John Cena, el nuevo 'Pacificador' de HBO Max: meme, 'foodtuber' y polémica en China

Los golpes que reciben los luchadores de 'wrestling' estarán guionizados, pero duelen de verdad. Que se lo digan a John Cena, laureado guerrero de la WWE durante 20 años y actor hipermusculado desde no mucho después. Los puñetazos que se escapan del libreto, los saltos al vacío y las lesiones —como un desgarro pectoral, narrativizado 'a posteriori', que lo dejó fuera del ring por meses— se han sedimentado sobre él hasta conformar una personalidad entre cómica y maldita que cotiza al alza en el audiovisual de hoy. Desde ahora, Cena tiene su propia serie de HBO: 'El Pacificador'.

El proyecto sale de 'El escuadrón suicida', blockbuster veraniego fallido de 2021 basado en personajes de DC Comics, donde Cena consiguió el papel del Pacificador, un justiciero tan conmovido por la paz que está dispuesto a matar a tantos hombres, mujeres y niños como sea necesario para conseguirla. James Gunn, el director y guionista de la cinta, recuperó al exluchador para una serie centrada solo en su personaje, que se acaba de estrenar en HBO Max.

Muchas figuras de la lucha libre encuentran cabida en las películas de Marvel y DC

Nacido para su papel, Cena es coproductor ejecutivo de la serie que cuenta, en ocho episodios —todos escritos también por Gunn—, lo que ocurre con el Pacificador tras los sucesos de 'El escuadrón suicida'. En el primer episodio, el vigilante se despierta de un coma en un hospital de Estados Unidos creyéndose libre, pero el gobierno vuelve a reclutarlo para una nueva misión. El trato, al igual que en la película, tiene truco: si se niega volverá a la cárcel donde estaba preso y si se rebela y huye, lo matarán.

Cena tiene una oportunidad de oro para comprometerse con las lindes más feas de su personaje, como un padre exsoldado, pueblerino y ultraconservador que lo convirtió en el letal asesino que es y que lo espera a la salida del coma. La serie ha heredado sin complejos el tono de 'El escuadrón suicida', un divertimento brutal que James Gunn regaló a la competencia tras ser despedido de Marvel por unos tuits ofensivos antiguos —y recontratado luego para otra película de 'Guardianes de la galaxia'—.

Precisamente, en Marvel y DC han encontrado cabida también Dwayne "The Rock" Johnson y Dave Bautista, otras figuras de la compañía de lucha libre WWE, la misma cantera de John Cena. La empresa produce desde hace décadas una liga inagotable de combates guionizados que extienden su esperpento desde el cuadrilátero hasta los camerinos y vestuarios de los luchadores, quienes acaban siendo más iconos que deportistas. En España, el fenómeno ha sido transgeneracional, emitido durante años en varias cadenas y apoyado siempre sobre los inolvidables comentarios del locutor Héctor del Mar, que falleció en 2019.

El prototipo y el doctor

Nacido en West Newbury, Massachusetts, en 1977, John Cena se pasó los noventa obsesionado con el rap y su cultura, embelesado por una circunstancia marginal y violenta —de vital importancia en el surgimiento del género— que no era la suya. Según cuenta el actor, el acoso que sufría por este 'hobby', mal visto en su estrato, lo llevó a comenzar una breve carrera como culturista y, de ahí, saltar a la lucha libre.

En 1999, empezó a combatir en una liga menor bajo el personaje 'The Prototype', un supuesto ciborg de pelo tintado con el que, pese a todo, consiguió cautivar a un ojeador de la WWE. Allí, viéndose incapaz de conectar con la audiencia, mudó la piel. Cuando Stephanie McMahon —nieta de Vincent J. McMahon, fundador de la compañía— lo pilló haciendo rimas de rap improvisadas en un viaje de empresa, el departamento creativo lo transformó en una parodia andante del rapero blanco, ataviado con camisetas anchas, cadenas y gorras del revés. En esa época se hizo llamar 'Doctor of Thuganomics', algo así como el Doctor de la 'Matonomía'.

En 2021, Cena protagonizó una incómoda polémica en el mercado cinematográfico chino

Convertido en un campeón cada vez más popular, fue la propia WWE quien allanó el camino de John Cena hacia el cine, con películas producidas por la propia compañía. 'The Marine', en 2006, fue la primera. Desde entonces, mientras su personaje de 'wrestling' se volvía cada vez menos macarra y más militar, ha explotado su vis actoral en varias comedias románticas o familiares, con pequeños cameos y como actor de voz. 'Fast & Furious 9' —donde interpreta al hermano perdido del personaje de Vin Diesel— y 'El escuadrón suicida' granjearon el pasado año a Cena el título de estrella de acción pasada de rosca por antonomasia.

Durante esa época, grabó todo un álbum de rap ostentoso, fue el filántropo más generoso que haya trabajado nunca con la fundación Make-A-Wish para niños con enfermedades graves y dio pie a dos de los memes más absurdos de Internet. Cena ha declarado que sabe esto último y que se lo toma con guasa. A su personaje de 'El Pacificador', racista y machista hasta la médula, no podría venirle mejor el agradecido sentido del humor del actor. La secuencia de créditos iniciales de la serie es la prueba definitiva de esto.

Comprometido con la expansión de la WWE por el globo, Cena empezó hace casi una década a aprender mandarín. El gigantesco mercado chino es un caramelo para cualquier negocio audiovisual occidental, pero obliga también a pisar terreno delicado. John Cena pudo haberse ganado al país del todo cuando, en 2018, se mudó a la región de Yinchuan para rodar una película con Jackie Chan para la que no hay fecha de estreno. Allí encontró una nueva faceta de sí mismo, la de 'foodtuber': durante unas semanas, el actor se grabó mientras probaba comida callejera china o hacía la compra en el mercado local, unos vídeos después publicados por la propia WWE.

Sin embargo, en la pasada primavera, Cena protagonizó una incómoda polémica con ese mismo público al que trataba de camelar. En una entrevista promocional de la última entrega de la saga 'Fast & Furious', el exluchador habló de Taiwán como un país, algo que molestó a la audiencia de China, donde se resisten a reconocer la independencia de ese estado. Cena se disculpó en mandarín en un vídeo que colgó en la red social china Weibo. La controversia apenas desluce una carrera actoral en la que el profesional parece querer centrarse por completo a partir ahora. El pasado septiembre, Cena pisó por última vez la lona de la WWE.

Al despedirse de la compañía que fue su hogar y trampolín, quizá recordara —porque se conocieron, claro— las palabras con que el añorado Héctor del Mar despedía siempre sus retransmisiones de 'wrestling' en nuestros televisores: "Aquí estoy porque he venido, porque he venido aquí estoy. Si no les gusta mi canto, como he venido, me voy".