La guerra en la patronal del comercio vizcaína salta a Madrid con una demanda por 500.000 €

La guerra declarada por la Confederación Empresarial de Comercio de Bizkaia (Cecobi) contra su ex secretario general, Julián Ruiz, amenaza con dar el salto a Madrid. Según confirman fuentes de Cecobi, su junta directiva, encabezada por su presidente, Pedro Campo, ultima una demanda por medio millón de euros contra Ruiz, actual secretario general de la Confederación Española de Comercio (CEC). Le acusan, durante su etapa al frente de la gestión de la patronal del comercio vizcaína, de adoptar decisiones a espaldas de la cúpula de la asociación, tales como subirse el sueldo a él y a otros en plantilla; suscribir determinados contratos de colaboración con terceros poco justificados y en perjuicio de la entidad, e, incluso, imputar a Cecobi gastos personales, como viajes o estancias en hoteles, que han creado un grave perjuicio económico a la organización.

Los 500.000 euros reclamados provienen, explican desde la organización empresarial vizcaína, de cuantos y cualesquiera gastos en que haya podido incurrir Julián Ruiz durante su etapa como secretario general y que no hayan sido debidamente justificados ante la junta directiva —siempre que la acción no se encuentre prescrita—. El despacho que está preparando la demanda es JRY Legal, encabezado por el letrado Jorge Romero Yurrebaso, abogado de Cecobi desde 2021. Este bufete ya pilotó con éxito la defensa de la organización empresarial tras la demanda por despido interpuesta por Ruiz tras su cese en julio de 2022. Un pleito que fue ganado en primera instancia por el ex secretario general, pero que, finalmente, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) del País Vasco ha resuelto a favor de la patronal. La sentencia, dictada el pasado 30 de mayo, determinó que el despido disciplinario era procedente, por lo que no le correspondía a Ruiz indemnización alguna por el fin de su contrato de alto directivo.

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En la carta de cese, fechada el 29 de julio de 2021, Cecobi atribuía a su ex secretario general "abuso de confianza, enriquecimiento injusto, negativa a facilitar documentación requerida por la junta directiva relativa a su remuneración, así como una quiebra de la buena fe contractual" por, entre otras acciones, dejación de funciones; haberse negado a facilitar documentos requeridos por la cúpula de Cecobi; incremento unilateral de su salario sin la aprobación de los órganos de gobierno, y falsedad documental. Unos hechos que el TSJ considera acreditados. "De la comprobación de las nóminas existen cobros y conceptos que y aparentan falta de justificación (...), todo ello, en un contexto de información sesgada que se compagina con aparentes decisiones de incremento unilateral", aseveraba el fallo, que, además, calificaba de "inaceptable" que Ruiz se hubiera negado a rendir cuentas o proporcionar información sobre su gestión ante la junta directiva.

La fotografía con Garamendi

En la actualidad, un equipo de peritos, economistas y auditores analizan las finanzas y la contabilidad de Cecobi para detectar los presuntos agujeros que atribuyen a Julián Ruiz. En paralelo a las acciones legales, sus órganos directivos han iniciado una campaña para lograr su cese como secretario general de la CEC. Al margen de exigir su destitución al presidente de la patronal española del comercio, Rafael Torres, quien ha rechazado adoptar ninguna medida contra su secretario general y le ha mostrado su total confianza, la organización de Vizcaya ha remitido una comunicación formal a Antonio Garamendi, presidente de la CEOE —y de origen vizcaíno—, instándole a que ejerza algún tipo de presión contra Ruiz. Sin embargo, desde CEOE recuerdan que las organizaciones que componen la confederación empresarial son autónomas y que su máximo responsable poco tiene que decir en cómo se gestiona cada una de ellas.

En Cecobi, sin embargo, apelan a la autoridad moral que sobre las organizaciones empresariales tiene Garamendi y subrayan el "profundo malestar" que en su seno ha creado la fotografía publicada el pasado 22 de mayo, en la que figuraban el presidente de la CEOE y Julián Ruiz, ya en plena batalla judicial. "Las fotos tienen un significado", indican a este diario fuentes cercanas a la junta directiva vizcaína. La misiva expresando su irritación a Garamendi fue remitida antes de verano.

La victoria en vía laboral ha cargado de razones a Cecobi contra Julián Ruiz quien, sin embargo, ofrece una versión muy distinta de los hechos. El actual secretario general de la CEC asegura a El Confidencial estar siendo destinatario de una "campaña de hostigamiento" por parte del equipo de Pedro Campo, quien fuera, además de máximo responsable de Cecobi, presidente de la Confederación Española de Comercio hasta julio de 2021. De hecho, la designación de Ruiz como secretario general de la CEC se produjo a iniciativa de la confederación de comercio vizcaína y del propio Campo, combinando ambos cargos durante un tiempo.

La salida de Campo como presidente de la CEC, explica Julián Ruiz, se produjo tras recibir una citación judicial para declarar por apropiación indebida por su gestión al frente de la organización nacional. Un requerimiento, siempre según su versión, que se produjo tras la investigación abierta por la UDEF tras la denuncia recibida contra él. "Pedro Campo me atribuye a mí el ser el autor de la denuncia ante la UDEF que da pie a la citación judicial, lo cual es falso, pero desde ese momento inicia una campaña contra mí", indica Julián Ruiz. Es por ello que hasta 2021 su actuación en Cecobi nunca había sido cuestionada, asevera Ruiz, fecha a partir de la cual empezó a acusársele de unas irregularidades que él niega. Su relación contractual con la patronal vizcaína de comercio se remontaba al año 2006.

Julián Ruiz asegura estar siendo objeto de una persecución por parte de Pedro Campo, quien está siendo investigado por la UDEF

De hecho, según su actual secretario general, la CEC inició una "rigurosa" investigación interna a raíz de la citación recibida por Pedro Campo. Las pesquisas concluyeron con la solicitud de dimisión a Campo y con la petición por parte de la confederación de personarse en el procedimiento judicial como entidad perjudicada. La investigación, asegura Ruiz, sigue en marcha. "Sorprende que siga como presidente de Cecobi con estos antecedentes", concluye el secretario general de la CEC, quien, en relación con su despido, asegura que ya está recurrido ante el Tribunal Supremo. "Se me despidió sin que se me diera opción a defenderme ante los órganos internos de la confederación vizcaína", concluye Julián Ruiz, que recuerda que Cecobi interpuso una querella contra él por apropiación indebida y administración desleal que fue sobreseída en mayo de 2022.

"Se trata de un sobreseimiento provisional; es decir, susceptible de reapertura", rebate Jorge Romero, abogado de Cecobi, que niega que exista ninguna investigación abierta contra el presidente Pedro Campo por parte de la UDEF. "Es falso. No obstante, no hay que desviar el foco, aquí lo que está en cuestión es la gestión de Julián Ruiz como secretario general de Cecobi". En este sentido, Romero recuerda que las acciones iniciadas por la confederación vizcaína no las ha impulsado su presidente, sino la junta directiva, por el voto unánime de todos sus integrantes. En relación con nuevas actuaciones judiciales, Romero asegura que, una vez obtenida una sentencia que califica de "histórica" en la vía laboral, interpondrán en las próximas semanas la demanda civil —en la que reclaman medio millón de euros— y no descartan retomar la acción penal si acumulan las pruebas suficientes contra Ruiz.