Meloni se estrena con una ley anti-'raves' que la oposición cree que limita el derecho a reunión
La medida fue aprobada de urgencia después de que durante el fin de semana miles de jóvenes italianos y de varios países de Europa participaran en una rave ilegal en una nave
El Gobierno de Italia, presidido por la ultraderechista Giorgia Meloni, contempla la posibilidad de que su decreto contra las fiestas rave, tachado de liberticida por la oposición, pueda ser modificado en su paso por el Parlamento.
El ministro de Justicia, Carlo Nordio, ha defendido en una nota que la medida "protege la seguridad jurídica y la salud pública" y ha subrayado que "ni incide ni podría incidir mínimamente en los sacrosantos derechos de libertad de expresión y de reunión".
"Su formulación compleja está sometida al parecer del Parlamento, que tiene la competencia para aprobarla o modificarla según su intención soberana", escribió Nordio, un exfiscal de la órbita de Meloni que persiguió durante años a los terroristas de las Brigadas Rojas.
El Gobierno italiano, que juró el pasado 22 de octubre, anunció el lunes un decreto que modificaba el Código Penal para sancionar "la invasión de terrenos o edificios por reuniones de más de 50 personas que sean peligrosas para el orden, seguridad y salud públicas".
La medida fue aprobada de urgencia después de que durante el fin de semana miles de jóvenes italianos y de varios países de Europa participaran en una rave ilegal en una nave en un terreno agrícola en Módena, centro-norte de Italia.
El delito, en esta primera versión del decreto, prevé una pena de entre tres y seis años de prisión y multa de entre 1.000 y 10.000 euros para quienes "organicen o promuevan" la reunión.
La oposición de centro e izquierda ha criticado duramente esta medida, pues temen que podría coartar otro tipo de reuniones, aunque tanto Meloni como su vicepresidente, el ultraderechista Matteo Salvini, se han dicho "orgullosos" de su aprobación.
No obstante, en las últimas horas varios integrantes del Ejecutivo están valorando la posibilidad de limarla o enmendarla durante su conversión en ley en el Parlamento, sobre todo la Forza Italia (FI) de Silvio Berlusconi, ala más moderada de la coalición derechista.
Por ejemplo, el viceministro de Justicia, Francesco Paolo Sisto, de FI, planteó hoy la posibilidad de intervenir en el Parlamento "para hacer más clara la tipificación del delito". "Una cosa es segura: esta no es ni será una norma liberticida", aseguró en el canal La7.
El Gobierno de Italia, presidido por la ultraderechista Giorgia Meloni, contempla la posibilidad de que su decreto contra las fiestas rave, tachado de liberticida por la oposición, pueda ser modificado en su paso por el Parlamento.