Así es la pionera tecnología de los coches Volvo para avisarse entre ellos de los peligros

Todos los modelos de Volvo incorporarán de serie a partir de 2020 la tecnología de seguridad conectada que permite a los vehículos de la marca sueca comunicarse entre sí. Esta tecnología también está abierta a otros fabricantes de automóviles y otras marcas, siempre que cumplan los estándares de intercomunicación. La Serie 90 la incorporó en 2016.

Este sistema, que ya funciona en los vehículos Volvo vendidos en los mercados sueco y noruego, alerta a los conductores de la presencia de firmes deslizantes y de otros peligros en la carretera a través de una red basada en la nube. Los sistemas de alerta de luces de emergencia y de alerta de firme deslizante llevan funcionando en los modelos de la Serie 90 en Suecia y Noruega desde el año 2016. Y desde 2018 también en el resto de vehículos de la gama Volvo, incluidos los de la división de camiones que se matricularon ese año 2018 en estos dos países nórdicos.

Desde ahora, esta tecnología se ofrece de serie para toda la gama europea y no solo para los modelos nuevos sino que también se puede introducir en algunos automóviles ya matriculados. La tecnología de seguridad conectada avisa a los conductores de otros vehículos sobre los peligros que se van a encontrar más adelante en la carretera. Esto les da la posibilidad de adecuar el modo de conducción y la velocidad a las circunstancias reales para evitar accidentes.

Con la incorporación de estas innovaciones en todos los modelos que se venden en Europa, Volvo también reitera su invitación al sector automovilístico a compartir datos, pero sin referencias a las personas, que estén relacionados con la seguridad del tráfico. Esta tecnología será mucho más eficaz según vaya creciendo el número de vehículos conectados y capaces de enviar información sobre problemas reales detectados en la carretera.

Firme deslizante

Los sistemas de alerta de luces de emergencia y de alerta de firme deslizante funcionan automáticamente sin que el conductor intervenga. Cuando en un vehículo de Volvo se encienden las luces de emergencia, el sistema envía de forma automática una señal a todos los modelos de la marca que se encuentren en los alrededores y que estén conectados con este servicio de la situación, que puede crear algún peligro. De esta manera se avisa a los conductores del riesgo, lo que resulta muy útil en curvas sin visibilidad o en los cambios de rasante, por ejemplo.

Por su parte, la alerta de firme deslizante informa a los conductores de otros vehículos que llegan sobre las condiciones que van a encontrar en la calzada en los siguientes kilómetros. Este sistema recoge de forma anónima la información de los vehículos que le preceden y avisa si hay alguna zona deslizante o peligrosa.

Estas nuevas tecnologías se unen a los esfuerzos de la marca sueca por mejorar la seguridad del tráfico. Hace solo unas semanas, Volvo anunciaba que a partir de 2020 todos sus modelos tendrán limitada de serie la velocidad máxima a 180 km/h. Al mismo tiempo, el fabricante nórdico va a instalar varias cámaras en el interior de sus vehículos para detectar si el conductor está distraído, cansado o si conduce bajo los efectos del alcohol o las drogas. Si se dan cualquiera de estas circunstancias, el propio sistema puede intervenir para evitar accidentes y llegar a detener el vehículo de manera segura.

De la misma forma que Toyota ha hecho de uso público varios miles de patentes relacionadas con el coche híbrido y eléctrico, para que la evolución hacia el coche electrificado sea lo más rápida posible, Volvo también ha anunciado que está facilitando el acceso a sus conocimientos sobre seguridad vial a través de una biblioteca digital e invita al sector automovilístico a utilizarla para hacer de la carretera un lugar más seguro para todos.