Los jueces impiden a Valcárcel dejar su sucesión en Murcia ‘atada y bien atada’

Los jueces de Murcia están dificultando al presidente Ramón Luis Valcárcel elegir a su sucesor cuando deje vacante su puesto, este mes, para estar en posición de salida en la lista del PP a las elecciones europeas de mayo. Un auto del TSJ regional conocido ayer mantiene las imputaciones al candidato que gozaba de las preferencias del actual mandatario murciano, Pedro Antonio Sánchez, exalcalde de Puerto Lumbreras y actual consejero de Educación.

El lunes por la mañana, los magistrados de la Sala de lo Civil y Penal del TSJM, Manuel Abadía, Enrique Quiñonero y Joaquín Moreno, comunicaron que han decidido mantener la imputación contra Pedro Antonio Sánchez López, y otros miembros de su equipo en Puerto Lumbreras, por “supuestos delitos de prevaricación, cohecho e infidelidad en la custodia de documentos”. Tras la retirada de la carrera sucesoria del vicepresidente y consejero de Economía, Juan Bernal, sólo queda como aspirante sin mácula el portavoz popular en la Asamblea Regional, Juan Carlos Ruiz, aunque no sea el preferido ni del Valcárcel ni del partido.

La tormenta política interna en Murcia está servida. Preguntado sobre el auto del TSJ, Bernal comentó el lunes por la mañana que “hay un partido que ha azuzado estas investigaciones”. El portavoz del PP, Francisco Bernabé, interpretó para este diario que el vicepresidente se refería al PSOE, cuyos concejales en Puerto Lumbreras llevaron a los tribunales las actuaciones de Sánchez en relación al plan urbanístico local y el pago de su vivienda, y descartó que Bernal se refiriera a las divergencias habidas en el PP sobre los candidatos a suceder a Valcárcel. El exalcalde nuevamente imputado publicó también ayer un comunicado para decir que presentará al instructor “todos los documentos que permitan eliminar cualquier elemento de duda que puedan existir” sobre posibles actuaciones ilegales suyas.

A nadie se le escapa lainconvenienciade que sea un imputado quien ocupe por designación la presidencia de la Comunidad Autónoma de Murcia. Se tuerce así, por segunda vez, la designación del sucesor de Valcárcel, sobre la que se hacen cábalas desde hace ya dos años, cuando anunció su intención de no terminar esta legislatura como presidente para intentar ser elegido eurodiputado del Partido Popular Europeo. El plazo de aprobación de candidaturas al Parlamento de Bruselas por la Junta Electoral Central termina el 17 de abril, por lo que el margen para que Valcárcel dimita y su sucesor sea elegido es ahora de menos de un mes.

Por Sánchez había expresado Valcárcel su predilección hace apenas quince días diciendo que lo veía como el mejor colocado para sucederle, aunque mantuviera la formalidad de que será la dirección regional del partido quien lo elija. Tras la nueva imputación y con el tiempo agotándose, ya sólo queda un candidato sin problemas de la terna designada, en sentido literal, por el presidente regional para ocupar su lugar. Es Juan Carlos Ruiz, portavoz parlamentario regional del PP desde 2004.

El tercero en discordia, Juan Bernal, consejero de Economía y vicepresidente, abandonó la carrera sucesoria hace mes y medio. Y eso a pesar de que contaba con todas las papeletas hasta que se enmarañó la bronca sobre el aeropuerto de Corvera tras la retirada de la concesión al consorcio liderado por Sacyr, en septiembre pasado, y que se ha convertido en el fiasco más clamoroso de los 18 años de gobierno de Valcárcel. Las divergencias surgidas en el Ejecutivo regional sobre cómo solucionar el problema del nuevo aeropuerto y la entrada en la carrera sucesoria de otros dos candidatos llevaron al primer designado como sucesor, Bernal, a decidir hacer mutis por el foro.

Así que Sánchez se las prometía muy felices, sobre todo desde que, en diciembre, el juez Julián Pérez Templado, que instruía la causa en la que el candidato estaba imputado, la archivó al no encontrar indicios de delito. Pero la Fiscalía Superior de Murcia recurrió porque consideraba que hay suficientes razones jurídicas para mantener la imputación por cohecho y prevaricación contra el ahora consejero de Educación. Los tres magistrados de la Sala de lo Civil y lo Penal del TSJ murciano han dado la razón al fiscal y recomiendan la imputación a Sánchez, quien sólo puede confiar ahora en que el instructor Pérez Templado vuelva a ser indulgente con él.