La sequía arrecia y los pantanos se secan: esto es lo que nos espera a la vuelta de vacaciones

A los responsables de la planificación y gestión del agua del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) no les salen los números. Por un lado, agosto es el mes en el que se produce una mayor demanda de agua potable debido principalmente al incremento de la actividad turística, y, por otro, las altas temperaturas que se están registrando van a acrecentar los niveles de evaporación del agua embalsada. En cambio, los pantanos se encuentran ahora en el segundo nivel más bajo desde 1995, tan solo por detrás del registrado el año pasado.

TE PUEDE INTERESAR

"Estamos en la era de la ebullición": la advertencia de la ONU ante el julio más caluroso de la historia

Jorge García González

Según el último boletín hidrológico del Miteco, las reservas de agua embalsada a nivel nacional han descendido un 1,25% en la última semana, quedándose al 42% de su capacidad, muy lejos del 58% al que deberían estar según la media de la década. Un dato solo ligeramente mejor al del 40% que marcaban el año pasado por estas mismas fechas. Recordemos que 2022 fue declarado por el propio ministerio como uno de los años más secos de la historia.

La situación es especialmente delicada en la cuenca del Guadalquivir, donde sufren la sequía más larga e intensa desde 1970. Los niveles de agua embalsada están a punto de caer por debajo del 20% de su capacidad (21,1%), marcando uno de los niveles más bajos de su historia. En Córdoba, la provincia más afectada por las restricciones de suministro, el año pasado (considerado muy seco) los pantanos estaban por estas mismas fechas al 23,4% de su capacidad. Esta semana están al 16,2%. Según la media histórica deberían estar al 51,3%.

En una situación similar se encuentran los embalses de la cuenca mediterránea andaluza, que están al 29,6% de su capacidad cuando, según la media, deberían estar al 54,2%. Mientras tanto, los de las cuencas internas de Cataluña siguen en situación de lenta agonía y esta semana han caído al 27% de su volumen, muy lejos del 77% que marca la media. Debido a esta grave situación, la Generalitat acaba de declarar la situación de emergencia en la provincia de Girona, prohibiendo el riego agrícola y de jardines o limitando el consumo doméstico a 200 litros por persona y día, entre otras restricciones. Un escenario que podría extenderse a los municipios del Área Metropolitana de Barcelona (más de cinco millones de habitantes) este otoño.

Más allá de una borrasca inusual

Los embalses del Guadiana también están esta semana al 27%, quedándose casi a la mitad de lo que sería normal para estas fechas (53%). En el Segura están al 31%, cuando la media de los últimos 10 años marca un 42%. Aunque quizás el dato más sorprendente es el bajo nivel en el que se encuentran los pantanos de la cuenca del Ebro, una de las más caudalosas del país, que están al 47% cuando deberían estar al 68%. Incluso el año pasado estaban mejor que este (54%).

TE PUEDE INTERESAR

Esto no es otra sequía, sino lo que nos espera a partir de ahora (y haríamos bien en adaptarnos)

Jose Luis Gallego

Mientras tanto, la previsión para este mes de agosto presentada por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) no es favorable. Según sus informes, más allá del puntual descenso de los termómetros previsto para estos días por el paso de la inusual borrasca Patricia, se esperan temperaturas más cálidas y pocas lluvias en general. Una tendencia que se alinea con lo que está sucediendo en toda Europa y que, en el caso de nuestro país, se mantendría a lo largo de todo el mes para extenderse más allá, dando paso a un nuevo veroño de temperaturas inusualmente altas. Respecto a la previsión de lluvias para las próximas semanas y meses, existe un 50% de probabilidades de que sean más abundantes, aunque no de forma generalizada, incluso hay un 20% de posibilidades de que este otoño sea más seco en algunos territorios.

Dicho de otro modo, es posible que a la vuelta de vacaciones nos hallemos con las temperaturas en lo alto, los embalses bajo mínimos y sin la provisión de lluvias necesaria. Por todo ello, seguir promoviendo el aprovechamiento del agua regenerada procedente de depuradora, incrementar las aportaciones de las desalinizadoras (alimentadas por fuentes renovables) y, sobre todo, hacer un uso eficiente del agua aprovechando todas las oportunidades de ahorro son las consignas a seguir por todos para garantizarnos el acceso al agua potable y evitar un otoño de restricciones.