EEUU responde a China con un misil hipersónico que alcanza objetivos a 2.776 km de distancia

El Ejército estadounidense está a punto de realizar las pruebas de su último misil hipersónico de nueva generación que es capaz de alcanzar objetivos a 2.776 km de distancia. La noticia coincide con un reciente anuncio de China que asegura haber desarrollado un misil tierra-aire que puede eliminar aviones de combate enemigos a más de 2.000 kilómetros volando a velocidades hipersónicas, algo sin precedentes en la historia de la defensa aérea.

Estas pruebas se pueden enmarcar dentro de la carrera hipersónica que mantiene EEUU con China, y en menor medida con Rusia, que ya llevan años probando este tipo de armas. Hasta ahora, EEUU no ha estado muy fino en el desarrollo de sus misiles hipersónicos. El supuesto avance en este campo tanto de China como de Rusia ha animado al Pentágono a volver a desarrollar estas armas para no quedarse atrás. Sin embargo, han ido encadenando fracasos, en algunos casos estrepitosos.

Las pruebas del Dark Eagle

Según un reciente informe del Servicio de Investigación del Congreso (CRS) estadounidense, la nueva arma hipersónica, también conocida como Dark Eagle, “está compuesta por el Cuerpo de Planeo Hipersónico Común (C-HGB) y el propulsor de 34,5 pulgadas". La próxima prueba servirá para testar precisamente las capacidades del planeador.

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Este misil hipersónico superficie-superficie estadounidense cuenta con el misil propiamente dicho y un cuerpo planeador que estará propulsado un motor de cohete hasta alcanzar velocidades hipersónicas de Mach 5 (6.174 km/h) o superiores. Una vez expulsado el cohete, el C-HGB puede seguir planeando conservando su velocidad y será capaz de hacer rápidas maniobras que complican su detección antes de llegar a su objetivo.

El Ejército norteamericano asegura que su sistema, conocido como Dark Eagle, puede ascender a gran altura en la atmósfera terrestre, donde permanece fuera del alcance de los sistemas de defensa aérea y antimisiles hasta que se acerca a su objetivo a un máximo de 2.776 kilómetros de distancia.

Tras la prueba inicial del C-HGB esta primavera, el Ejército estadounidense tiene previsto realizar otra prueba a finales de este verano desde su sistema terrestre de lanzamiento. El plan es dispararlo desde baterías formadas por cuatro lanzadores transportadores montados en remolques M870A4 modificados.

La carrera de las armas hipersónicas

El Ejército estadounidense lleva tiempo preocupado con quedarse atrás en esta nueva carrera con China. Lo que más les inquieta es una nueva arma hipersónica desarrollada por Pekín que según ellos “superó los límites de la física”. Los expertos militares norteamericanos aseguran que China no solo lanzó un vehículo hipersónico capaz de maniobrar a cinco veces la velocidad del sonido, sino que, además, este mismo vehículo lanzó a su vez un misil hipersónico en pleno vuelo. Esto es algo inaudito e inexplicable, afirman esas fuentes.

Ayer contamos aquí otro avance chino en este campo. Investigadores de la Universidad Politécnica del Noroeste en China afirman haber desarrollado un misil tierra-aire hipersónico capaz de eliminar aviones de combate enemigos a más de 2.000 kilómetros de distancia.

Los científicos aseguran que este misil está basado en la misma tecnología ‘inexplicable’ y que sería capaz de barrer del mapa incluso a los bombarderos invisibles B-21 Raider —alias Cerbero— gracias al sistema de seguimiento óptico de los satélites de alerta temprana de Pekín. El misil está diseñado para atacar activos aéreos de ‘alto valor’, como aviones de alerta temprana antes de que puedan avisar sobre un ataque chino y bombarderos como el B-1, B-2 y B-21, impidiéndoles ejecutar sus ataques de largo alcance.

El empeño de China y EEUU por armarse con misiles hipersónicos se explica por un posible escenario de conflicto a propósito de Taiwán, pero que también afectaría a todo el Mar del Sur de China. Estos misiles de gran alcance y extremadamente rápidos son supuestamente imparables, aunque los Ejércitos ya están trabajando en escudos capaces de detenerlos.