Land Rover Defender, la evolución del todoterreno hacia las 5 estrellas EuroNCAP

EuroNCAP ha hecho públicos los resultados de sus últimas pruebas de choque realizadas a automóviles con un resultado espectacular en el que cinco vehículos nuevos han sido calificados con las cinco estrellas: Audi A3 Sportback, Seat León, Kia Sorento, Isuzu D-Max y Land Rover Defender. Tan solo dos de los 7 vehículos analizados en esta última tanda se han situado por debajo, el Honda e, un eléctrico urbano con 4 estrellas y el pequeño HyundaI i10 con solo 3 estrellas.

Esta es, sin duda, una demostración de que el sector del automóvil está haciendo un gran trabajo por la seguridad vial, porque no solo son coches del segmento premium los que obtienen 5 estrellas. Lograr que un todocamino grande, un todoterreno más extremo o hasta un pick-up logren la máxima puntuación supone un espectacular avance.

Las pruebas de choque que cada año realiza EuroNCAP, una organización independiente, demuestran que los coches son cada día mucho más seguros. Pero no solo en cómo afecta a los ocupantes en el caso de un choque, sino también en las medidas incluidas en los vehículos que permiten evitar dichos accidentes. Que un Audi A3 Sportback o un Seat León, que comparten su plataforma con la última generación del Golf, hayan obtenido las cinco estrellas digamos que es lo más lógico. Son vehículos con mucha tecnología y que gracias a su plataforma MQB Evo representan una nueva generación de vehículos eficientes y muy seguros.

Donde esta seguridad se hace mucho más notable es en los otros modelos calificados con las cinco estrellas en el último estudio. Por un lado el Kia Sorento, un todocamino grande y muy bien equipado, que en muchos aspectos se puede integrar en el segmento premium y que por seguridad también ha dado un gran paso adelante.

Pero sobre todo se aprecia la gran mejoría en un modelo como el Land Rover Defender, un todoterreno de referencia en el mercado desde hace muchos años y que lo sigue siendo con esta nueva generación. Con este éxito de las cinco estrellas logradas demuestra que, además de ser imparable en el campo, también es un modelo muy seguro en todo tipo de situaciones.

Desde luego, no tiene nada que ver este modelo con la anterior generación del Defender, un vehículo muy duro, pensado para los trabajos de acceso difícil y que contaba con un pesado chasis de largueros y travesaños de acero que le hacía muy robusto. Pero esto unido a que prácticamente no tenía ningún tipo de ayudas a la conducción, más allá del control de descenso, hacía que fuera un modelo bastante peligroso en carretera.

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Con el nuevo, todo eso ha quedado atrás, ofrece todos los sistemas de ayuda a la conducción posibles, mantenimiento de carril, frenada de emergencia, cámara 360 grados, identificación de señales de tráfico y hasta algunas opciones de conducción autónoma de nivel dos. Pero sobre todo es un coche basado en una estructura mucho más ligera y capaz de absorber mucha energía ante un posible choque.

También destacable que un modelo como el Isuzu D-Max, un vehículo pick-up más robusto y con tracción 4x4 haya conseguido este "premio" de las cinco estrellas, igualmente por su arsenal de medidas de ayuda a la conducción.

Inversión

No hay que olvidar que cada año el sector del automóvil invierte, solo en Europa, más de 60.000 millones de euros en I+D. Ese dinero se emplea para desarrollar mecánicas cada vez más eficientes y menos contaminantes, pero también para hacer que los coches sean mucho más seguros. Comparar un Defender nuevo con uno de la anterior generación es muy complicado porque la diferencia es abismal.

En otros modelos se nota menos y es más evolución que un cambio tan radical, pero no cabe duda que es una evolución constante. El único objetivo es que los coches sean mucho más seguros y que, poco a poco, cada vez dependa menos del conductor y más de los sistemas autónomos del vehículo el poder garantizar esa seguridad máxima.