieta debe incluir verduras, granos enteros, proteínas magras y grasas saludables como las que se encuentran en el aceite de oliva y el pescado. Así que ya sabes.

"Con ejercicio pierdes peso seguro"

Volvemos a otra leyenda urbana que se ha repetido a lo largo de los siglos por las distintas generaciones. En realidad, por mucho ejercicio que hagas, si después vuelves a casa y te comes un paquete de donuts, no servirá de nada. Los expertos dicen que adelgazar casi siempre comienza con cambios significativos en tus hábitos alimenticios.

"¿Lo mejor? Las bebidas energéticas"

Terminas tu entrenamiento y echas mano de una de ellas para recuperarte. En realidad, están hechas de agua y azúcar. Los expertos recomiendan en su lugar reabastecerse de combustible con agua pura y una merienda rica en proteínas, ya que los estudios sugieren que las proteínas ayudan a reacondicionar los músculos después de un entrenamiento.

¿Hay que sudar?

Parece que si no expulsamos líquido por nuestro cuerpo (no pienses mal, nos referimos a las glándulas sudoríparas) es como si no hubieramos hecho nada ¿no? Pues es falso. Hacer kickboxing está bien, pero no es el único deporte del mundo.

Cualquier esfuerzo que te haga moverte y respirar, ya sea una clase de kickboxing de dos minutos por semana o una caminata de 30 minutos al trabajo, tiene muchos beneficios para tu cuerpo, según una investigación reciente publicada esta primavera en el Journal of the Asociación Americana del Corazón .

Los abdominales ¿el camino al éxito?

Hay mucha gente que aún cree el mito de que son el boleto más rápido para conseguir el preciado six pack. ¡Falso! Mientras que fortalecen solo unos pocos grupos musculares, hay otros ejercicios (las tablas, por ejemplo) que sirven mucho más, por ejemplo, para esos "olvidados" que se encuentran en la espalda o los costados. Ah, claro, quizá no sabías que existían.