Cuatro países de la UE ignoran la postura común del bloque y viajan a Jerusalén

Estados Unidos ya tiene su nueva Embajada en Jerusalén. Con este paso, queda cerrado el proceso de reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel por parte de Washington y empieza una nueva etapa en la que el 'premier' israelí, Benjamin Netanyahu, busca que el resto de países sigan sus pasos. Algunos —como Paraguay o Guatemala— ya lo han hecho, pero en la Unión Europea, por el momento, nadie ha dado este paso. Lo cierto es que desde la UE existe una postura común hacia el conflicto palestino-israelí y, grosso modo, todos los países integrantes del bloque defienden la conocida como 'solución de los dos estados', un acuerdo negociado entre los Territorios Palestinos e Israel que les permita convivir de forma pacífica, y precisamente por esta razón han sido escasos los diplomáticos europeos que han viajado a Jerusalén para la inauguración de la misión diplomática del país norteamericano.

Israel ha invitado al acto de apertura de la Embajada a representantes de 83 países, de los que solo 33 confirmaron su asistencia. "Trasladad vuestras embajadas a Jerusalén, porque es lo correcto. Es un avance hacia la paz. (...) En cualquier acuerdo de paz Jerusalén seguirá siendo la capital de Israel", dijo el primer ministro israelí durante la recepción que celebró en el Ministerio de Asuntos Exteriores en la víspera de la inauguración de la sede diplomática estadounidense. No obstante, los palestinos tienene dos condiciones mínimas irrenunciables para establecer su propio estado: tener como capital Jerusalén Este y el regreso y restitución de los refugiados palestinos y sus descendientes al lugar donde vivían antes de 1948. Y la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini, insiste en que los países europeos no seguirán los pasos de Estados Unidos —y de Guatemala y Paraguay—. "Puede mantener sus aspiraciones para otros, porque del lado de la UE y sus países esto no sucederá".

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Sin embargo, en aquel reconocimiento de la UE que se repitió el pasado mes de diciembre en Bruselas ante el entonces inminente traslado de la Embajada estadounidense, algún país europeo ya presentó sus reticencias. Hungría, en ese momento, bloqueó un comunicado conjunto de la UE en nombre de los Veintiocho. El Gobierno checo, por su parte, insistió en que República Checa reconoce a Jerusalén en la práctica como capital de Israel y avanzó que no descartaba proceder al traslado de su misión diplomática, en función de los "resultados de negociaciones con socios clave en la región y en el mundo". Los dos países sí han decidido viajar a Jerusalén para celebrar la inauguración de la nueva sede, al igual que otras dos naciones europeas:

• Hungría: no solo bloqueó el comunicado conjunto criticando la decisión de Donald Trump de trasladar la Embajada. El 'premier' húngaro, el ultraderechista Viktor Orbán, aprovechó el Día en Conmemoración del Holocausto Húngaro (que se celebra el 16 de abril) para criticar la posición europea sobre migración, presentándose como el salvador de los valores cristianos en Europa. "Solo hay una manera para contrarrestar el creciente fenómeno antisemita... Europa tiene que volver a sus valores de las tradiciones judeocristianas", dijo entonces. "La intolerancia religiosa que amenaza Europa, consecuencia directa de la irresponsable política migratporia de Bruselas, se ha traducido en una violencia sin precedentes en la mitad occidental del continente", añadió.
• República Checa: el pasado mes, el Gobierno checo avanzó su intención de seguir a Trump y trasladar su Embajada a Israel, aunque días después retiró esta opción. Según una publicación israelí próxima a Netanyahu, fue fruto de la "presión recibida por la responsable de política exterior de la UE y algunos países clave", entre ellos Alemania y Francia, en un "intento por evitar el colapso de la política común que no reconoce a Jerusalén como capital de Israel". La siguiente opción fue hablar de un consulado en Jerusalén. "El año passado República Checa ya expresió su posición sobre Jerusalén como capital del estado de Israel, en virtud de sus fronteras de 1967. Es práctica habitual de los estados tener sus embajadas en la capital del estado que lo acoge. Por eso, hemos decidido como primer paso abrir un consulado honorario en mayo y un nuevo Centro Checo antes de que acabe el año, los dos en Jerusalén", señaló el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
• Rumanía: el Gobierno rumano también ha enviado a un representante a la fiesta de la inauguración de la Embajada estadounidense en Jerusalén. Rumanía también bloqueó el comunicado conjunto de la UE a propósito de la decisión de Trump, al considerarlo "desequilibrado". Éste fue el primer país de la UE que anunció su intención de trasladar su embajada a Jerusalén, en un claro movimiento hacia el reconocimiento público de esta ciudad como capital del estado hebreo. Sin embargo, el presidente, Klaus Iohannis, considera que esta decisión podría aislar al país dentro de la UE y vería afectadas sus relaciones con países árabes.
• Austria: "Hoy es un día para que celebren los israelíes de todo espectro político", aseguraba el embajador austriaco en Israel, Martin Weiss, en la víspera de la inauguración de la Embajada estadounidense. "Si le preguntas a cualquier israelí por la calle, sea de izquierdas o de derechas, cuál es la capital de Israel te mirarán raro", explicaba. Sin embargo, continuaba, "la UE y Austria tenemos posiciones diferentes. La Embajada de Austria está en Tel Aviv y seguiremos estando allí, pero eso no significa que cuando el primer ministro me invite a un acto (en Jerusalén) no vaya a venir.