Se acabó el plazo para sacar a los civiles: la artillería castiga al ISIS en su último reducto
Las Fuerzas de Siria Democrática, de mayoría kurda, han reanudado los ataques para expulsar a los yihadistas de su último bastión, donde quedan 5.000 personas, incluyendo mujeres y niños
Las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza de milicias integrada mayoritariamente por kurdos, reanudaron hoy su asalto sobre el último reducto del grupo yihadista Estado Islámico (ISIS) en Siria y atacaron la localidad de Al Baguz. El portavoz de las FSD, Mustafa Bali, dijo a Efe que sus fuerzas comenzaron a atacar con artillería las posiciones de los extremistas, con el apoyo de los aviones de la coalición internacional liderada por Estados Unidos, que también bombardeó a los radicales. Bali agregó que en estos momentos se registran "violentos combates en tres frentes en torno a la zona que aún está bajo el control del ISIS, incluido el barrio de Sheij Hamad y el campamento" a las afueras de Al Baguz donde se refugiaron los combatientes y sus familias.
Un hombre herido que fue evacuado hoy al mediodía de ese campamento dijo a Efe allí quedaban unas 5.000 personas, incluidos niños y mujeres. Las FSD han dado por concluido el plazo para que tanto los civiles como los combatientes salieran de Al Baguz y se entregaran a las milicias antes del asalto final. La operación militar comenzó a las 18.00 hora local (16.00 GMT), anunció Bali a través de la red social Twitter. Poco antes, el portavoz dijo a Efe que "no existen unos plazos temporales para acabar con la misión" de las FSD, que están determinadas a poner fin a la presencia del ISIS al este del río Éufrates.
No es la primera vez que la alianza armada anuncia el asalto "final" contra el último reducto del ISIS, pero la presencia de un gran número de civiles ha ralentizado las operaciones militares y ha obligado a suspenderlas en varias ocasiones. El 9 de febrero, las FSD dieron comienzo a la "batalla final" para expulsar a los extremistas de su último enclave pero, pero después de un primer avance considerable, las minas plantadas en la zona y los contraataques del ISIS, así como la presencia de civiles, obstaculizaron la ofensiva. El propio presidente estadounidense, Donald Trump, dijo el pasado 15 de febrero que en las siguientes 24 horas realizaría un "gran anuncio" en relación con Siria y el "éxito" en la "erradicación" del califato físico del ISIS, un anuncio que se ha hecho esperar hasta ahora.
Sorpresa de última hora
Las FSD, que cuentan con el respaldo de la coalición internacional liderada por Estados Unidos, han sido cautelosas en todo momento a la hora de fijar plazos y de declarar su victoria, a pesar de que el ISIS sólo controla menos de un kilómetro cuadrado en Al Baguz. En varias ocasiones, las FSD han ofrecido más tiempo a los civiles para abandonar la zona y a los extremistas para entregarse, mientras han mantenido el cerco sobre la población para forzar su salida, obtenida también a través de negociaciones secretas.
En todo momento, las milicias kurdas han asegurado que no irrumpirían en Al Baguz y no atacarían mientras quedaran civiles en su interior, aunque al principio no previeron que hubiera tantas personas en la reducida área que aún controlan los yihadistas, cuyo número también se desconoce. De ella han salido decenas de miles de personas, sobre todo niños y mujeres, en las pasadas dos semanas, lo cual ha sorprendido también a las organizaciones humanitarias que están ofreciendo asistencia a los evacuados que son llevados al campamento de desplazados de Al Hol, unos 300 kilómetros al norte de Al Baguz. Mientras, los combatientes o sospechosos de pertenecer al ISIS son detenidos en centros de las FSD, y algunos de nacionalidad extranjera ya están siendo entregados a sus países de origen, en primer lugar, Irak.
En Al Baguz se encuentran los últimos combatientes del ISIS, que huyeron de Irak tras la derrota del grupo radical en diciembre de 2017, así como aquellos que han sido expulsados de los territorios que controlaban en el norte y el este de Siria. Ambos países constituían el "califato" que el EI proclamó a mediados de 2014, cuando dominaba extensas regiones y varias ciudades.
Las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza de milicias integrada mayoritariamente por kurdos, reanudaron hoy su asalto sobre el último reducto del grupo yihadista Estado Islámico (ISIS) en Siria y atacaron la localidad de Al Baguz. El portavoz de las FSD, Mustafa Bali, dijo a Efe que sus fuerzas comenzaron a atacar con artillería las posiciones de los extremistas, con el apoyo de los aviones de la coalición internacional liderada por Estados Unidos, que también bombardeó a los radicales. Bali agregó que en estos momentos se registran "violentos combates en tres frentes en torno a la zona que aún está bajo el control del ISIS, incluido el barrio de Sheij Hamad y el campamento" a las afueras de Al Baguz donde se refugiaron los combatientes y sus familias.