Es noticia
La imparable debacle del laborismo: pierde hasta un escaño que mantenía desde 1935
  1. Mundo
THERESA MAY BARAJA ELECCIONES ANTICIPADAS

La imparable debacle del laborismo: pierde hasta un escaño que mantenía desde 1935

En unas elecciones parciales celebradas tras la dimisión de su diputado, el distrito ha pasado a manos de los tories, a pesar de 7 años de austeridad. Es la primera vez desde 1982 que sucede algo así

Foto: El líder laborista Jeremy Corbyn comparece tras la pérdida del escaño de Copeland, el 24 de febrero de 2017 (Reuters)
El líder laborista Jeremy Corbyn comparece tras la pérdida del escaño de Copeland, el 24 de febrero de 2017 (Reuters)

¿Está viviendo el laborismo británico su peor crisis en 90 años? Westminster ha desayunado este viernes con esta cuestión tras conocerse que el partido de la oposición ha perdido el escaño de Copeland, uno de sus feudos más preciados desde 1935.

En unas elecciones parciales celebradas tras la dimisión de su diputado, el distrito ha pasado a manos de los tories. Es la primera vez desde 1982 que el partido del Gobierno arrebata un asiento en la Cámara de los Comunes a la oposición en este tipo de comicios. En otras palabras, apenas seis meses en Downing Street y Theresa May ha conseguido algo que no pudieron lograr John Major, Tony Blair, Gordon Brown y David Cameron.

Lo sucedido este viernes en Copeland evidencia la crisis más profunda que está viviendo el Partido Laborista desde que se consolidó en los años 20 como una de las dos grandes formaciones del Reino Unido. Hay que tener en cuenta que el Ejecutivo conservador, que ha aplicado durante los últimos siete años la era de la austeridad, hace frente actualmente a grandes críticas por su gestión en el sistema de salud pública y la asistencia social para ancianos, sus recortes en escuelas y la subida de impuestos para las Pymes. Si con semejante escenario Jeremy Corbyn no ha sido capaz de retener el histórico escaño, está claro que su formación tiene problemas.

Foto: Jeremy Corbyn, líder del Partido Laborista británico, durante una protesta contra la represión policial en Orgreave en 1984, en Londres (Reuters).

Lo cierto es que nadie se explica cómo a día de hoy Corbyn sigue sobreviviendo políticamente. El enemigo de la austeridad, admirador de Hugo Chávez, defensor de la nacionalización del gas y electricidad y activista pro-palestino fue elegido por primera vez como líder laborista en 2015. Pero jamás contó con el apoyo de sus diputados, que consideran que su giro hacia la izquierda más radical convierte a la formación en ilegible ante cualquier cita con las urnas.

18 puntos de ventaja a los conservadores

El Brexit supuso la excusa perfecta para organizar la rebelión interna, argumentando que no había hecho lo suficiente para defender la unión con la UE. Se presentó entonces una moción de confianza que fue firmada por 172 de los 230 parlamentarios que forman las filas de la oposición. La mayor parte del equipo del denominado “Ejecutivo en la sombra” dimitió. Pero las bases –que pueden votar pagando 29 euros- volvieron a salvarle en las primarias del pasado mes de septiembre.

El problema es que los afiliados no están con Corbyn en la Cámara de los Comunes, donde cada día se evidencia su falta de liderazgo en una oposición cada vez más insignificante. Los laboristas no han conseguido sacar adelante ninguna enmienda al proyecto de ley sobre el Brexit. La izquierda no atraviesa su mejor momento a ambos lados del Atlántico.

El único consuelo que queda hoy a la formación es que, al menos, han sido capaces de retener el distrito de Stoke-on-Trent Central, que tienen desde hace 60 años. La principal amenaza que se planteaba aquí era los euroescépticos del Ukip, que terminaron segundos en los comicios generales de 2015. Esta circunscripción votó abrumadoramente a favor de abandonar la Unión Europea en el pasado plebiscito del 23 de junio, ganándose el apodo de “Brexit Central”.

Foto: Soldados británicos durante una operación en Malgir, provincia de Helmand, Afganistán (Reuters).

Por lo que, el nuevo líder del Ukip, Paul Nuttall, contaba con bastantes posibilidades para conseguir asiento en la Cámara de los Comunes donde, debido al poco representativo sistema electoral británico, los eurófobos sólo tienen un representante. ¿El principio del fin para el Ukip? A pesar haber conseguido que los británico votaran por el divorcio con el bloque, los euroescépticos también atraviesan una profunda crisis desde que el emblemático Nigel Farage les dejara huérfanos postulándose como intermediario entre Downing Street y la Casa Blanca después de que su gran amigo Donald Trump consiguiera una victoria que ninguna encuesta predijo.

El gran momento, sin embargo, que atraviesan los conservadores, que sacan hasta 18 puntos de ventaja en las encuestas a laboristas, podría llevar a Theresa May a convocar elecciones anticipadas. La líder tory no ha sido electa en las urnas y un triunfo electoral afianzaría aún más su liderazgo de cara a las negociaciones del Brexit.

¿Está viviendo el laborismo británico su peor crisis en 90 años? Westminster ha desayunado este viernes con esta cuestión tras conocerse que el partido de la oposición ha perdido el escaño de Copeland, uno de sus feudos más preciados desde 1935.

Theresa May
El redactor recomienda