Jeep Compass, un SUV con genes de un todoterreno de verdad (a diferencia de otros)

Esta es la segunda generación del Jeep Compass, un vehículo que salió para convertirse, allá por el año 2007, en el primer vehículo de tipo todocamino de una marca especialista en hacer coches todoterreno de verdad como Jeep. Pero si aquella primera generación estaba poco pensada para rodar fuera del asfalto, y era más de ciudad, esta segunda generación es totalmente distinta. Tiene un toque mucho más campero que el de su antecesor, pero sin llegar al de un Jeep Cherokee o a un Wrangler, uno de los todoterreno más legendarios. El concepto de vehículo todocamino es muy etéreo y permite ponérselo tanto a un vehículo un poco más alto pero pensado para la ciudad como a un coche mucho más campero, que es el caso de este Compass.

Este modelo está pensado para circular muy cómodamente por carretera, para hacerlo con bastante eficiencia en el caso de esta versión con el motor diésel de 140 caballos, pero al mismo tiempo también permite muchas posibilidades camperas. Sobre todo en el caso de una versión que ofrece tracción a las cuatro ruedas como el coche de nuestra prueba. Quizás eso es lo más destacable, que se enfoca hacia un tipo de cliente que no solo busca un coche de carretera con el aspecto de un todocamino a la moda, sino que de verdad quiere rodar por pistas forestales.

Su conducción es muy agradable, porque además de un motor bastante potente, y sobre todo muy elástico, cuenta con una caja de cambios automática de nueve marchas que permite una perfecta dualidad, ser utilizada para conseguir consumos ajustados rodando en marchas muy largas, pero al mismo tiempo también permite la opción de hacer una conducción más deportiva con el modo Sport. Pueden ver más detalles de este modelo en el vídeo que acompaña esta información.

El sistema 4x4 permite, en el caso de esta versión que hemos probado con el sistema de tracción Active Drive, elegir entre diferentes terrenos por los que circular. El modo automático es con el que circularemos en todo momento y con el que el vehículo determina cómo debe gestionar la tracción en cada momento. También tenemos un programa de arena, otro de barro para zonas mucho más deslizantes y una posición para nieve y hielo. Además, permite bloquear la tracción a las cuatro ruedas para poder superar alguna zona más complicada.

Y para los que necesiten aún más, es decir, un coche más campero, existe una opción, que es el sistema de tracción Active Drive Low. No es que ofrezca un sistema de caja 'transfer' con marchas reductoras, porque para eso hay otros modelos de Jeep más adaptados a la conducción campera. Lo que sí tiene es un cambio con una primera muy corta que permite salir de situaciones muy apuradas.

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Un precio de lista de 35.300 euros sin descuentos en el caso de esta versión, que incluye un potente motor diésel, un cambio automático de nueve marchas y la tracción 4x4, es bastante razonable. Un coche que está enfocado a personas que busquen de verdad un vehículo con posibilidades camperas. De lo contrario, hay muchos coches normales, de dimensiones similares pero que no tienen en sus genes este carácter 'off road'. El precio de partida del modelo Compass es de 28.000 euros.

Ficha técnica

Motor: cuatro cilindros en línea.

Potencia máxima: 140 CV a 3.750 rpm.

Par máximo: 350 Nm a 1.750rpm.

Cilindrada: 1.956 cc.

Combustible: gasóleo.

Velocidad máxima: 190 km/h.

Aceleración de cero a 100 km/h, 10,5 segundos.

Tracción: 4x4.

Consumos homologados (urbano/ extraurbano/ mixto): 6,1/ 4,7/ 5,2 litros.

Dimensiones (longitud/anchura/altura): 4,40 x 1,81 x 1,65

Capacidad maletero: desde 435 litros.

Peso en vacío: 1.570 kg.

Precio: desde 35.300 euros.