Álex, tras quedar segundo en 'MasterChef 11': "Hay cosas que no solo dependen de nosotros"

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Lo dio todo para alzarse con el título de MasterChef España, pero el jurado finalmente proclamó vencedor de la edición a Eneko Fernández de Garayalde. El exfutbolista se impuso a Álex Cañada en uno de los duelos más reñidos que se recuerdan en la historia del programa.

En la final, Eneko y Álex ofrecieron al jurado y al chef invitado, Mauro Colagreco, un duelo en el que reinó el compañerismo. Como ganador, Eneko disfrutará de un premio de 100.000 euros y verá cómo su nombre queda grabado en la copa de vencedores de MasterChef. También se llevará el trofeo del programa y muy pronto llegará a las librerías su libro oficial de recetas. Además, el próximo curso se formará con un máster en Cocina, Técnica y Producto impartido por el Basque Culinary Center. El centro también ofrecerá premios al segundo y tercer clasificado: Álex disfrutará de un máster en Pastelería de Restaurante y Cocina Dulce; mientras que Lluís realizará un curso de especialización en Técnicas Culinarias de Vanguardia.

Álex presentó un menú en el que quiso relacionar la cocina con los grandes pilares de su vida que le han animado a perseguir su sueño: su familia. El entrante, Vermut en familia, incluyó piparra, transformada en gel, una esfera de aceituna, una caballa marinada en salazón de cítricos, y un crujiente de aceituna y fruta de la pasión. El plato principal, No se muere quien se va, fue un homenaje a su abuelo Juan: un ciervo marinado en soja, naranja y jengibre, acompañado de una crema de apionabo, la salsa del propio ciervo, un buñuelo de tuétano y una emulsión de castañas. El duelista acabó el plato con una vinagreta de setas perrechico y criadillas de la tierra. El postre fue un homenaje a su madre: una esfera de chocolate con una crema catalana, frambuesas, arándanos, shots de vainilla y flores nitro.

Álex Cañada: "Con cariño, trabajo y amor... llegaremos lejos"

"Fue muy bonito estar en el concurso", ha escrito el joven estudiante de cocina nada más acabar el programa. El catalán, de 19 años, ha querido públicamente dar las gracias a todas las personas que le han acompañado en esta aventura, especialmente a "las personas de detrás de las cámaras".

"Llegué al duelo final con mucha ilusión y pasión por la cocina y luchamos hasta el final para intentar cumplir un sueño desde pequeño". Según Álex, se esforzó al máximo en la gran final para "cerrar con broche de oro la ilusión de un niño que soñaba en su habitación con cumplir un sueño que alguna vez le prometió a sus padres".

Y aunque no ha podido alzarse con el triunfo, asegura estar muy "orgulloso" de haber llegado tan lejos. No hay que olvidar que MasterChef 11 ha sido, sin duda, la edición más difícil de todas las emitidas hasta la fecha, al contar con doble de pruebas y un total de 30 aspirantes.

"Nos quedamos con la miel en los labios y casi tocamos la gloria", afirma Álex, primer concursante que llega a la versión original tras haber participado previamente en MasterChef Junior. A pesar de quedar segundo, el joven asegura que no tirará la toalla: "Seguiremos con la misma ilusión por esta gran profesión. Con cariño, trabajo y amor... llegaremos lejos".

"Como decía el cuento... la tortuga gana a la liebre por la constancia que tiene, pero no por la rapidez". Y ese parece ser el camino que seguirá Álex. Continuará poco a poco peleando para llegar a convertirse, algún día, en un gran chef.

Y, por supuesto, no ha querido olvidarse de todos los seguidores que le han acompañado en esta increíble travesía. "Gracias por el cariño recibido. ¡Seguiremos creciendo como una gran familia y luchando por cumplir un sueño!".

"La final fue difícil. Intenté darlo todo, pero igual que cuando llueve no puedes hacer nada para que deje de llover... hay cosas que no solo dependen de nosotros", asegura Álex, dejando caer que el triunfo de MasterChef depende de una serie de valoraciones que no siempre puede controlar uno. "Lo importante de caer es saber sacudirse y seguir adelante".

Acaba su escrito en Twitter recalcando que un ganador es la persona que "jamás" se rinde, a pesar de las veces que pueda llegar a perder o a pesar de las veces que las cosas no salgan como deberían.