Las acciones chinas se han desplomado y son una ganga, sí, pero no las compre

Las acciones de empresas como Alibaba están muy rebajadas en comparación con sus homólogas estadounidenses. Pero "acciones" podría ser la palabra equivocada para describirlas. Criptomonedas, tal vez. Las ganancias dependen de una fantasía económica que cada vez es más difícil de comprar.

Hace dos años, el gigante del comercio electrónico Alibaba Group (BABA) crecía más rápido que Amazon.com (AMZN), con mejores beneficios, y con la mitad de valor en bolsa. Se avecinaba una disputa por los aranceles con Estados Unidos, pero ¿qué buena acción de valor no viene con algún pero?

Desde entonces, los certificados de depósito estadounidenses de Alibaba se han desplomado un 80%. Eso incluye una caída del 12% el lunes, en medio de un descenso más amplio de las acciones chinas que cotizan en EEUU. Un fondo que rastrea dichas acciones, Invesco Golden Dragon China ETF (PGJ), perdió un 14%.

Las perspectivas comerciales no han influido en la última venta. El lunes, China anunció que su economía creció a un ritmo del 3,9% interanual durante el tercer trimestre, por debajo de su objetivo, pero por encima de las expectativas de Wall Street.

TE PUEDE INTERESAR

¿Está China a las puertas de una crisis financiera e inmobiliaria?

EC Brands

Lo que más preocupa a los inversores estadounidenses es que Xi Jinping, que rompió con la tradición el pasado fin de semana al conseguir un tercer mandato de cinco años al frente del Partido Comunista, haya llenado los altos puestos del gobierno chino con políticos leales. Es una señal de que China seguirá persiguiendo objetivos sociales a expensas de las reformas del mercado y los beneficios.

La liquidación del lunes es indicadora de que los inversores "despertaron ante el riesgo de autocracia", según sostiene Perth Tolle, creador del índice detrás del ETF Freedom 100 Emerging Markets (FRDM), que utiliza la puntuación de la libertad económica en su selección de valores. Los ETF de mercados emergentes que ponderan las empresas sólo por su valor de mercado pueden tener una ponderación cercana al 50% en China, Hong Kong y Taiwán.

Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han ido mucho más allá de los aranceles. Los semiconductores son tan vitales como el petróleo para las economías modernas, y la última prohibición de exportación de Estados Unidos sobre las máquinas de fabricación de chips podría perjudicar al sector tecnológico chino.

Mientras tanto, el lunes, en un caso que involucra a un doble agente que trabaja para Estados Unidos, el Departamento de Justicia acusó a Pekín de soborno para obtener ventajas competitivas.

TE PUEDE INTERESAR

El Nasdaq chino acoge el nuevo mandato de Xi Jinping con el mayor desplome de su historia

J. T. G.

Alibaba ha bajado a sólo el 15% del valor bursátil de Amazon. Sus proyecciones de ganancias no han seguido el ritmo de las de Amazon, en parte porque carece de la presencia masiva de Amazon en la computación en nube. Y la economía china se tambalea. Pero las acciones se cotizan a apenas ocho veces los beneficios, lo que sugiere que los grandes desafíos están descontados.

El problema es que se supone que las acciones representan la propiedad compartida de las empresas, y vienen con derecho a voto a la hora de tomar decisiones. Hay empresas buenas que restringen el derecho de voto a unos pocos mediante acciones con supervoto y otras estrategias similares. Pero los certificados de depósito chinos no representan en absoluto la propiedad de las empresas subyacentes. Son acciones de empresas en el extranjero que tienen contratos con empresas en China, lo que permitió a esas empresas obtener dinero de los inversores estadounidenses sin violar las normas de China contra la propiedad extranjera.

En efecto, que esos certificados de depósito suban o bajen de aquí en adelante -o que tengan algún valor a largo plazo- está en manos de un hombre que últimamente muestra poca preocupación por las turbulencias que pueda causar en los mercados. Esto no significa que los certificados no tengan valor. Pero los inversores deben pensar en ellos como participaciones que pueden ganar mucho o perderlo todo, por razones que pueden estar totalmente desvinculadas de los flujos de caja u otras realidades económicas.

En otras palabras, se parecen más a las criptomonedas que a las acciones, y el tener precios más bajos no significa necesariamente que sean mejores ofertas.

*Contenido con licencia de “Barron’s”