Los escombros del carmenismo: ruptura entre los tres ediles del Grupo Mixto en Cibeles

Escisión tras escisión, pelea tras pelea, el legado político de Manuela Carmena en la capital ha quedado reducido a la nada. El último núcleo de afines a la exalcaldesa, agrupados en Cibeles en el Grupo Mixto bajo las siglas de Recupera Madrid, ha roto definitivamente tras la salida de Marta Higueras. Aunque el grupo municipal se mantiene y en teoría tendrá los mismos tres concejales hasta las elecciones de mayo, la que fuera mano derecha de la exjuez ha confirmado que en la práctica actuará de forma autónoma a sus dos compañeros, José Manuel Calvo y Luis Cueto, y completamente ajena a cualquier unidad de acción. "No estoy de acuerdo con sus planes electorales, no hay espacio para una nueva candidatura que solo dividirá más a la izquierda", explica Higueras a El Confidencial sobre su marcha.

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EP

El grupo que se convirtió en decisivo para el Gobierno de José Luis Martínez-Almeida y Begoña Villacís, con su apoyo a los presupuestos de 2022 y la ordenanza de Movilidad, ha perdido toda su fuerza. La exvicealcaldesa se ha desvinculado de Recupera por su negativa a participar en las pretensiones de Calvo y Cueto, que han impulsado una candidatura para los comicios de mayo de 2023. "Están confundiendo la actividad en el Ayuntamiento con la actividad de Recupera. El portavoz [Calvo] representa ahora esa estrategia y no me voy a sumar", declara Higueras, que asegura "respetar" la decisión de sus compañeros. En el otro frente reconocen que es un paso más hacia la desintegración del carmenismo, pero restan importancia a lo ocurrido. "No cambia nada, no deja de ser algo simbólico", señalan. Higueras ya lo anunció a finales de julio, pero se ha hecho oficial en el inicio del curso político.

El grupo seguirá inalterable sobre el papel. Si bien Higueras podría pasar a la bancada de los no adscritos, no lo hará. Tampoco variará el funcionamiento en las comisiones y la portavocía, que ostenta Calvo. De facto, en cambio, nada será igual hasta que se agote la legislatura. Si hasta este curso funcionaban como un bloque, como un partido más en el Ayuntamiento, ahora será muy distinto. Aunque desde Recupera Madrid aseguran que siempre ha sido así y que cada concejal gozaba de autonomía para votar en consecuencia, lo cierto es que en la práctica han pasado de cuatro ediles a dos desde su constitución. El nombre oficial era el Grupo Mixto, pero la actividad política era pilotada por Recupera. Así, si Almeida y Villacís volvieran a negociar con ellos, no sería suficiente.

"No estoy de acuerdo con sus planes electorales, no hay espacio para una nueva candidatura que solo dividirá más a la izquierda", justifica

La capacidad de influencia de Recupera Madrid ya estaba cogida con pinzas desde el pasado mes de diciembre, cuando el también carmenista Felipe Llamas dimitió por rechazar la estrategia que había tomado el grupo. No estaba conforme con salvar las cuentas del equipo de Gobierno. Los tres ediles bastaban para alcanzar la mayoría en Cibeles, pero con dos ya es imposible. En este último año tendría que darse el caso de que Higueras llegase a un pacto por un lado y Calvo y Cueto, todavía en Recupera, lo hicieran por otro. Algo improbable, especialmente porque las estrategias políticas de cara a las elecciones marcarán los posicionamientos en los próximos meses. La salvación para que Almeida adapte sus cuentas a la situación económica actual será Vox, que el año pasado declaró la guerra al alcalde.

Perdidos en la oposición

El carmenismo se ha evaporado sin haber acabado siquiera la primera legislatura tras su único mandato. La líder y referencia se marchó tras su derrota ante la derecha y desde entonces su equipo de Gobierno se ha perdido en la oposición y las clásicas disputas internas de la izquierda. Primero fue la guerra en Más Madrid, el partido que la propia Carmena creó junto a Íñigo Errejón para los comicios de 2019. Después, la dimisión de uno de los ediles cercanos a ella. Y ahora, la división del Grupo Mixto.

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Hace ahora tres años, Ahora Madrid, el embrión de Más Madrid, encaraba el año electoral convencido de que su gestión desde 2015 iba a ser suficiente para revalidar su victoria en el Ayuntamiento de la capital. Concurrió sobrado de moral sin los ediles díscolos que trufaron de polémicas el mandato de Carmena, como una versión mejorada de la primera marca municipal de Podemos. Pero la unión del PP (con el peor resultado de su historia) con Ciudadanos y el apoyo externo de Vox en 2019 bastó para sacar a la izquierda del Palacio de Cibeles. Como si del cuento de la lechera se tratara, todos sus planes se truncaron y comenzó una sucesión de batallas internas.

Marta Higueras, José Manuel Calvo, Luis Cueto y Felipe Llamas, considerados como el sector más afín a Manuela Carmena, rompieron con Más Madrid en marzo de 2021 por diferencias con Rita Maestre. Formaron entonces el grupo de los carmenistas, posteriormente clave para la viabilidad del Ayuntamiento, y llegaron a denunciar a su antiguo partido por presunta financiación ilegal. Pero Recupera Madrid ha terminado por ser la escisión de la escisión. E Higueras la escisión, de la escisión, de la escisión. Un trabalenguas que advierte de los problemas que la izquierda tendrá en su cita con las urnas en la capital. Aunque los supervivientes del carmenismo tengan esperanzas: "Hay margen para una candidatura distinta en la izquierda".