Mitsubishi vuelve a los beneficios gracias a la Alianza Renault Nissan

La alianza Renault Nissan, que desde finales de 2015 incluye también a la marca japonesa Mitsubishi, sigue mejorando sus perspectivas y según los datos facilitados por el grupo franco japonés ya se podría posicionar al cierre del primer semestre como el primer fabricante mundial de vehículos superando al grupo Volkswagen.

Uno de los puntos clave para conseguir esta primera posición, sin duda, es la fortaleza de la marca Nissan a nivel internacional, con su amplia gama de modelos todocamino, el tipo de vehículo más demandado en estos momentos. Además, cuenta con el Leaf, el coche eléctrico más vendido en el mundo, que supone un importante avance tecnológico frente a sus rivales más directos.

Por su parte la marca Renault también cuenta con una amplia gama de vehículos todocamino, con el Captur, el Kadjar y el Koleos, a lo que se suma la renovación de sus modelos más importantes en el último año, las dos variantes del monovolumen Scenic y su buque insignia, el Talisman. También el Renault Zoe, un vehículo 100% eléctrico para el que se ha homologado una autonomía de hasta 400 kilómetros. Y todo ello completado por una completa oferta de vehículos comerciales

Aunque sin duda la clave para que la Alianza Renault Nissan pueda convertirse este mismo año en líder mundial del automóvil es la reciente integración de la marca Mitsubishi en el consorcio. Ese millón de unidades adicional que ha sumado a las ventas de Renault y Nissan le han permitido dar el gran salto. Todo ello unido a la buena progresión de las tres marcas del grupo.

Las sinergias

Mitsubishi también se ha visto muy favorecida tras su integración en la alianza. De hecho, al cierre del primer trimestre de su ejercicio fiscal 2017 ha logrado un beneficio neto de 22.969 millones de yenes, unos 178 millones de euros. Una cifra que contrasta con las pérdidas anunciadas en el mismo periodo del año anterior, que fueron de 129.724 millones de yenes (1.005 millones de euros), según los datos facilitados por la empresa.

Mitsubishi ha visto como sus ventas han crecido en los principales mercados internacionales. También han jugado a favor de sus buenos resultados la aplicación de las sinergias del grupo franco japonés que ya han comenzado a dar sus primeros frutos pero que irán creciendo con la llegada de nuevos modelos, que ya emplearán plataformas y motorizaciones del grupo.

Entre abril y junio, Mitsubishi alcanzó una cifra de negocio de 3.417 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 2,8%, mientras que su beneficio operativo fue de 20.619 millones de yenes (159 millones de euros). Es decir, que las cifras del primer trimestre fiscal de 2017 suponen multiplicar por 4,4 los resultados del mismo trimestre de 2016. En cuanto a las ventas de coches, crecieron en el trimestre un 9% hasta totalizar 241.000 unidades.