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El oro físico como inversión para el ciudadano de a pie está a un sólo 'click'
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LINGORO OFRECE 'LIBRETAS' CONTRA MONEDAS ALMACENADAS EN SUIZA

El oro físico como inversión para el ciudadano de a pie está a un sólo 'click'

Europa vive una crisis sin precedentes y el mundo entero asiste atónito al devenir de los acontecimientos. Nadie sabe ni cuándo va a comenzar la recuperación,

Foto: El oro físico como inversión para el ciudadano de a pie está a un sólo 'click'
El oro físico como inversión para el ciudadano de a pie está a un sólo 'click'

Europa vive una crisis sin precedentes y el mundo entero asiste atónito al devenir de los acontecimientos. Nadie sabe ni cuándo va a comenzar la recuperación, ni cómo va a evolucionar la situación mientras aumentan las presiones inflacionistas. Los mercados se encuentran completamente rotos y los inversores solo piensan en poner a salvo como sea sus ahorros. Y en un escenario de máxima incertidumbre, el oro es el rey.

Existe la creencia generalizada que la compra de oro como inversión es una operación complicada, restringida a profesionales y grandes fortunas. Sin embargo, cualquier ahorrador puede destinar parte de su capital a comprar este metal precioso, al igual que contrataría un depósito o cualquier tipo de fondo, sin tener que preocuparse por el almacenamiento, cajas fuertes o contar con una gran fortuna. Sólo hay que saber cómo hacerlo.

Desde el estallido de la crisis en 2008, el número de firmas que ofrecen servicios relacionados con la inversión en oro se han multiplicado. Más allá de las tradicionales tiendas ‘compro oro’, que tienen un fin muy distinto, compañías como Oro Express u Oro Direct se han especializado en la comercialización de oro físico y monedas, sin embargo, hay opciones todavía más sencillas.

De hecho, comprar oro puede a estar a un solo click. Lingoro ofrece la posibilidad de comprar monedas por internet que quedan guardadas en cajas de seguridad en Francia o Suiza, con unos costes de almacenamiento bajos o, incluso nulos, dependiendo del producto que se contrate. Así, existe la posibilidad de abrir una libreta en la que el cliente mete todos los meses una cantidad determinada al modo de ahorro y ese dinero es destinado a la adquisición de fracciones de monedas, con la ventaja de que el oro está libre de IVA.

“En España la gente empieza poco a poco a interesarse por este valor y son los catalanes los más abiertos a invertir en oro”, explica a Cotizalia.com Lizette Paternina, directora de Lingoro. “Y con la inestabilidad bancaria que hay hoy en día en España, te ofrece la garantía de tener una parte de tus ahorros en Suiza en oro físico”. Así, la demanda mundial del oro físico como inversión creció un 15% en el primer semestre del año.

Pero la clave de toda buena inversión es la diversificación. En este sentido, se recomienda destinar del 10% al 20% a oro físico. Además hay que tener en cuenta que es una moneda universal, se trata de un activo líquido, principalmente las monedas que dividen más fácilmente el capital y no tiene riesgo de contrapartida.

A esto hay que sumar la fuerte revalorización que ha experimentado el metal precioso en los últimos tiempos y el recorrido que tiene por delante para tenerlo en cuenta como una inversión interesante. En lo que va de año acumula una subida del 10% y acaricia los 1.700 dólares la onza. Además, las previsiones de los analistas sitúan el precio de la onza en los 2.000 dólares a medida que se vayan confirmando los estímulos monetarios. De entrada, esta misma semana el Banco Central Europeo ya ha confirmado la compra de bonos soberanos, mientras que todo apunta a que la Reserva Federal esperará a las elecciones presidenciales del próximo mes de noviembre para poner en marcha la tercera ronda de medidas de expansión cuantitativa.

Europa vive una crisis sin precedentes y el mundo entero asiste atónito al devenir de los acontecimientos. Nadie sabe ni cuándo va a comenzar la recuperación, ni cómo va a evolucionar la situación mientras aumentan las presiones inflacionistas. Los mercados se encuentran completamente rotos y los inversores solo piensan en poner a salvo como sea sus ahorros. Y en un escenario de máxima incertidumbre, el oro es el rey.