El plan tras el cierre de la central de carbón de Andorra: arranca la construcción de 14 plantas renovables

Cuando una central térmica de carbón cierra, una ventana de nuevas oportunidades basadas en la energía verde se abre. Eso es lo que quiere demostrar Endesa en Andorra (Teruel), el pueblo vertebrado en torno a la central de carbón clausurada en 2019 y que ahora da paso al primer plan de futuro adjudicado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Tras el inicio del desmantelamiento de la antigua central, que aún continúa, la compañía ha comenzado la implantación de la nueva industria que estará repartida a lo largo de una decena de pueblos de Teruel, cercanos a Andorra. Con una inversión de 1.540 millones de euros, instalará 14 plantas renovables híbridas, siete de ellas solares con 1.200 MWp y otras siete eólicas con 695 MW. A ello se suman dos plantas de almacenamiento con baterías de 80 MW, un electrolizador de hidrógeno verde de 15 MW, un compensador síncrono y un centro de fabricación de electrolizadores.

La innovación de este proyecto es su característica principal. Tal y como explica Rafael González, director general de Generación de Endesa, “optimizaremos al máximo el aprovechamiento de energía, por eso produciremos más de la capacidad de evacuación a la red. Lo haremos instalando una potencia de 1.800 MW, mientras que evacuaremos un total de 1.200 MW. La acumulación de la energía eólica y fotovoltaica puede ser complementaria porque de manera simultánea, en realidad, en algunas horas del día no trabajan al máximo”.

Es previsible que haya un excedente de energía, pero se almacenará en baterías que darán flexibilidad a su evacuación. Aun así, es posible que siga sobrando, pero tampoco se perderá. “Toda la energía que no podamos integrar en la red directamente o mediante las baterías, será utilizada para producir hidrógeno verde”, relata González.

Así, a las nuevas plantas renovables que se ubicarán en Albalate del Arzobispo, Hijar, Samper de Calanda, Castelnou, Andorra, Calanda, Alcañiz, La Puebla de Hijar, Jatiel y Alcorisa se suma la instalación de un electrolizador de 15 MW de potencia para gestionar estos excedentes y fomentar la generación de hidrógeno verde, lo que tendrá un efecto descarbonizador en las industrias del entorno, tal y como apunta González. También se construirá una fábrica de electrolizadores y un compensador síncrono.

La agrovoltaica estará presente en los parques de Calanda, Santa María y San Macario, en los que se podrán cultivar cereales y plantas aromáticas

Todas las instalaciones tendrán una hibridación adicional al estar abiertas al sector primario. Los pastores de la zona, por ejemplo, trabajarán con sus ovejas en el desbroce natural del terreno. La agrovoltaica también estará presente en los parques de Calanda, Santa María y San Macario, en los que se podrá llevar a cabo el cultivo del cereal y plantas aromáticas. Asimismo, en unos meses también estarán preparados los apiarios solares con apicultores de la zona para la producción de miel solar gracias a las 200 colmenas que se instalarán en diferentes plantas.

Un plan que atiende a todos los sectores

Estas instalaciones serán construidas por Enel Green Power España, filial renovable de Endesa, acompañadas de un plan socioeconómico que generará más de 6.300 empleos en total, de los que más de 370 serán fijos y estarán ligados al proyecto renovable, según la compañía. En concreto, prevén que en 2028 haya 500 personas con un empleo estable y duradero en el entorno de la comarca, no solo relacionados con la producción de energía renovable, sino también con las iniciativas de todo tipo que 30 entidades asociadas fijarán en el territorio.

Se han llevado a cabo acuerdos con diferentes entidades locales. Por ejemplo, la iniciativa Apadrina un Olivo prevé la recuperación de 50.000 olivos abandonados en las cuencas mineras de la zona. “Este proyecto generará empleo permanente con diferente grado de temporalidad a un centenar de personas cualificadas y reactivará un sector que estaba en declive en la zona”, concretan desde Endesa. Otra de las entidades que forman parte es Atadi, una asociación que trabaja con personas con discapacidad en la provincia de Teruel y que desarrollará el proyecto Olivar y viverismo inclusivo. La empresa Natur Nature, por su parte, será la encargada de cultivar plantas aromáticas en 18 hectáreas de terreno.

El desarrollo industrial y su íntima relación con el sector secundario es otro de los grandes aspectos del plan socioeconómico. Aquí es donde se engloban empresas como Pretersa, H2B y Soltec. Raúl Morales, CEO de esta última, explica que abrirá una fábrica de seguidores solares: “Suministraremos nuestros productos a las plantas fotovoltaicas de la zona, pero también al resto del país. Esperamos que en dos o tres años aumente la demanda de estas plantas y, por tanto, nuestro producto”. Cuando estén en funcionamiento, calculan crear 40 puestos de trabajo.

Pretersa es otro ejemplo. En su caso, generará 80 puestos de trabajo tras el acuerdo suscrito para la ampliación de la industria de prefabricados de hormigón ubicada en La Puebla de Hijar. Asimismo, el plan recoge la construcción de un centro de segunda vida de las turbinas eólicas que creará más de 30 empleos fijos, así como un centro de economía circular de reciclaje y búsqueda de nuevos usos para elementos y equipos de parques renovables que lleguen al fin de su vida útil, lo que generará 15 empleos.

En relación con el sector terciario, el comercio local y el turismo serán los protagonistas. Así pues, ampliarán el Balneario de Ariño, lo que permitirá crear 27 nuevos puestos de trabajo permanentes, tal y como comenta María Malaxechevarría, directora general de Sostenibilidad de Endesa. La apicultura será otro de los sectores que recibirán un impulso, y un hotel y una casa rural serán los encargados de fomentar el turismo sostenible en la región. Entre otras iniciativas, se suma el Centro de Investigación y Divulgación de Avifauna, que será construido por Endesa para investigar y estudiar las especies del entorno.

La ambición que acompaña a todos estos proyectos pasa por un gran programa de reciclaje para los trabajadores que contará con más de 300.000 horas de formación, aseguró Malaxechevarría. En un primer bloque, se abordarán las energías renovables, entre los que se cuentan cursos de montadores de paneles solares y de operación y mantenimiento de las instalaciones renovables. El segundo bloque está centrado en las actividades del sector primario, que se llevará a cabo con entidades de referencia, también de la zona. Serán más de 30 módulos formativos que transitan desde la agricultura ecológica hasta la apicultura, pasando por el e-commerce y el carné digital.