‘Quo Vadis' Schaüble?

El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schaüble, se desmarcó con una declaración que desde luego ha escocido y mucho: “La situación de la zona euro es claramente mejor que hace tres años”, asegurando que los datos económicos apuntan a una buena evolución.

El problema del señor Schaüble es que peca de megalomanía (o eso me parece a mí) y confunde a la zona euro con Alemania. Si la zona euro es Alemania le doy la razón, pero si la zona euro incluye a todos los demás (Francia entre ellos), me temo que no está del todo bien informado.

A veces soy un poco simplista y creo que la mejor forma de ver si una economía va bien, no está tanto en las cifras macro que presentan los informes y que tradicionalmente se manipulan, porque a fin de cuentas el papel lo soporta casi todo, y si no, me remito -por poner un ejemplo- a las auditorías de Pescanova de estos últimos años como alarde de ciencia ficción.

Yo, por comodidad, voy a trabajar en transporte público y de un tiempo a esta parte veo cada vez a más gente pidiendo. Al principio, era algo anecdótico, luego más habitual y siempre extranjeros, pero ahora españoles de rancio abolengo que se supone que tienen más posibilidades por cuestiones familiares de no llegar a ese punto.

Cuando ves las escalofriantes cifras de paro, que el señor Schaüble al igual que nuestro gobierno omite, resulta descorazonador el termino “claramente mejor”, pues la cifra de paro es “claramente peor” que hace tres años, y lo peor es que durante este año va a ser aún más “claramente peor”.

Alemania se ha aprovechado de la crisis para salir más fortalecido que el resto. Una parte importante de su competitividad viene porque falta en el resto de países, pero no porque seamos más inútiles (que también puede ser), sino porque ellos se financian infinitamente más barato que el resto y se resisten a que esa situación cambie por el bien de su economía.

Que ellos están pagando el rescate de los demás es cierto, pero esa sensación de gratuidad y de inmenso sacrificio alemán es falsa. Me gustaría ver a Telefónica financiándose al 1,25% y a Deutsche Telekom al 5%, y al señor Alierta diciendo que Europa va mejor y que el problema de Deutsche Telekom se soluciona despidiendo personal y siendo más productivos bajando sueldos.

Francia se ha revelado, ha dejado de apretarse el cinturón, un poco por ser de izquierdas el actual presidente (que no lo dude nadie) y un poco por orgullo francés (esto tampoco hay que dudarlo), pero un mucho porque ven que esa política no va a ninguna parte. Subir impuestos y destruir empleo al mismo tiempo no genera riqueza, sino pobreza, y así se pierden elecciones.

EEUU tomó el camino contrario y hasta que el paro no llegue al 6,5% no van a parar de estimular la economía, y lo están consiguiendo sin inflación (eso que tanto miedo da a Alemania). Puede que a largo plazo la factura sea cara de pagar, pero lo que sí que tengo claro es que los parados no pagan facturas por pequeñas que sean.

No le quito razón a Merkel. Hemos vivido por encima de nuestras posibilidades y hay que dejar de hacerlo, pero el camino elegido no conduce a ninguna parte y no solo es perverso en las formas, sino en el fondo. Es injusto e insolidario y puede producir revueltas sociales, y resulta complicado hacer un país más productivo con un ambiente tan enrarecido (de atraer inversiones ni hablamos).

A la vuelta de verano hay elecciones en Alemania. Si pierde Merkel y gana la izquierda, ¿seguirán las cosas igual? Algo me dice que no.