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Las llamadas perdidas entre las dos Coreas: ¿por qué Kim Jong-un no coge el teléfono?
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Sin comunicación en Corea del Norte

Las llamadas perdidas entre las dos Coreas: ¿por qué Kim Jong-un no coge el teléfono?

Tras una semana sin contestar a la llamada de seguridad de Seúl, Corea del Norte solamente se ha pronunciado con el lanzamiento de un misil balístico sobre el mar de Japón

Foto: Una foto difundida por la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA) muestra un misil balístico intercontinental (ICBM). (EFE/KCNA)
Una foto difundida por la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA) muestra un misil balístico intercontinental (ICBM). (EFE/KCNA)

La única línea telefónica que existe entre las dos naciones que separa el paralelo 38 no se ha descolgado en la última semana. Corea del Norte no ha respondido a las llamadas de su vecino del sur durante siete días. Esa llamada es el único protocolo de seguridad que existe entre las dos naciones. La única contestación por parte de Pyongyang ha sido el lanzamiento de un misil balístico sobre el mar de Japón, el cual se pensaba —por su trayectoria— que iba a impactar contra la isla de Hokkaido.

"Marionetas traidoras", se pronunciaba Corea del Norte. Los aliados de EEUU (Japón y Corea del Sur) son "Estados títeres", tachaba en referencia a las maniobras militares realizadas en la zona el régimen de Kim Jong-un. También apuntaban a que el despliegue militar era propio de "maníacos de guerra", recogía el diario independiente South China Morning Post. Bajo estas declaraciones, el Ministerio de Unificación de Corea del Sur ha estimado que la línea telefónica ha sido cortada deliberadamente: "Estamos sopesando la posibilidad de un corte unilateral", afirmó el portavoz surcoreano, Koo Byoung-sam, en una rueda de prensa. Agregó también que no se interrumpía la llamada entre las líneas militares intercoreanas por más de un día desde octubre de 2021.

Esta situación, encallada en medio de la tensión regional por el lanzamiento de un misil balístico que, aunque se pensaba que iba a estallar sobre Hokkaido, cayó fuera del territorio japonés tras horas de tensión, es un factor más en la escalada de la tensión entre Estados Unidos, Corea del Sur, Japón y Corea del Norte.

Los dos Estados, que técnicamente todavía están en guerra, no tienen otra manera de comunicarse, la importancia de esa línea telefónica establecida para evitar tensiones en la frontera, no podrá cumplir su propósito si Kim Jong-un no responde a la llamada. Entre las 9 am y las 5 pm (hora en Seúl), se volverá a marcar el número que conecta con el líder norcoreano: ¿responderá Kim?

Foto: El líder coreano Kim Jong-Un junto a su hija en el momento del lanzamiento. (Reuters)

Todo apunta a que —al cierre de esta edición— el Líder Supremo no ha descolgado el auricular. Pero ¿por qué Kim no contesta?

Cómo entender al hombre más ininteligible

Existen muchas razones detrás de la actuación de Kim Jong-un, muchos de esos factores tienen que ver con la amenaza que suponen para Pyongyang las relaciones entre Seúl y Washington. "Corea del Norte suele utilizar algunas de estas tácticas —desde incrementar lanzamientos de misiles a cortar las líneas de comunicación— como chantaje más que como amenaza de forma recurrente. Estamos viendo un punto de tensión continuado desde noviembre de 2022 con las continuas maniobras militares conjuntas entre Corea del Sur y Estados Unidos y el constante lanzamiento de misiles por parte de Corea del Norte como aparente respuesta a las provocaciones", explica a El Confidencial Inés Arco Escriche, investigadora del Cidob (Barcelona Centre for International Affairs), especializada en Asia Oriental.

Foto: Nuevos lanzacohetes múltiples presentados ante el pleno del partido obrero de Corea durante una ceremonia en Pyongyang. (Reuters)

Recientemente, enviados nucleares de Seúl, Tokio y Washington se reunieron para hablar "sobre las repetidas provocaciones del régimen norcoreano", mencionaba Efe. Y, también, "tuvo lugar en la región una maniobra militar naval de dos días entre Japón, EEUU y Corea del Sur en respuesta a la creciente agresividad de Pyongyang", comenta Escriche. Frente a estas "provocaciones", la investigadora recuerda que Kim "hablaba de llevar a cabo acciones contundentes". Lo cual se ha demostrado cierto, teniendo en cuenta los acontecimientos. "Las élites norcoreanas extraen parte de su legitimidad mostrando una respuesta dura contra Washington y Seúl, a quienes acusan de querer invadir el país", continúa explicando.

