Los anuncios llegan a Prime Video: minutos por hora y cuánto cuesta librarse de ellos

• Netflix ya ha comenzado a eliminar uno de sus planes de pago más populares
• Netflix, HBO, Disney... El 'streaming' ya no es lo que era y deberíamos haberlo visto venir

Prime Video era, hasta ahora, una plataforma de vídeo en streaming disponible sin coste adicional para todos los suscriptores de Amazon Prime. Sin embargo, va a dejar de serlo. Al menos, tal y como la conocemos hoy en día. Y es que la compañía fundada por Jeff Bezos ha empezado a ofrecer a sus usuarios en Estados Unidos la posibilidad de pagar tres dólares más a cambio de suprimir la publicidad en los contenidos. Si no abonan ese importe, tendrán que ver anuncios.

La primera vez que tuvimos constancia de esta decisión tomada por parte de los directivos de Amazon fue en septiembre de 2023. Asimismo, durante el mes de diciembre, la compañía empezó a enviar mensajes de correo electrónico a todos sus suscriptores informándoles de la medida, la cual se haría efectiva el lunes 29 de enero de 2024. Según el The Wall Street Journal, la carga publicitaria promedio oscilará entre los 2 minutos y los 3 minutos y medio y se emitirá tanto antes de empezar a reproducirse el contenido como a mitad de la proyección.

La introducción de anuncios en el plan básico de Prime Video ya es una realidad también en Reino Unido, Canadá y Alemania. Sin embargo, todavía no hay fecha confirmada para que llegue a España, si bien es cierto que lo previsible es que no tarde demasiado. En este sentido, la compañía afirma que la carga publicitaria será mucho menor que en los canales de televisión convencionales y en otras plataformas en streaming. Sin embargo, esto no quiere decir que no se incremente progresivamente con el paso del tiempo.

Según el portal 9to5Mac, se ha iniciado una ola de bajas en la suscripción a Prime Video que se está promocionando en redes sociales. ¿El objetivo? Revertir la decisión tomada por la compañía. Sin embargo, los expertos aseguran que la campaña está abocada al fracaso, ya que implica prescindir de todos los beneficios de la suscripción a Amazon Prime. Por tanto, resulta previsible que el impacto de la medida sea inferior al sufrido por Netflix cuando emprendió el mismo camino.