El reproche que Sarah Snook ('Succession') tuvo que aguantar en un rodaje: "Fue como si muriese por dentro"

• Premios Emmy 2024: lista de nominados, horario y dónde ver la gala por TV y en directo
• José Coronado y Luis Zahera se despiden de Entrevías: así ha sido el emotivo momento

La actriz australiana Sarah Snook podría llevarse un premio Emmy esta madrugada, en la celebración de la gala de los importantes galardones de la televisión norteamericana, por su papel de Shiv Roy en la serie Succession (HBO Max). Sin embargo, llegar hasta donde ha llegado no ha sido un camino de rosas.

En una entrevista para la edición británica de The Times del pasado domingo, Snook ha llegado a revelar que, a lo largo de su carrera, un productor le reprendió por comer tarta, y que un director de casting le llegó a llamar "doña nadie".

TE PUEDE INTERESAR

Brian Cox ('Succession') revela cuál es su frase favorita de la serie, y no es la que imaginas

A. Richart

Snook declaró que, antes de aterrizar en el fenómeno que ha supuesto la serie de Jesse Armstrong durante los últimos años, y tras conseguir un papel para una película, la figura responsable del casting le comentó que realmente era la opción que menos deseaban en su departamento, por no ser una cara conocida. "Pero el director y el guionista creen que eres buena para la película", concedieron a la actriz.

"Así que lo que vamos a hacer es cambiarte entera para que seas más comercial", comenta Snook que le propusieron en aquel proyecto, en el que pensaron en blanquearle los dientes, oscurecerle el pelo, y ponerle un entrenador personal para que perdiese peso y "luciese bien".

Uno de los productores le riñó por comer, frente al resto del elenco y el equipo

Snook consintió todas aquellas demandas con el fin de tener cabida en el exigente panorama audiovisual internacional. Algo que en la actualidad, echando la vista atrás, define como perder por completo la esencia de quién verdaderamente era ella: "tengo que ser todas las cosas que no soy yo".

Castigada sin postre

Sobre su anecdotario personal, Snook también ha añadido aquella vez en el que un día decidió comerse, en el set de rodaje, un pequeño pedazo de pastel de chocolate. En ese momento, uno de los productores de la película le riñó por comer aquello frente al resto del elenco y el equipo técnico.

Después, un diseñador de vestuario intervino en el percance, y le animó a seguir comiendo igualmente. Snook ha recordado aquel traumático episodio de su carrera, con duras palabras: "Todo el tiempo fue como si me muriese por dentro". La intérprete, presente en películas como Predestination o La modista, condenaba así la infantilización de las mujeres en la industria cinematográfica, negadas a actuar en su libre voluntad.

Snook se encuentra en estos momentos promocionando su nueva obra de teatro en Londres: una versión de El retrato de Dorian Gray, de Oscar Wilde, adaptada y dirigida por Kip Williams, en el que ella misma interpreta los veintiséis papeles de la pieza. La madrugada del pasado lunes, la actriz ganó un Globo de Oro en la categoría de series dramáticas, y en unas horas podría repetir lo mismo en la gala de los Emmy, donde está nominada como mejor actriz principal en una serie dramática.