¿Qué mató a 350 elefantes en Botsuana? Los científicos lanzan las primeras hipótesis

Todo comenzaba el pasado mes de marzo cuando, de manera inexplicable, empezaron a aparecer cadáveres de elefante sin aparentes signos de violencia a lo largo y ancho de Botsuana. Las autoridades comenzaron a darse cuenta de que existía un problema cuando, en cuestión de pocos meses, el número total de paquidermos que habían fallecido sin causa aparente superaba los 350 animales. Ahora, los expertos creen tener una primera aproximación a qué ha ocurrido exactamente.

El elefante es, sin ningún género de dudas, uno de los grandes tesoros de Botsuana. No en vano, puede presumir de ser uno de los países del mundo con más paquidermos en su territorio, cuyo número se calcula que es algo más de un tercio del total que podemos encontrar en toda África. Sin embargo, ese mismo regalo de la naturaleza también les genera muchas complicaciones en forma de cazadores furtivos, aunque en este caso la naturaleza de la cuestión es bien diferente.

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Rubén Rodríguez

Durante varias décadas, las autoridades de Botsuana han tenido que luchar contra la caza furtiva dentro de su territorio. No en vano, es uno de los países que en mayor medida sufre este problema, pues no solo cuenta con una importante población de elefantes, sino que también el rinoceronte -especialmente el blanco- es muy cotizado en el mercado negro, por lo que la caza ilegal se ha convertido en un gran enemigo del país. Sin embargo, lo ocurrido en esta ocasión era bien diferente.

Dimakatso Ntshebe, coordinador general de vida silvestre de Botsuana, explicaba al comienzo de esta extraña pandemia de muertes a 'Reuters', que el problema desconcertaba a los expertos. El hecho de que todos los animales muertos aparecieran en perfecto estado, conservando todos sus órganos, extremidades, la piel e, incluso, el apreciado marfil, descartaba por completo la caza furtiva. Y los primeros análisis hacían lo propio con la segunda mayor causa de muerte de elefantes.

Además de la caza, uno de los motivos principales de muerte de los elefantes en la zona suele ser por ántrax. En ocasiones, la severa sequía a la que se ven expuestos estos animales les lleva a ingerir tierra mientras pastan, lo que provoca que su organismo quede expuesto a esta bacteria, provocando su muerte. Algunos consiguen salvar la vida con medicación, pero otros terminan falleciendo también a consecuencia de esos mismos fármacos. Pero, en este caso, el ántrax tampoco es responsable.

Sin embargo, estas más de 350 muertes sí pueden estar relacionadas directamente con la sequía. Según explicó a 'AFP' Cyril Taolo, jefe del Departamento de Vida Silvestre y Parques de Botsuana, muchos de estos elefantes aparecieron muertos en el Delta del Okavango, por lo que muchos de ellos podrían ir buscando agua con la que hidratarse, consumiento posiblemente agua estancada que podría contar con unas toxinas de fatales consecuencias para los animales.

"Basándonos en algunos de los resultados preliminares que hemos recibido, estamos considerando las toxinas naturales como la causa potencial. Hasta la fecha, no hemos establecido la conclusión sobre cuál es la causa de la mortalidad, pero todo apunta en esta dirección. Sabemos que algunas de estas bacterias pueden producir veneno de manera natural, especialmente en aguas estancadas, por lo que podría ser la respuesta que estamos esperando", asegura Taolo.

Tras varios meses de investigaciones y de análisis, las autoridades tratan de dar una solución definitiva a este extraño caso. Más de 350 elefantes han fallecido de manera repentina y, hasta la fecha, inexplicable, mientras que algunos científicos afirman que a otros animales de sus mismas manadas se les ha visto más debilitados de lo normal, presentando incluso problemas de orientación o dificultades para caminar. La respuesta a este misterio podría estar en el agua que han bebido.