Es noticia
¿Cómo afecta el aumento de precios del gas natural a la inflación?
  1. Mercados
  2. The Wall Street Journal
aumentará la inflación a largo plazo

¿Cómo afecta el aumento de precios del gas natural a la inflación?

La triplicación de los precios mayoristas de referencia del gas en Europa ha sido más drástica que su impacto en los precios al consumo, pero es probable que el vínculo se acabe estrechando

Foto: EC.
EC.
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

La disparatada subida de los precios del gas está teniendo un impacto sorprendentemente débil en la inflación de la región. Sin embargo, en otro año los efectos podrían ser más drásticos.

Los precios mayoristas del gas europeos en mercados al contado casi se han triplicado este año, pero el precio medio del gas de los consumidores minoristas solo ha aumentado un 9%, según UBS. Anna Titareva, economista del banco, calcula que el impacto en la inflación de la región es de 0,4 puntos porcentuales. En comparación, un aumento más moderado del 50% en los precios del petróleo añadió 0,6 puntos porcentuales a la inflación.

UBS espera que la inflación de la eurozona se sitúe en el 2,4% este año, superando el objetivo del Banco Central Europeo de "por debajo de, pero cercana al 2%". La energía es responsable del mayor porcentaje de la inflación, incluidos los efectos tanto de los aumentos de precio actuales como de los precios extremadamente bajos del año pasado. Al igual que sus homólogos en la Reserva Federal de EEUU, las autoridades del BCE han señalado los factores "transitorios" detrás de la inflación actual, pero eso no ha impedido que el mercado mantuviera sus perspectivas de aumentos de tipos en las últimas semanas.

Foto: gas-natural-crisis-energetica-batalla-mundial

La presión sobre los banqueros centrales de Europa podría ser mucho mayor —y puede que lo sea en el futuro—. Las facturas del gas y la luz representan un gran porcentaje de los índices de precios al consumo: un 9,5% en la eurozona y un 6% en Reino Unido. Por ahora, los consumidores están aislados en gran medida de los giros del mercado del gas, pero la situación no parece completamente sostenible.

Los gobiernos de Europa utilizan la regulación y controles de precios para proteger a los hogares de grandes subidas en sus gastos de energía. En muchos países se establecen tarifas estándar para el gas y la luz y se ajustan periódicamente. En respuesta a la última crisis, algunos gobiernos también han introducido límites de precios, recortado impuestos energéticos y ofrecido ayuda a hogares de ingresos bajos o pequeñas empresas.

Los políticos temen que una subida en las facturas pueda hacerles perder votantes o debilitar el apoyo público a la transición energética. Una propuesta para aumentar el impuesto al combustible en Francia en 2018 desencadenó protestas públicas de gran repercusión mediática y un retroceso humillante para el presidente Emmanuel Macron.

Foto: Foto: Reuters. Opinión
TE PUEDE INTERESAR
La crisis del gas: el invierno del descontento
Nemesio Fernández-Cuesta

Pero proteger a los consumidores tiene consecuencias incómodas. Los límites de precios han afectado a los proveedores de servicios públicos: los valores de servicios públicos llevan situándose por debajo del punto de referencia europeo desde febrero, y un puñado de proveedores minoristas ha quebrado en Reino Unido, incluidos dos nuevos este miércoles. Otras medidas de ayuda en tiempos de crisis incluyen que los gobiernos carguen con el riesgo, lo que aumenta la carga poscovid sobre las finanzas públicas.

También hay cambios estructurales que reforzarán el vínculo entre los precios del gas natural y la inflación con el tiempo. Muchas empresas aseguran su suministro con contratos a largo plazo, pero un número creciente no lo hace. Pasar de contratos a largo plazo utilizando precios vinculados al petróleo a comprar más gas en mercados al contado aumentará el efecto del gas sobre la inflación y reducirá el impacto sobre la misma del petróleo. Es probable que unos precios del gas más elevados también se traduzcan en nuevos contratos a largo plazo.

Otro factor a considerar: el gas empezará a ser una parte más importante de la combinación energética de Europa a medida que la región se descarboniza, sustituyendo al carbón y siendo utilizado para llenar los vacíos en la generación de energía renovable. El riesgo actual varía según el país: Gran Bretaña se encuentra en el pico agudo de la crisis actual, en parte porque genera cerca de un tercio de su energía a partir del gas, en comparación con una cuarta parte en Alemania y un 15% en Francia, que tradicionalmente dependía más de las centrales nucleares que sus vecinos.

La próxima vez que los precios del gas se disparen en Europa, los inversores pueden esperar una mayor preocupación por la inflación.

*Contenido con licencia de 'The Wall Street Journal'.

La disparatada subida de los precios del gas está teniendo un impacto sorprendentemente débil en la inflación de la región. Sin embargo, en otro año los efectos podrían ser más drásticos.

Inflación Gas natural Eurozona