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Qué es la COP, qué es el Acuerdo de París y por qué esta edición importa
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La cumbre más importante

Qué es la COP, qué es el Acuerdo de París y por qué esta edición importa

Hoy, tanto las naciones del planeta como grupos medioambientalistas, comunidades indígenas y científicos se dan cita en Glasgow para poner remedio (una vez más) a la crisis más importante de la humanidad

Foto: Activistas con manifestaciones de cara a la COP26. (Reuters)
Activistas con manifestaciones de cara a la COP26. (Reuters)

Arranca en Glasgow la COP26, la cumbre del clima de Naciones Unidas en la que los líderes políticos de casi 200 países revisarán sus estrategias para frenar el problema global del cambio climático. Se trata de un acontecimiento clave que se ha celebrado casi anualmente desde 1992 con la intención de que los Estados cooperen para frenar el calentamiento global antes de que sea demasiado tarde.

Si no se actúa a tiempo, advierten los especialistas del clima, algunos efectos del aumento de temperaturas medias pueden desencadenar consecuencias incontrolables. Es el caso, por ejemplo, del derretimiento del permafrost del Ártico, que al liberar el carbono atrapado en el hielo durante miles de años contribuiría a la concentración de gases de efecto invernadero (GEI) en la atmósfera y aceleraría aún más el deshielo.

Ni India ni Turquía han actualizado sus 'contribuciones determinadas a nivel nacional'

Así, la comunidad internacional se reúne cada año (con algunas excepciones, como en 2020, por la pandemia) para revisar objetivos y hojas de ruta con los que contener el calentamiento global, causado por la actividad humana principalmente a través del uso de los combustibles fósiles.

La COP26, que preside y acoge Reino Unido, tendrá entre sus prioridades definir el modelo de financiación de los esfuerzos de mitigación y adaptación climática —por un lado, detener la crisis y, por otro, adaptarse a ella—, así como quién se hará cargo de asegurar que las promesas de los mandatarios se convierten en acciones y qué mecanismos contabilizarán esos esfuerzos.

placeholder La activista ambiental sueca Greta Thunberg en una manifestación en la City de Londres, Gran Bretaña, el viernes. (EFE)
La activista ambiental sueca Greta Thunberg en una manifestación en la City de Londres, Gran Bretaña, el viernes. (EFE)

Glasgow podrá ser crucial también para cerrar algunos puntos pendientes del Acuerdo de París sobre los que no hubo consenso en la última cumbre del clima, en Madrid. Es el caso del artículo 6 del texto, que regula los mercados de carbono y la gobernanza de estos, y del artículo 4, sobre el aumento de la ambición y la transparencia de su comunicación.

Qué es el Acuerdo de París

El Acuerdo de París, ratificado por 192 estados, se aprobó en 2015 en la cumbre del clima de Naciones Unidas celebrada en la capital francesa. El texto viene a sustituir al Protocolo de Kioto, que se aprobó en 1997 en la ciudad homónima de Japón y que estuvo vigente hasta el año 2020.

Un nuevo informe de la ONU expone que los objetivos actuales no son suficientes y la temperatura del planeta aumentará 2.7 ºC

Mediante este nuevo acuerdo, los países signatarios se comprometieron a contener el calentamiento medio de la Tierra bajo el límite de 1,5 o 2 °C en 2100, el umbral propuesto por la comunidad científica para sortear los peores efectos de la crisis climática: desplazamientos forzosos de millones de personas, pérdida masiva de biodiversidad, fenómenos meteorológicos extremos de mayor impacto y frecuencia, subida del nivel del mar… Consecuencias que ponen en riesgo la calidad de vida (o la propia vida) de los humanos y otros seres vivos.

¿Qué países están más rezagados?

Si el Acuerdo de París fija un objetivo, la COP26 de Glasgow servirá para examinar las estrategias que cada país ha esbozado para llegar a esa meta. Este año, cada uno de esos 192 estados debían actualizar sus planes para lograr la reducción drástica de emisiones de GEI que se espera de ellos. Se suele referir a estos planes con el término "contribuciones determinadas a nivel nacional" o "NDC", por sus siglas en inglés. No todos han hecho sus deberes. Ni India ni Turquía, por ejemplo, han actualizado sus NDC. Y algunos países que sí lo han hecho —como Brasil, México, Australia, Indonesia o Corea del Sur— no han incrementado la ambición respecto a los anteriores planes presentados.

