Día Mundial del Agua: ¿Puede la sequía en España acabar limitando el consumo?

Corría el mes de febrero de 2017 y el Papa Francisco pronunciaba aquellas palabras en las que pedía que se otorgara al agua la centralidad que merece en las políticas públicas. "Y yo me pregunto si en medio de esta 'tercera guerra mundial a pedacitos' que estamos viviendo, no estamos en camino hacia la gran guerra mundial por el agua", decía el Sumo Pontífice desde el Vaticano. Actualmente, hay 1.200 millones de personas viviendo en zonas con estrés hídrico. Si bien siempre se tiende a pensar en países en vías de desarrollo, desde la Fundación Aquae recuerdan que "España no es ninguna excepción". "Ya se han publicado estudios que prevén que dentro de 15 años más de la mitad de los españoles vivirá en ciudades con estrés hídrico", apunta Mariola Urrea, presidenta del Consejo de Estrategia y Supervisión de la organización.

Tanto es así que se estima que en el año 2040 España ocupará el puesto 32 en la lista de países con mayor estrés hídrico del mundo. "No debe extrañarnos, si tenemos en cuenta que 2017 pasará a la historia como el año más seco desde 1965", añade Urrea. "La media de precipitaciones a nivel estatal fue un 27% inferior a la media del periodo 1981-2010 y en algunas cuencas el porcentaje llegó incluso hasta el 65%. Actualmente, sufren sequía hidrológica severa cuencas como la del Júcar, el Segura y el Duer, aunque esta última se está empezando a recuperar", añade.

La situación es tal que muchos han comenzado a pensar si es posible que llegue un momento en el que el consumo nos quede limitado, como tenía previsto ocurrir en Ciudad del Cabo, uno de los destinos turísticos más visitados de África, que había señalado en su calendario el 22 de abril como el día en que iban a comenzar a usar un máximo de 25 litros diarios por persona. Urrea considera "posible" aunque "poco probable" que en España ocurra lo mismo. Menos optimista es Rubén Ruiz, director de Suez España, quien ha explicado a El Confidencial cómo en España no somos conscientes de que el nivel de aporte de agua ya se está viendo afectado por el cambio climático. "La península ibérica sufrirá con más violencia las sequías", explica Ruiz.

¿La razón? Hemos creído que el agua era infinita. "No en todo el país hemos trabajado para gestionar el uso del agua", señala. En cuanto al uso urbano del agua sostiene que estamos "estabilizados", pero el problema surge en los usos agrícolas, donde hay necesidad de más aporte de agua. "Hay zonas que sí han hecho los deberes: en las zonas del Tajo y el Segura, que lleva sin trasvase cerca de diez meses y a pesar de que la capacidad hace unos meses ha estado en un 13%, no ha habido problemas de abastecimiento", explica. Por un lado, por el buen trabajo de las desaladoras, y por otro, por el buen trabajo a la hora de garantizar el uso urbano del agua. "A pesar de que son capaces de abastecer para usos urbanos sin restricciones en la zona de Alicante y Murcia, para la agricultura no ha sido tanto de este modo", apunta.

De hecho, agricultores y regantes del sureste español —de la 'Huerta de Europa'— se manifestaron en Madrid para denunciar la "dramática" situación que viven por falta de agua: repartiendo casi 30.000 kilos de fruta y hortalizas en el centro de la capital, buscaban sensibilizar a la población sobre el problema y hacer un llamamiento a la clase política para que dejen "la contaminación política del agua".

En otras zonas, no obstante, se ha obviado el problema del agua. "Seguimos con la imagen de que hay una España seca y una España húmeda que no tiene problemas de agua, pero sí los tiene". Algunas zonas de Galicia, de hecho, se han visto recientemente afectadas por la sequía: en diciembre, un informe de Aqualia, la empresa concesionaria del servicio, indicó el día 1 del mes que si seguía en aumento la concentración de ferruginosa, provocada por el bajo nivel de los embalses, en 18 días no se podría beber en la ciudad de Vigo.

"No nos creemos que el recurso tradicional del agua va en descenso", lamenta Ruiz. "Creemos que va a seguir lloviendo igual, y que los embalses van a seguir estando llenos. Consideramos que el agua sobra, y que no hace falta apostar por otras alternativas", señala. Sin embargo, este es uno de los errores que Ruiz ve que se están cometiendo de cara al futuro. "No podemos esperar a que haya una sequía dramática, para después cubrir los problemas con parches. Es necesario buscar alternativas, como la reutilización del agua: hay que darle una segunda vida al agua, para no tener tanta dependencia de los embalses", señala.

TE PUEDE INTERESAR

Contra la sequía: España invertirá 478 millones en reutilizar sus aguas residuales

Antonio Villarreal

Con la reciente presentación del borrador de la llamada Estrategia de Economía Circular 2030, presentada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, se han dado pasos hacia adelante, según Rubén Ruiz. De los 836 millones de euros de presupuesto destinados a la estrategia, un 57% irá destinado a la reutilización de aguas residuales con el objetivo de paliar los estragos que está produciendo la sequía. Con esta medida, apunta Ruiz, se podrían "utilizar grandes cantidades de agua a un coste totalmente viable y con una buena garantía de consumo".

El 'día cero' de Ciudad del Cabo

Ciudad del Cabo ha estado a punto de vivir su primer 'año cero en 2018. Se esperaba que fuera el 22 de abril. Hasta ahora, se estaba intentando que los habitantes de la ciudad sudafricana redujeran su consumo hasta los 87 litros por persona y día, pero desde el 1 de febrero entraron en el nivel 6b de restricciones, que ha reducido la cantidad recomendable hasta los 50 litros por persona y día. Por comparar, en España los últimos datos señalan que cada uno de nosotros gasta unos 132 litros de agua cada día.

A solo unos días de celebrar el Día Mundial del Agua, Ciudad de Cabo decidió retrasar el famoso 'día cero' hasta 2019, aún sin fecha definida. Si bien lo han retrasado, la urbe puede llegar, en caso de que se cumpla, a cerrar los grifos, por lo que sus más de cuatro millones de habitantes tendrán que hacer cola en 200 puntos de la ciudad para abastecerse de agua para beber.

La Asamblea General de las Naciones Unidas fue quien adoptó la jornada del 22 de marzo como fecha en homenaje al líquido elemento, firmando la resolución A/RES/47/193 el 22 de diciembre de 1993 de conformidad con las recomendaciones de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo. Más de 663 millones de personas viven en un entorno en el que no disponen de suministro de agua potable, por lo que pasan muchas horas esperando o caminando kilómetros para acceder a agua limpia, y se enfrentan a los problemas del consumo de agua contaminada.