Por otra parte, desde el inicio de la pandemia, la situación económica en Pyongyang se ha vuelto complicada. "Corea del Norte ha estado en una situación bastante precaria y preocupante a nivel humanitario durante la pandemia, cuando las fronteras estuvieron cerradas, especialmente con China", expresa Escriche. Dentro del cerco que autoaísla a Kim, Pekín es su principal aliado económico y, dado que China no reabrió sus fronteras hasta que se levantó la política del covid-cero hace unos meses, los norcoreanos sufren una precariedad alimentaria generalizada.

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En cuanto a las razones, este mes se llevará a cabo una reunión entre el presidente Yoon Suk-yeol con su homólogo estadounidense, Joe Biden. "Aparentemente, también ha habido señales por parte de Pyongyang de reapertura diplomática tras la pandemia", cita basándonos en un artículo del Financial Times la experta. Esta vuelta a la diplomacia indica que Kim —favorable al bloque de Rusia en el desarrollo del conflicto con Ucrania— se mostrará más reacio y combativo con el bando contrario del frente.

Esta no ha sido la primera vez que ocurre un acontecimiento de esta envergadura, el mayor momento de tensión se produjo en 2020. "Pyongyang rompió la comunicación con Corea del Sur durante 13 meses, las razones fueron mayormente la poca cooperación económica por parte de Seúl y la persistencia de las estrictas sanciones estadounidense en un momento especialmente delicado de la pandemia", menciona la experta. Como respuesta, Corea del Norte voló una oficina de comunicación cercana a la frontera

Foto: Escenas de la explosión de la oficina de enlace, retransmitidas por la televisión surcoreana. (EFE)

"Estamos en un momento donde el Norte puede utilizar este tipo de chantajes para intentar conseguir algo a su favor, desde retomar algunas negociaciones hasta tratar de conseguir apoyo económico y humanitario", expone Escriche.

Un misil en el peor momento

Japón confirmó que el misil balístico —no identificado— lanzado durante la madrugada de ayer por Pyongyang, cayó fuera de su territorio y fuera de las aguas de su espacio económico exclusivo (EEZ). Sin embargo, la alarma antimisil mantuvo en vilo a toda la población y las autoridades de Hokkaido, pidieron a la población que tomara refugio, hasta que finalmente se corrigió el rumbo y desestimaron la alerta. Todavía se desconoce concretamente cuantos lanzamientos se han realizado por parte de Corea del Norte o qué clase de misiles eran, aunque las investigaciones más recientes apuntan a que se trataría de un misil balístico intercontinental (ICBM).

Foto: Vladímir Putin y Kim Jong-un, el 25 de abril de 2019. (Reuters/Pool/Alexander Zemlianichenko)

¿Por qué en este preciso momento lanzar un misil? "Algunos analistas de Corea del Norte han señalado que el lanzamiento del mísil es una práctica común después de las reuniones de la Comisión Militar Central. Suele haber una correlación entre lanzamientos de misiles de medio o largo alcance a los pocos días después de dichas reuniones. Hace dos días hubo una de estas reuniones, así que es un patrón que se está normalizando cada vez más", resume la investigadora del Cidob. "Abril es simbólico para Corea del Norte. En este mes se celebra el cumpleaños de Kim Il-sung, considerado el padre fundador del país; y la fundación del ejército nacional. Estas fechas suelen ser acompañadas de grandes despliegues militares y pueden llevar a mostrar nuevas adquisiciones militares", concluye Inés Arco Escriche

En todo este alboroto que rodea al mar de Japón (denominado mar del Este en las dos Coreas) seguirá habiendo un goteo de misiles y otras maniobras que Corea del Norte utiliza para tensar la cuerda que rodea la alianza de EEUU, Japón y Corea del Sur. Pero, "continuaremos monitoreando de cerca la situación y discutiremos nuevas medidas", sentenció el portavoz surcoreano Koo Byoung-sam.

La única línea telefónica que existe entre las dos naciones que separa el paralelo 38 no se ha descolgado en la última semana. Corea del Norte no ha respondido a las llamadas de su vecino del sur durante siete días. Esa llamada es el único protocolo de seguridad que existe entre las dos naciones. La única contestación por parte de Pyongyang ha sido el lanzamiento de un misil balístico sobre el mar de Japón, el cual se pensaba —por su trayectoria— que iba a impactar contra la isla de Hokkaido.

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