La respuesta de China al neurochip de Elon Musk: así es su hoja de ruta tecnológica para 2025

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Hace unos días se hizo pública la noticia de que Neuralink, la empresa de Elon Musk, había implantado el primer chip cerebral en un humano, tras el visto bueno de la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA, en inglés). El objetivo de este implante será “leer” la actividad cerebral y transmitir órdenes para ayudar a restaurar funciones cerebrales perdidas tras casos de infarto o en pacientes con esclerosis lateral amiotrófica.

A raíz de esta noticia, el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información de China publicó su hoja de ruta tecnológica para los próximos años. Como indican en una nota de prensa, las “industrias del futuro, impulsadas por tecnologías de vanguardia, se encuentran actualmente en su infancia o en las primeras etapas de industrialización”, y su objetivo es establecer una estrategia para ser líderes en “progreso científico y tecnológico”.

Entre los objetivos tecnológicos de China está “fortalecer los equipos de alta gama en el futuro”, para hacer frente a las “necesidades estratégicas del país y de sus ciudadanos”. Entre los proyectos afines a esta meta están los robots humanoides, la computación cuántica, las pantallas holográficas, las interfaces cerebro-ordenador, los equipos de red 6G, centros de computación inteligente a ultra gran escala, la tercera generación de Internet, la mejora del equipamiento cultural y turístico de alta gama y la implementación de equipos de aviación avanzados y eficientes, entre otros recursos punteros.

Los chips cerebrales de China

Las interfaces cerebro-ordenador que China está desarrollando están incluidas en sus objetivos de 2025 y 2027. Esto incluye neurochips y modelos neuronales de computación cerebral. Estos chips, que se espera que sean seguros y fáciles de usar, estarán enfocados a “campos como la rehabilitación médica, la conducción sin conductor y la realidad virtual”.