Eugenio Ribón toma posesión como decano del ICAM: "Queremos dignificar la profesión"

Eugenio Ribón ha tomado posesión como nuevo decano del Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM). El nuevo líder de la institución madrileña ha jurado su cargo junto con el resto de los integrantes de su Junta de Gobierno en un acto celebrado este jueves en el Paraninfo de la Universidad Complutense de Madrid. Durante su discurso, Ribón ha reivindicado el papel de la abogacía dentro del Estado de Derecho y ha puesto el foco en el turno de oficio y las condiciones a las que están sometidos sus profesionales. "Su abandono desprestigia a quienes nos gobiernan", ha aseverado.

"Esta Junta de Gobierno no solo está llamada a gestionar con eficacia nuestra noble corporación, sino a reivindicar y defender el Estado de Derecho y la dignidad de la propia abogacía. Y desde el diálogo, la empatía, la tolerancia, pero también desde la firmeza más absoluta ante derechos irrenunciables, cumpliremos esa misión para la que hemos recibido la confianza de los compañeros que integran el mayor colegio profesional de Europa", ha manifestado el nuevo decano.

Asimismo, Ribón ha manifestado su agradecimiento a la anterior Junta de Gobierno del ICAM, presente durante el acto de toma de posesión. De hecho, José María Alonso ha sido el encargado de colocar la insignia al nuevo decano, tras manifestar su confianza en el equipo entrante y la satisfacción por haber cumplido los objetivos que se propuso para su mandato. "Me voy con un sentimiento de tranquilidad porque quienes hoy nos suceden, encabezados por Eugenio, son personas que comparten los mismos principios que hemos venido defendiendo durante estos últimos cinco años. Estoy convencido de que pondrán a la institución y a los 76.000 compañeros que integran el Colegio por encima de cualquier otra consideración", ha señalado.

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Junto a Ribón han tomado posesión de sus cargos Isabel Winkels Arce (vicedecana), José Ramón Couso (diputado 2ª), Ana Buitrago (diputada 3ª), Francisco Javier Mata (diputado 4º), Mabel Klimt (diputada 5ª), Teresa Mínguez (diputada 6ª), Ester Mocholi (diputada 7ª), Roberta Poza (diputada 8ª), Juan Manuel Mayllo (diputado 9º), Gabriel Rodríguez (diputado 10º), José Ignacio Monedero (secretario), Emilio José Ramírez (bibliotecario) y María Dolores Fernández Campillo (tesorera).

Tras la jura, Ribón ha dirigido sus primeras palabras a los integrantes del turno de oficio y ha anunciado que seguirá formando parte del servicio como lleva haciendo los últimos 25 años. "Vuestro decano seguirá a vuestro lado, seguiremos trabajando las 24 horas de los 365 días del año por la excelencia de la mejor asistencia jurídica gratuita del mundo. Pero también exigiremos mayor dignidad a nuestro trabajo", ha matizado.

Una mejora de las condiciones que no solo pasan por elevar la retribución que perciben los letrados del turno—como así viene reivindicando la abogacía institucional desde hace años—, sino también incluye facilitar a los abogados el acceso a los centros de detención, reservar plazas de aparcamiento cerca de las instalaciones o disponer de un espacio adecuado para las entrevistas con el detenido, entre otras medidas.

Por otra parte, el nuevo líder del ICAM ha emplazado a los poderes públicos a solucionar uno de los mayores problemas que afectan a la abogacía de oficio: la designación, sin retribución alguna, de profesionales para la defensa de personas jurídicas en las que no está reconocida la justicia gratuita, dando lugar a largos procesos que ponen en riesgo la sostenibilidad de sus despachos y el sostenimiento de sus familias. "Eso no va a suceder bajo esta Junta. La Abogacía de Madrid va a ser absolutamente leal con las Instituciones, como siempre ha sido, pero va a exigir con firmeza esa justa reciprocidad, asumiendo hasta las últimas consecuencias su reconocimiento", ha insistido.

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Durante su discurso, Ribón también ha mencionado la necesidad de reconocer el derecho a la conciliación de los profesionales para equipararlos al resto de los operadores jurídicos. "Es urgente articular un mecanismo que permita la conciliación del profesional que ejerce en tribunales o defiende los intereses ajenos ante la Administración. El ICAM amparará decididamente a cuantos compañeros se enfrenten a estas calamitosas circunstancias", ha recalcado.

Por último, el decano ha expresado la intención de involucrarse desde el ICAM en la realidad jurídica. "La abogacía no solo es un colaborador de la administración de justicia, sino que es un actor necesario. El Colegio no puede ser un mero espectador, menos aún en tiempos en los que se han cuestionado nuestras instituciones. Debemos participar del diálogo social porque la abogacía tiene el compromiso de mantener el imperio de la ley", ha concluido.