“Vorágine de recursos” de CiU para que Cataluña no pierda competencias

Al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se le multiplican los enemigos en tiempos de crisis. Sus tradicionales aliados, los nacionalistas catalanes, están dispuestos a iniciar una “vorágine de recursos y contrarrecursos como se hizo en el último Gobierno de José María Aznar”. ¿El motivo? “Tenemos indicios de que Rajoy aprovecha la crisis para eliminar competencias e iniciar una recentralización del Estado”, dice a El Confidencial Ramon Espadaler, portavoz adjunto de Convergència i Unió (CiU) en el Parlamento catalán.

Los nacionalistas afirman que tienen “muchas sospechas” que apuntan a esa recentralización e incluso “evidencias”. Espadaler subraya, además, que ésta se nota especialmente “en el papel que se le da a las Diputaciones. El Gobierno central apuesta más por las Diputaciones que por las comunidades autónomas. De ahí, por ejemplo, que quiera centralizar en ellas muchas de las competencias que tienen los ayuntamientos en la actualidad. Es el caso de los temas de educación que afectan a los municipios de menos de 20.000 habitantes, que pasarán a depender del ente provincial”.

Hace poco más de un año, incluso el PP se planteaba seriamente si las Diputaciones eran prescindibles. Ahora, la estrategia popular parece remar en sentido contrario.

Y no es sólo eso: “Lo más contundente es que se aprovechan los reales decretos dictados por el Gobierno español para incidir en la recentralización”, advierte Ramon Espadaler. En resumen, los nacionalistas afirman que “da la sensación de que se aprovecha la crisis con la clara intencionalidad política de laminar competencias autonómicas”.

En el terreno del decreto sobre educación, los nacionalistas son conscientes de que los ratios de alumnos por aula, uno de los puntos que modifican sustancialmente el actual sistema, son competencia del Gobierno central. ”No lo recurriremos, porque es una de las competencias básicas del Estado, pero la aplicaremos como podamos. Otros aspectos de la norma, sin embargo, son más complicados”, subraya el portavoz de CiU.

Espadaler explica que “ya hemos abierto una vía de diálogo con el Gobierno para tratar de llegar a un acuerdo. Josep Antoni Duran Lleida y Soraya Sáenz de Santamaría ya han tenido la primera reunión y esperemos que no tengamos que llegar al Tribunal Constitucional”. Si no hay movimientos por parte del Gobierno central, los nacionalistas llevarán a los tribunales al Gobierno de Rajoy. ”Aunque creemos que quieren negociar, porque para eso se ha abierto el diálogo”, matiza el portavoz convergente.

En el PP no se lo creen

Desde el PP, no obstante, niegan un trato de favor a las Diputaciones. “¡Pero si gobernamos con ellos, por ejemplo, en la Diputación de Barcelona! Eso es una excusa, si se quiere, pintoresca para justificar algo”, dice a este diario un miembro de la cúpula popular. Además, esta fuente señala que “estamos seguros de que la ofensiva de recursos se quedará en papel mojado. Lo que ocurre es que CiU no gobierna, tiene a la Generalitat paralizada y ha de hacer algo para que no se note esa paralización”.

Pero no es sólo es la Generalitat la que puede llegar a los tribunales. El Gobierno central se guarda la baza de hacer lo mismo con la polémica tasa del euro por receta que Cataluña pondrá en marcha el próximo día 23. Para oponerse a esta medida, los servicios jurídicos del Ministerio de Sanidad se basan en que esa tasa modifica el precio final del medicamento y eso es competencia del Estado, no de las comunidades autónomas.

Desde Cataluña, la sensación es otra. “Sus informes pueden decir lo que quieran, pero nosotros tenemos uno del Consejo de Garantías Estatutarias, que fue aprobado por unanimidad y que nos da la razón. Es cierto que el precio de los medicamentos depende del Estado. Pero la logística de la distribución es competencia autonómica. Los supuestos, pues, son distintos, ya que nosotros no modificamos el precio del medicamento, sino de la distribución. Además, la medida fue consensuada con el propio PP, por lo que no comprendemos que se opongan ahora. Y, por si fuera poco, queda claro que lo que persigue esta medida es racionalizar el uso de los medicamentos, no persigue un fin recaudatorio. Queremos corregir el uso abusivo de algunos medicamentos, porque con un euro por receta tampoco se va a recaudar tanto”.