placeholder Los objetivos actuales nos ponen en peligro de alcanzar los 2.7 °C. (Reuters)
Los objetivos actuales nos ponen en peligro de alcanzar los 2.7 °C. (Reuters)

En todo caso, no hay demasiada esperanza sobre lo que se podrá conseguir con los NDC que hay sobre la mesa, sobre todo después de que un informe reciente del programa de Medio Ambiente de la ONU analizara todos los compromisos actuales de reducción de emisiones de los países que ratificaron el Acuerdo de París —ya sean nuevos, actualizados o antiguos— y calculó que, incluso aunque estos se cumplieran, el planeta se calentará 2,7 °C en 2100 respecto a los niveles preindustriales, muy por encima del objetivo del grado y medio.

El club de los mayores emisores

China, con el 27% del pastel de la responsabilidad climática actual (el mayor responsable histórico es EEUU), se comprometió el año pasado a alcanzar su pico de emisiones antes de 2030 y a lograr el "cero neto" en 2060. Esta semana, Pekín presentó el plan con el que el país espera cumplir esa promesa. Por ejemplo, incrementando el porcentaje no fósil de su generación eléctrica hasta que, a mediados de siglo, el 85% del sector energético sea renovable.

placeholder Emisión de metano captada por una cámara infrarroja en Italia. (Reuters)
Emisión de metano captada por una cámara infrarroja en Italia. (Reuters)

De Estados Unidos, que ha vuelto a la cooperación climática con su regreso al Acuerdo de París este año, se espera un intento por recuperar la credibilidad respecto a su papel en la lucha contra el calentamiento global. Joe Biden podría salir victorioso si consigue aprobar un paquete de medidas climáticas al que prevé destinar hasta 555.000 millones de dólares, algo que de momento no cuenta con el apoyo de los senadores más conservadores de su propio partido. Washington anunció en abril su compromiso de recortar las emisiones de GEI a la mitad para 2030 (respecto a los niveles de 2005), y de ser climáticamente neutros en 2050.

La Unión Europea también aspira a ser climáticamente neutra en 2050, pero tiene una meta de reducción de emisiones más ambiciosa que EEUU: un recorte del 55% para 2030 respecto a los niveles de 1990. El Parlamento Europeo aprobó en una sesión plenaria reciente una resolución con la que pedía la creación de un "club internacional del clima", compuesto por los mayores emisores, para "establecer normas comunes y aumentar la ambición en todo el mundo" a través, por ejemplo, de un mecanismo común de ajuste en la frontera, que impondría un precio de carbono para determinados productos importados en la UE.

Qué esperar de Glasgow

Una COP es una suerte de feria del clima dividida en dos zonas: una reservada para las delegaciones de países y las salas donde tienen lugar las negociaciones internacionales, y otra, para la sociedad civil: organizaciones ambientalistas, representantes de comunidades indígenas, instituciones científicas y empresas. En las negociaciones, se esperan acuerdos en torno a la lucha contra la deforestación, a cómo recortar las emisiones de metano (un potente gas de efecto invernadero) un 30% para 2030, y también para impulsar la movilidad eléctrica y las energías renovables.

Foto: Celebración del quinto aniversario de la COP21 que tuvo lugar en París en  2015. Foto: EFE

Pero el tema que protagonizará esta cumbre es, sin duda, la financiación. Los países desarrollados —y responsables de hasta el 75% del calentamiento global— se comprometieron hace más de una década a destinar 100.000 millones de dólares cada año para ayudar a los países en desarrollo a afrontar la crisis climática, a la que estos apenas han contribuido. Sin embargo, este fondo verde solo ha recaudado una media por año de entre los 60.000 y los 70.000 millones. En 2019, antes de la pandemia, llegaron a juntar 79.600 millones de dólares, más de 20.0000 por debajo de lo prometido. El balance de 2020 todavía no se conoce, pero se espera que se quede corto, según los análisis de la OCDE, que calcula que la meta de los 100.000 millones no se alcanzará hasta 2023.

Arranca en Glasgow la COP26, la cumbre del clima de Naciones Unidas en la que los líderes políticos de casi 200 países revisarán sus estrategias para frenar el problema global del cambio climático. Se trata de un acontecimiento clave que se ha celebrado casi anualmente desde 1992 con la intención de que los Estados cooperen para frenar el calentamiento global antes de que sea demasiado tarde.

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